«Ayer me dieron la extremaunción y hoy escribo esta; el tiempo es breve, las ansias crecen, las esperanzas menguan y, con todo esto, llevo la vida sobre el deseo que tengo de vivir…».
Esto lo escribió Cervantes en la dedicatoria de su última obra a su mecenas, el conde de Lemos, pocos días antes de entregar su alma. Murió el Príncipe de los Ingenios –con las botas puestas— el 23 de abril de 1616 –es posible que fuera el 22—, motivo por el cual se decidió en los años 90 del siglo pasado celebrar con esta efeméride el día del libro, haciéndolo coincidir con dos óbitos más: el de Shakespeare y el del inca Garcilaso de la Vega.
Parece que fecha tan señalada, en el mundo de las letras, debería guardarse solo para las grandes ocasiones de la cultura y de los libros en particular. Y este es el caso de nuestro recordado hoy en el centenario de su nacimiento, Salvador Freixedo, escritor comprometido con el hombre y su destino, y divulgador incansable de la falacia que lo somete, cuya luz vino a alumbrar este mundo el mismo día que se apagaba la de Cervantes.
Porque una luz muy especial recibió este nuevo embajador de la Verdad Universal en el momento de su nacimiento, que le llevó a cruzar océanos y a transitar caminos angostos e intrincados; escenarios, estos, vetados al común, y solo aptos para espíritus libres, buscadores de la verdad a ultranza y defensores del género humano.
No de otro modo, su figura aparece revestida de la misma gallardía y templanza que otrora mostrara el héroe de Lepanto: ambos paladines, en combate desigual, contra esos Briareos que amenazan con relegarnos de continuo a la miserable condición ovina.
Me viene, a propósito, esa ingente obra nacida del talante arrojado, el verbo fácil, la mente presta y el corazón limpio de nuestro apreciado ovnílogo: La granja humana, libro este, que asusta por la claridad y simpleza con la que aborda el tema más complejo y oscuro que ha acompañado siempre a la especie sapiens en el uso de su inteligencia; desde la piedra de los menhires al cuarzo de nuestros relojes.
Sorprende la actualidad de esta obra que, con más de treinta años de adelanto, ya nos avisa del cambio inminente que es necesario implementar en el seno de nuestra civilización, so pena de desaparecer –¿una vez más?– : «Hace falta un fermento de seres humanos evolucionados que, poco a poco, vayan cumpliendo la ardua tarea de convencer a sus hermanos de que ya va siendo hora de que nos rebelemos contra los “señores invisibles” y empecemos a comportarnos como seres realmente racionales, repudiando a unos líderes marionetas que lo único que hacen es defender sus posiciones de privilegio y mantener vivas las discordias que dividen a la humanidad».
Porque Salvador fue –que diríamos hoy– un trabajador por cuenta ajena al servicio de las más altas instancias que reinan sobre el universo. Aunque se pasó la mitad de su vida militando entre aquellos que se arrogan la potestad de considerarse sus representantes en este mundo, tuvo la rara lucidez y los arrestos suficientes de advertir el engaño a escala planetaria, lo cual le llevó a desertar del batallón de las apariencias y de las vanas intenciones: de renunciar, en definitiva, a una fe en una salvación hecha a la medida de las necesidades mundanas y no divinas. A partir de ese momento, él ya solo obedecerá las órdenes directamente de su “Superior” a través de su propia conciencia, sin otro intermediario que su propia inteligencia, ni más ceremonia que el ejercicio de la humildad, la entrega amorosa y la generosidad hacia sus congéneres.
Mucho trabajó Salvador para el Soberano Patrón, y muy bien tuvo que hacerlo, que no pensó en jubilarlo hasta rozar la centuria. Vida dilatada al servicio del más noble de los ideales: la salvación de sus hermanos, trabajó hasta el fin de sus días con la mirada puesta en la “excelsa máquina” que desde los cielos nos gobierna, y los pies en la tierra; pues no se entiende el uno sin el otro sino en completa armonía.
Las huellas de sus pisadas se encuentran en los libros que nos dejó. Testimonio certero de su vocación al servicio de la causa humana, no solo es deber de gratitud recordarle en el día de su nacimiento, sino tratar de darle una nueva vida con cada libro que se abre en cualquier parte del mundo.
Cien años con Salvador. Siempre tan actual. Siempre tan esclarecedor y luminoso. Siempre con nosotros.
“Los dueños invisibles de la Tierra”. Como sabiamente decía Salvador Freixedo. Es la Federación misma.
Nuestras amigas Swaruu y Alenyim nos aclaran “Saben que la estructura social de la Tierra es que el pueblo está hasta abajo en la pirámide. Luego las clases sociales, politicos, clérigo, sociedades secretas, Illuminati. Arriba de los Illuminati están lo que muchos llaman “Los controladores.” Que son? Alianzas reptiles… Alianzas con otras razas regresivas. Arcontes y seres parasitarios del 4D. Ya hemos hablado de que eso es manifestación humana”
https://www.swaruu.org/es/transcripts/federacion-galactica-su-papel-en-la-tierra-comunicacion-extraterrestre-taygeta-pleyades
Si buscas bien, en el cine encontrarás las preguntas y las respuestas: Están vivos (1988).
John y Frank asisten a una reunión secreta de la Resistencia Humana.
Cuando, tal vez, ellos siempre han estado aquí. Quizá se alimentan con nuestro odio, viendo como nos matamos los unos a los otros.
https://youtu.be/zFjUGLkGAe0
Por cierto, el joven Miguel de Cervantes compartió con los moriscos la misma tierra y conoció el problema político que oponía esta comunidad a la Corona. Sabía también, como todo español de la época,el peligro que representaban los moriscos como cómplices y guías de los corsarios en sus ataques a las costas levantinas. Pero es en Argel donde estará enfrentado por primera vez, en cuanto cautivo cristiano,a la enemistad que sentía el morisco hacia los españoles…
Parece que fue ayer,y el tema sigue siendo tan actual, ahora los inmigrantes marroquíes presionan con su Estado islámico con la intención de quedarse Ceuta y Melilla,seguramente apollados por los ingleses que no quieren devolver Gibraltar,y dirigidos por neocorsarios cuyo esclavo es Pedro Sánchez.
La intromisión del falso Papa Bergoglio en la Iglesia Catolica,provoca situaciones extrañas como nuevas fórmulas de rito que se parecen cada vez más a una secta milenarista o evangelista (antijudia?),incluso intentando que bailemos sardanas…en fin.
Sea por este motivo o por otro…cada vez más los jóvenes se alejan de la verdadera Religion,en especial aquellos guiados por partidos políticos que practican el proselitismo…ya que ahora ser de un partido implica también practicar una religión por ejemplo el budismo…otros el satanismo…el luciferisno…o el culto ortodoxo bizantino de los comunistas soviets,de este modo la Iglesia Catolica se ve rodeada de enemigos desde los clásicos a los nuevos reunidos en el propio Estado,en forma de partidos políticos ateos.
Siembre es grato recordar aquel ‘manco’ escritor…que perdió su brazo en la Batalla de Lepanto.
Gran hombre,gran estudioso de todo tipo de temas paranormales,y un EJEMPLO de hombre valiente y objetivo en sus escritos y opiniones del mundo esclavo en el que estamos…
Supo llegar a la mente humana, supo dar formalidad y veracidad a sus informaciones, gran luchador que quedara en la historia