No se preocupen esto no va de vacunas del Covid si no de las otras, las de toda  la vida, inyectarse es un acto de fe, una religión y la prensa oficial y la medicina  también oficial, se preocupan de que todo el mundo desde hace más de un  siglo no solo las acepte, sino que cada vez que un Gobierno o la OMS, nos  cuenten que son “muy buenas” pongamos nuestros hombros o brazos para  inocularnos unos “productos” de los que no sabemos ni siquiera su  composición… 

Y lo peor no es que ignoremos todo ni tampoco si se han probado, si son  eficaces y si carecen de efectos secundarios… NO, en principio nos creemos  TODO lo que nos cuentan. 

¿Alguna vez en el último siglo nos han contado una sola verdad? En las universidades de prestigio y en las carreras de Medicina o Farmacia los  profesores se complacen en explicar que las vacunas son “ciencia” sin ir más lejos. Ninguna explicación, sino que la Historia ratifica que estos productos  consiguen erradicar la mayoría de las enfermedades infecciosas y que gracias a  ellas la esperanza de vida crece sin parar. 

Las nuevas, las del Covid proceden de una tecnología extraordinaria, por  supuesto poco o nada probada, pero las “viejas” son super seguras, cuesta a las  compañías farmacéuticas más de 10 años de intensos y caros experimentos y  pruebas para conseguir su autorización y que se puedan inyectar en nuestros  cuerpos ingenuos. 

La prensa main stream nunca ha parado de contarnos sus increíbles beneficios,  como los estamentos médicos constituidos por infinidad de asociaciones de  “vacunología”, inmunólogos famosos, OMS, Ministerios de Sanidad, Agencias  Nacionales del Medicamento, médicos generalistas, en fin, que el que propone  una sencilla lectura para informar a los futuros inyectados, recibe de inmediato  los mayores insultos inimaginables desde complotista, de extrema derecha,  antisemita, acientífico, vendedor…  

Todos estos organismos olvidan contarnos que los fabricantes acumulan en esa  Historia decenas de miles de millones de multas por productos defectuosos,  mortales y en el mejor de los casos, inútiles e ineficaces y que las condenas por  los tribunales de justicia no caben en una enciclopedia de 20 tomos. 

Antes de inyectarse cualquiera de estas vacunas los médicos que nos las  recomiendan deberían informarnos de los párrafos anteriores y sobre todo de 

sus principios activos, adyuvantes y excipientes con una aclaración sobre cómo actúan, como se distribuyen en el cuerpo humano y cuál es la idea genial en la que se apoyan para prevenir las enfermedades. 

Esa idea genial es el principio que dio origen a las vacunas y que no es otra que  la teoría del “virus atenuado”, descubierto por el premio Nobel Louis Pasteur  en los años 1880 y que a este químico le valió el distinguido premio… y que al  cabo del tiempo los mejores científicos del mundo demostraron su FALSEDAD. 

La “Sanidad” y la OMS 

Desde comienzos del siglo XX, la medicina comenzó su nueva era, olvidándose  de los conceptos anteriores y la medicina basada en las plantas – Fitoterapia – y la naturaleza, fue sustituida siguiendo las directrices de Rockefeller en una  nueva apoyada en las moléculas químicas, sobre todo las derivadas del  petróleo. 

Hasta ese momento los médicos y sus terapias buscaban curar las infecciones y  las enfermedades. 

La nueva medicina e industria del medicamento se orienta desde el inicio a  ocultar los síntomas de las enfermedades… 

Usted elige, o curar la enfermedad u ocultar los síntomas. 

La industria farmacéutica lo tiene muy claro: si le cura la enfermedad pierde el  “cliente” si esconde los síntomas, el cliente sigue con su adicción al  medicamento… 

Como todo el mundo sabe, TODAS las vacunas son gratuitas (aunque las paga el  Estado); hay un aforismo francés al caso que dice: “si algo es gratuito, el  producto eres tu”… desconfíe SIEMPRE de todo lo que es gratuito. 

Las universidades se volcaron en el nuevo concepto desacreditando las denostadas terapias naturales que, por cierto, siguieron y siguen vigentes en la  mayoría de los países de Asia, sobre todo en la India y China. 

Sobre las vacunas de ARN, una buena parte de la ciencia oficial y al servicio de  BIG PHARMA, empieza a inquietarse por la sobremortalidad y los efectos  secundarios que llevan a la muerte a numerosos deportistas, actores,  médicos… 

Algunos científicos comparan las estadísticas históricas de las “viejas” vacunas  con estas recientes y los resultados son espeluznantes en contra de las de ARN.

Los árboles, sus hojas y ramas esconden el bosque de las antiguas vacunas,  eficaces, seguras y con poquísimos efectos secundarios… 

Si lo anterior es una somera introducción, para entrar en faena es preciso  recordar qué es un medicamento – y las vacunas lo son – qué rige referente a  medicamentos y vacunas que se van a inyectar a pacientes y las leyes que les  atañen son dos, la Ley del Medicamento (BOE del 25 de julio de 2015) y la ley  del “Paciente” (BOE del 15/11/2002). 

Un medicamento necesita por obligación legal la prescripción o receta de un  médico y, un medicamento se administra a un paciente ENFERMO y una vacuna  que, por supuesto es un medicamento y, también necesita prescripción médica, se administra a una persona – no un paciente – SANO… 

El párrafo anterior es central para comprender que la inyección de una vacuna  es algo MUCHO MAS SERIO de lo que pensamos, ya que introducimos en un  cuerpo SANO un medicamento que puede tener – y tiene – efectos secundarios  leves, graves o incluso producir la muerte. 

Se deduce que a una vacuna le tenemos que exigir mucha mayor seguridad que  a un medicamento.  

Se impone siempre la prudencia, la precaución y toda inyección debe realizarse  con una información y reflexión previas que NO pueden durar cinco minutos.  Nadie debe introducir en su cuerpo una vacuna sin la obligatoria prescripción médica…. La pregunta que procede es si, ¿ustedes conocen a alguien que se  haya inyectado una vacuna, haya tenido en sus manos una receta firmada por  un galeno? 

Y NO me refiero a las vacunas Covid, sino a TODAS las demás, las calificadas como “vacunas tradicionales”…. NUNCA ni NADIE ha tenido en sus manos la  correspondiente, obligatoria y legal prescripción… 

Si ningún médico en la Historia de las vacunas se ha dignado firmar una receta  siendo OBLIGATORIO para que el “vacunador”, enfermero, médico o  farmacéutico, la inyecten, ¿por qué NO hay ningún juez que interviene? Invito a  los Tribunales de Justicia que se lean las leyes y, luego, las hagan cumplir. 

No solo se incumple la Ley – las dos leyes referidas – sino que los órganos legislativos olvidándose de sus propias leyes se ciscan en la segunda parte de  esta triste y macabra historia que no solo exige la prescripción sino la 

Obligatoriedad de la lectura del folleto de la vacuna para que según la Ley del  Paciente de 2002 pueda darse el “consentimiento informado”. 

Siguiente pregunta: ¿conocen ustedes algún vacunado al que le hayan leído el  folletito correspondiente? NUNCA y NINGUNO. Repetiría lo mismo sobre los  Jueces…. ¿Existen estos señores o es sencillamente algo previsto en la  Constitución y que no se ha desarrollado todavía? 

NO, NO se extrañen lo mismo sucede en los demás países de garantías “democráticas”, es decir en NINGUNO porque la “democracia” es algo que nos  regalan para que, ingenuos e inocentes, podamos depositar un voto en estas  dictaduras y podamos vacunarnos a las órdenes de las elites que las dirigen (las  dictaduras) 

Por supuesto que los que, sin ser Juristas sino humildes técnicos o gentes de  ciencia respetuosas con la verdad y el amor a los demás siguiendo el Evangelio  de Cristo, de forma automática pasamos a ser unos difusores de fakes news, de  asquerosos complotistas… 

Hasta hora, NO he mencionado ninguna vacuna, pero, pero si me detengo en  esta línea ya habré suscitado las iras de los “cazadores de fakes news”. Mi  médico de cabecera me ha prescrito una inyección contra los censores de  fakes”… estoy inmunizado… 

Un medicamento y una vacuna 

Antes de entrar en faena significar que tanto el uno como la otra constan de  tres elementos: 

Principio activo, Adyuvante y Excipientes 

Principio activo 

Es el núcleo central del medicamento, el que nos cura o nos mata… Adyuvante 

Es el potenciador del principio activo y cuya misión es que éste “aumente su  potencia”. Casi siempre el adyuvante provoca una inflamación del sistema  inmunitario. 

Si hablamos de las “vacunas tradicionales”, el principal adyuvante desde 1970  es el ALUMINIO… y sigo con ellas y NO con las “nuevas de ARN Messenger”.

Y qué decir del ALUMINIO… lo primero es que es un METAL, NUNCA presente  en nuestro organismo… como el hierro, el magnesio, el sodio, el silicio, el  azufre, el carbono, el potasio… y si se supone que DIOS NUESTRO SENOR NO lo  ha incluido en nuestro cuerpo es porque NO es ni aceptable ni bueno. 

Pasamos a comentar las investigaciones de un científico inglés, Christopher  EXLEY de la universidad de Keele en el UK.  

Desde hace casi tres decenios EXLEY investiga los cerebros de fallecidos con  enfermedades o síndromes de Alzheimer, ELA o Autistas y en TODOS encuentra  cantidades ingentes de ALUMINIO… 

NUNCA EXLEY relaciona ALUMINIO con VACUNAS, presenta el peligro sobre  nuestros cerebros del indicado ALUMINIO. Nada más. 

Y la prueba del algodón de la veracidad de sus estudios científicos se manifiesta  cuando su Universidad le envía una comunicación en mayo de 2021 indicándole que sus financiadores – léase BIG PHARMA – le han CORTADO el dinero y le  despiden como profesor e investigador con efectos a principios del curso  universitario 2021-2022… 

Enterados de la noticia, relevantes científicos de todos los países solicitan a su  Universidad que le reintegre en nombre de la “verdadera ciencia”… Keele lo  reintegra y EXLEY continua con sus trabajos… 

Surgido el ALUMINIO y mencionada la INFLAMACION, es necesario explicar que  cuando una enfermedad se manifiesta en nuestro organismo la consecuencia  es una INFLAMACION más o menos fuerte en función de la gravedad de la  enfermedad. 

Y la INFLAMACION se debe a una reacción de nuestro sistema inmunitario para  combatir la enfermedad. Repasen lo anterior, cuando escribimos que a la  inyección de una vacuna el organismo reacciona con una INFLAMACION… como  comprueban, de entrada, esa inyección vacunal NO supone nada bueno. 

Llegados al ALUMINIO, necesitamos otra precisión más y perdemos la cuenta  de tanta precisión… pues al común de los mortales se le ocurre una  perogrullada y es que, ¿por qué nos inyectan la misma dosis de vacuna a un  obeso de 140 kilos que a una chica que pesa 45 kilos… 

Los médicos franceses, complotistas, por supuesto, califican la trascendencia  de tener en cuenta lo que denominan “le terrain”, en nuestra tierra de 

garbanzos, “el terreno” y que, como es lógico, cada “terreno” es diferente del  otro. 

La pregunta que nos hacemos, ¿alguien le ha razonado que, para inyectarse una vacuna es preciso tener en cuenta no solo el factor peso, sino otros  muchos factores? 

Nadie, los contertulios, médicos, periodistas y demás expertos en materia de  Salud le han comentado algo de esto? Vacúnese y vaya lo antes posible, que  esta vacuna es “buena, muy buena, impide la transmisión, el contagio y le  evitaré tener que ir al hospital”… además que vacunándose se hace un favor a  sí mismo, a su abuelita y a la vecina del quinto… y todo está probado por una  serie de estudios científicos publicados en prestigiosas revistas y que si no se  vacuna NO podrá montarse en un avión, ni ir al cine, ni al restaurante… 

Para no ser más aburrido – le agradezco la lectura y su enorme paciencia – le  mencionaré que tanto los principios activos, como los adyuvantes o los muy  numerosos excipientes de cada medicamento/vacuna pueden provocarle  ALERGIAS nefastas y bastantes veces invalidantes y/o mortales, y sin mencionar  que cada ADYUVANTE que introduce en su cuerpo provoca una disminución de  su sistema inmunitario… en fin que antes de inyectarse algo, conviene rascarse  la cabeza un par de veces. 

Los Terceros componentes de medicamentos y vacunas son los “Excipientes” con diversidad de funciones… conservación, esterilización, etc.  

En cada folleto deben de constar TODOS los excipientes. Para esclarecer a la  persona sana que decide inyectarse una determinada vacuna, le recomiendo  que se lea la lista de “excipientes” y compruebe cada uno en el Reglamento de  Productos Tóxicos, denominado REACH y donde constan esos productos. En  muchos casos verificaran que uno, varios o todos los excipientes se encuentran  … en el REACH… Y en la mayoría de los casos, el Reglamento indica que el  producto tóxico en cuestión NO es apto ni para el consumo humano ni animal. Verifíquenlos siempre y luego decidan. 

El Reglamento CE 1907/2006 REACH sobre sustancias y mezclas químicas en  vigor desde junio de 2007, y su objetivo es mejorar la protección de la salud  humana. 

La parte segunda versara sobre la verdadera ciencia de las falsas vacunas y las  opiniones de los científicos mas prestigiosos, comenzando por el Dr. Jules  Tissot que ya hace mas de un siglo desmonto el “tinglado” de estos malvados 

inventos. Y su tratado de Microbiología que destrozó la Biología y las  reacciones del organismo a los patógenos -virus y bacterias – no solo siguen  vigentes en 2023 sino que muchos investigadores actuales siguen ratificando la  teoría de Tissot sobre la anatoxina… 

De pasada escribiremos sobre el Dr. Béchamp otro genio de la medicina  coetáneo de Pasteur, su enemigo mortal al que se enfrentó toda su vida,  calificando al “dios de las vacunas” como el mayor impostor de la Historia de la  ciencia médica…es necesario desmontar el “mito” de Pasteur en el que las  farmacéuticas se han apoyado para promover sus vacunas falsas, ineficaces y  muchas veces, mortales. 

Mientras llega la segunda parte, vaya al supermercado, cómprese un par de  cervezas, encargue en el bar de su confianza – muy importante- otro par de  raciones de “bravas” porque la continuación es mas pesada que la primera…y  NO SE VACUNE, NI SUS HIJOS, NI SUS NIETOS. 

El paracetamol, se me olvidaba… 

Gracias por la lectura 

España por Cristo

 

9 Comentarios

  1. La medicina es el oficio de entretener a los enfermos mientras estos se curan por sí mismos.

    Si buscas bien, en el cine encontrarás las preguntas y las respuestas: Están vivos (1988).
    John descubre en una iglesia cercana a un grupo de conspiranoicos.
    Cuando te dicen que ellos viven y nosotros dormimos.
    Disidencia + Acción = RESISTENCIA
    https://t.me/resistencia_costa_dorada/240

  2. Actualmente las vacunas son como un dogma sagrado, nadie lo puede cuestionar, pero en realidad no tenemos ni idea de lo que nos inyectan a nosotros, a nuestros hijos ni a nuestras mascotas. El principio de medicar a personas o animales que están sanos yo tampoco lo veo claro. Ademas los medicamentos actuales no se orientan a curar, si no a “cronificar” la enfermedad, tal y como dice el articulo, se trata de un negocio puro y duro.
    Un saludo.

  3. Se nota que quien escribe, Ignace Caballero Aurrecoechea, conoce a fondo y ha asistido a las mejores facultades de medicina. Puede que sea incluso un profesor de Harvard o Yale a quien su modestia le hace utilizar tan ingenioso seudónimo…

  4. Desde la plandemia muchos hemos aprendido tanto que desconfiamos de los títeres sicarios de nuestro verdadero enemigo. Dios nos proteja de los dueños de la ONU

  5. También han muerto médicos tras vacunarse y personal de los hospitales,todo un drama por qué los que se negaron a inyectarse fueron expulsados,y ahora que ya saben todos que las UCIS se llenan de gente con efectos secundarios por las inyecciones…se ven en una terrible tesitura,tener que explicarlo a la gente.Y para colmo,incluso muchos compiten por ocupar esos puestos vacantes…de estos no sabemos nada,harían lo mismo por dinero?,serán conscientes de los efectos de estas armas biológicas?.

    Cuanta gente quedará incapacitada para trabajar,o terminarán siendo dependientes?.

    Por otro lado,los verdaderos culpables son una especie de aforados globales,no pueden ser jugados ni condenados…cuando lo justo sería no meterles en la cárcel,sino someterlos a una vacuna diaria durante una semana,comenzando por la VonderLeyen.

  6. Y lo más triste,han matado a mucha gente especialmente a muchos ancianos si…pero también a niños inocentes,y ahora los jóvenes deportistas mueren de ataques cardíacos.

  7. Magistral artículo.
    Espero ansioso la segunda parte.
    Y para que no se nos escape, ruego se titule igual.
    Espero que el autor no se olvide de Gatti y Montanari.

Comments are closed.