2ª) Empatía.
«Toda energía etérica tiende a ser empática con sujetos y objetos indistintamente de su estado de consciencia y de la intención y propósito de los mismos»
Creo que todos conocen el significado arquetípico y etimológico de la palabra empatía, pero también creo que muy pocos conocen el significado paradigmático que trataremos hoy para conocer profundamente por qué la empatía es considerada la segunda norma de la energías etéricas. Para ello comenzaremos conociendo la raíz paradigmática de esta palabra, pues ahí nace su significado arquetípico que es el que fue cambiando a través del tiempo y la historia hasta el día de hoy.
Todo comienza en el antiguo Egipto, más precisamente en el reinado de Tutmosis III, el creador de la Gran Fraternidad Blanca de Egipto, agrupando los grados superiores de las Escuelas de los Misterios para unificar el conocimiento en un solo lugar. Como ya sabrán, Tutmosis fue uno de los monarcas más importantes y poderosos de los tres mil años de civilización faraónica y del cual los rosacruces tomaron gran parte de su conocimiento místico y metafísico.
Luego de unificarse todo en una sola escuela mayor, se pudieron organizar los distintos tenas y conocimientos metafísicos diseminados por las escuelas del misterio y ponerse de acuerdo con conceptos e ideas que antes por su desorden y fragmentación, hasta parecían antagónicas. Fue en ese momento histórico que la capacidad de leer y transmitir información energética se le dio un mismo nombre por primera vez, claro está que este no era el vocablo ahora conocido, sino otro cuya traducción aproximada sería, “el mensajero de Osiris”, por su capacidad de leer y transmitir información entre el cielo y la tierra, o sea, empatizar energéticamente entre el hombre y la creación o viceversa, entre la creación y el hombre (sujeto/objeto/objeto/sujeto). Desde ese entonces la raíz paradigmática de lo que hoy conocemos como empatía, fue la comunicación energética.
Las energías etéricas son empáticas porque comunican energéticamente sujetos y objetos sin distinción de intenciones y propósitos, consciencias e inconsciencias, sean orgánicos o inorgánicos, mentales o espirituales, etéricos o físicos, vivos o muertos, toda materia y energía existente en este espacio matricial y otros por arriba y por debajo está comunicada empáticamente por las energías etéricas. Conociendo ahora la raíz paradigmática de la segunda norma de las E(e), podremos avanzar y conocer la primer ley de la empatía que veremos más adelante. Por ahora es suficiente con que comprendan el concepto paradigmático de “Empatía” y que nada tiene que ver con el concepto actual y conocido de la misma.
(Lucas 6: 37-42)
37. No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.
38. Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir.
39. Y les decía una parábola: ¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en el hoyo?
40. El discípulo no es superior a su maestro; más todo el que fuere perfeccionado, será como su maestro.
41. ¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?
42. ¿O cómo puedes decir a tu hermano: Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo, no mirando tú la viga que está en el ojo tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano.