El nacionalismo ha muerto, el nacionalismo vasco y catalán ya no existen, no son identitarios sino pútridamente globalistas, y con ellos sus epígonos regionaliistas como Coalición Canaria o el Partido Regional de Cantabria del inefable Miguel Ángel Revilla. Sus fundadores, Sabino Arana y Enric Prat de la Riba, no sólo no les reconocerían sino que abominarían de esos partidos y los maldecirían. Son traidores, meras maquinarias de poder partidarias, movidas por la codicia de los parásitos, pero ya no tienen como fin la defensa de una etnia y una cultura. sino su completa destrucción. Es un hecho decisivo, que no sólo se ha producido en estos lares sino también en el Partido Nacional Escocés. Es como una mutación regresiva la que ha tenido lugar mediante la chequera de Soros y de los prebostes globalistas.

El Partido Nacionalista Vasco del vendido Iñigo Urkullu o Esquerra Republicana de Cataluña del vendido Pere Aragonés son cáscaras vacías, escoria putrefacta, verduras de las eras manriqueñas. Incluso Bildu de Arnaldo Otegi se ha vuelto asquerosamente globalista y sirve a los designios de las élites. De hecho, en el primer ataque de la timo vacunación esos partidos no ha defendido a sus comunidades, que están destruyendo como valores autóctonos, sino que las han atacado con saña, con virulencia, con especial radicalismo. El gobierno vasco del vendido Iñigo Urkullu ha pretendido la timo vacunación obligatoria y el gobierno catalán del vendido Pere Aragonés ha pretendido a los jóvenes imponerles la cartilla de timo vacunación completa. Arnaldo Otegi no ha tenido otra cosa que decir que “vacunarse, vacunarse, vacunarse”, repitiendo tres veces la consigna para impresionar más, de manera indeleble, como manda el tarado genocida de Bill Gates. Está mutación del nacionalismo al servilismo globalista la ha perpretado la Open Society de George Soros.

El concepto de “Sociedad abierta” lo toma el filósofo austriaco Karl R. Popper del francés Henri Bergson y Soros afirma ser discípulo de Popper, pero se engaña y manipula el pensamiento de Popper, contenido en su libro “La sociedad abierta y sus enemigos”. Se trata de una reflexión del hitlerismo y de sus bases filosóficas, que Popper analiza en la Grecia clásica, contraponiendo la Atenas de Pericles, que denomina “sociedad abierta”, de Esparta que identifica con la Alemania nazi, Sócrates con el eugenésico Platón. Critica Popper el concepto de “identidad” como un sinsentido que lleva a las peores conclusiones y censura la “ingeniería social” que produjo las trategias del siglo XX al tratar a las personas como medios y no com fines, como mero concreto.

Su pretendido discípulo George Soros -fue alumno de la London School of Eeconomics- hace una lectura perversa de Popper planteando la diversidad enfrentada a la identidad, mediante una inmigración invasiva, y la destrucción de los autóctonos, pero esto es solo un engaño, una quimera enloquecida, pues se sustituye una identidad por varias yuxtapuestas y en conflicto; varias identidades no producen una sociedad nueva, sino la destrucción de la existente. El propio Karl R. Popper se rectifica o matiza a si mismo en su libro “La responsabilidad de vivir” cuando indica que las sociedades precisan “regularidades” para poner establecer diálogos internos y convivir. Esas identidades yuxtapuestas y en pugna no tienen tales “regularidades”.

Karl R. Popper critica muy agriamente a la “ingeniería social” y a sus ejecutores y les propone que antes deberían ejercitar la “ingeniería social fragmentaria” en pequeñas poblaciones, en minúsculos territorios para evaluar los efectos perversos o no deseados de sus teorías. Sin embargo, el amoral psicópata de George Soros considera que la Unión Europea tiene las dimensiones para ser objeto de la “ingeniería social fragmentaria”.

El nacionalismo se ha prestado con alborozo condicioso a su propia muerte, a su poripio suicidio, en una mutación extraña y rocambolesca. El nacionalismo, en propiedad, ha muerto.

Firman este editorial Enrique de Diego por Rambla Libre y Javier Villacorta por El Diestro

Se adhieren: Colin Rivas, de Colin Rivas Show, Julio García, de Canal 5Tv, Martín Sánchez, cantante, Manuel Romeral, presidente de la Asociación Europea de Ciudadanos contra la Corrupción, Juan Vicente Palleter, Juan Manuel Ramos Mateo, presidente de Policías por la Libertad, Magdalena del Amo, Mariló Martínez Herrera, afectada por las timo vacunas, Bartolomé Hueso Ruiz, Aurora Morte, Bernardo Aranda, Juan Núñez (Colectivo Espartanos 300 de Barcelona), Iván Ramón Peña, Alejandro Díaz.

 

3 Comentarios

  1. ¿Pero qué esperábais de esos garrulos?
    No entendéis la submente de los nacionalistas.
    Han sido ellos los que han preparado el terreno para que cuajen todo tipo de enfermedades, y de hecho han sido nuestro mayor cáncer, el de todo el país, digo.
    Son mezquinos, mermados intelectuales, y desprovistos de capacidad de sentir afecto sano y muchos otros sentimientos positivos.

    No les mueve el amor por su terruño y su “etnia” sino un odio ciego a otros, sumado a mucha frustración y complejos y delirios de grandeza, que les nubla la razón. Tanto Urkullu como Arana, como de la Riba como Aragonés; no es que haya habido una mutación, es que la destrucción del terruño “protegido” desde el odio, la ira irracional, la mentira y la endogamia enfermiza termina precisamente en autoaniquilación.

  2. Al final todo se reduce a lo meramente económico. Se venden al mejor postor al igual que los musulmanes, mucho arrodillarse, pero cuando hay “many” de por medio, ná de ná.

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