Hace muchos años el filósofo griego Sócrates, definió perfectamente que mínimas características se deberían de tener para estar capacitado para gobernar, para dirigir al pueblo. Básicamente nos dejó dicho que deberían ser personas de un largo recorrido social en el que y durante, hubieran demostrado una integridad absoluta, además de capacitación en las áreas en las que se hubiera movido, naturalmente, también en su larga trayectoria tendrían que haber demostrado su vocación de servicio público, de amor a la sociedad y sobre todo de respetos a las leyes y normas establecidas. En definitiva gente honesta y con mucha experiencia.
Hoy en España tenemos infinidad de organismos públicos, de instituciones denominadas de mil maneras, observatorios, Comité etc. etc., que en teoría sirven para “asesorar” a la gente que nos gobierna, ya saben, en la mayoría de los casos, gente carente absolutamente de recorrido social y sin demostrada capacitación en ningún sector de la sociedad. Estos comités de expertos existentes actualmente, en general es verdad que están compuestos de gente en cierta manera sobresaliente, pero por razones que todos intuimos, no se hacen notar.
En general, sus miembros muy bien remunerados con dinero público, no se hacen notar, al menos en el sentido en el que se podría beneficiar la sociedad que es quien le paga, que es quien mantiene, estas instituciones. Como mucho, hacen algún informe tocando los temas muy tangencialmente y muy diplomáticamente para que solo los expertos, alcancen a ver más o menos, lo que quieren decir y eso cuando lo dicen.
Si en España tuviéramos un comité de sabios, de verdaderos expertos, además de independientes, llámenlo como quieran, compuesto por gente con un recorrido social intachable y con capacitación, seguramente nuestra democracia, entre comillas, no tendría el nivel de absoluta devaluación que hoy padece.
Imaginen que este comité de expertos, fijara las retribuciones de la clase política, de los gobernantes en general, de los funcionarios, se imaginan que este comité de sabios, fiscalizara los convenios colectivos que aprueban sindicatos y Gobierno y que dejan al margen al que paga al empresario, se imaginan que este comité de experto fiscalizara las materias para la formación de nuestros estudiantes. Imaginen que este comité de experto fiscalizara las mínimas condiciones para ejercer ya de maestro, ya de jurista, ya de sanitario.
Puedo asegurarles, que haberlos haylos, seguramente con mayor conocimiento y experiencias que en cualquier otro país del mundo pero nuestros políticos nuestra clase política en general , también muy aventajados en defender “su comer” ya se preocuparán de que estos señores no participen en la vida pública española. A los hechos me remito y a lo documentado, a lo largo de la historia.
La plutocracia oculta nos ha dicho en su Foro Davos que el futuro Gobierno Mundial Único estará compuesto por políticos, grandes empresarios y comités de expertos. No nos ha dicho que ya controlan a las grandes corporaciones, los políticos (mediante masonería, manipulación social y pucherazos electrónicos) y a los comités de expertos (procedentes de universidades actualmente famosas que están financiadas y controladas por ellos).
Su poder se basa en el engaño y en nuestra estúpida credulidad