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Suponemos que, a estas horas, la mayor parte de todo aquel que nos lea habrá visto los dos vídeos que los periodistas de Project Veritas con las escandalosas revelaciones que obtenían de un directivo de la compañía Pfizer en EEUU llamado Jordon Trishton Walker, al que identificaron como director de investigación de la compañía.

En este vídeo, el personaje revelaba que era la propia compañía farmacéutica la que cultivaba las supuestas variantes del COVID con la idea de seguir inoculando a la gente a destajo, supuestamente, con la vacuna adecuada para esa hipotética variante: “Una de las cosas que estamos explorando es, ¿por qué no lo mutamos [COVID] nosotros mismos para poder crear, desarrollar de forma preventiva nuevos vacunas, ¿verdad? Entonces, tenemos que hacer eso. Sin embargo, si vamos a hacer eso, existe el riesgo de que, como pueden imaginar, nadie quiera tener una compañía farmacéutica que mute virus de mierda”.

Ante esta declaración hemos de decir que como, bajo nuestro punto de vista, el virus no existe, es tremendamente difícil generar algún tipo de variante del virus original. Y no decimos que no exista porque seamos expertos de nada, simplemente, cada vez que se ha pedido a distintos gobiernos, incluido el español, una prueba de su existencia, estos han sido incapaces de demostrarla.

Pero volviendo a lo sucedido en los dos vídeos publicados por Project Veritas, en el segundo de ellos, Jordon Trishton Walker, es asaltado por el responsable del grupo periodístico, James O’Keefe, y el empleado de Pfizer se pone histérico, llegando incluso a tratar de romper las tabletas y las cámaras de los periodistas, justificando sus palabras anteriores como que estaba mintiendo por una supuesta cita que estaba teniendo.

El vídeo ha tenido tal repercusión que, por un lado y como era de esperar, ha sido censurado en el canal de YouTube de Project Veritas.

Por el otro, la propia compañía Pfizer respondía el pasado 27 de enero con un comunicado, que pueden leer a través de este enlace.

El comunicado, por un lado, trataba de responder a lo denunciado en el famoso vídeo, que ya ha visto casi toda España, excepto los que siguen con su despiste crónico: “En el desarrollo continuo de la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19, Pfizer no ha realizado investigaciones de ganancia de función o evolución dirigida. Trabajando con colaboradores, hemos realizado investigaciones en las que se ha utilizado el virus SARS-CoV-2 original para expresar la proteína espiga de nuevas variantes preocupantes. Este trabajo se lleva a cabo una vez que las autoridades de salud pública han identificado una nueva variante de preocupación. Esta investigación nos proporciona una forma de evaluar rápidamente la capacidad de una vacuna existente para inducir anticuerpos que neutralicen una variante preocupante recientemente identificada. Luego ponemos estos datos a disposición a través de revistas científicas revisadas por pares y los usamos como uno de los pasos para determinar si se requiere una actualización de la vacuna.

Además, para cumplir con los requisitos regulatorios globales y de EE. UU. para nuestro tratamiento oral, PAXLOVID™, Pfizer realiza trabajo in vitro (p. ej., en una placa de cultivo de laboratorio) para identificar posibles mutaciones de resistencia al nirmatrelvir, uno de los dos componentes de PAXLOVID. Con un virus que evoluciona naturalmente, es importante evaluar de forma rutinaria la actividad de un antiviral. La mayor parte de este trabajo se realiza mediante simulaciones por computadora o mutaciones de la proteasa principal, una parte no infecciosa del virus. En un número limitado de casos, cuando un virus completo no contiene ninguna mutación de ganancia de función conocida, dicho virus puede diseñarse para permitir la evaluación de la actividad antiviral en las células. Además, Los experimentos de selección de resistencia in vitro se llevan a cabo en células incubadas con SARS-CoV-2 y nirmatrelvir en nuestro laboratorio seguro de bioseguridad de nivel 3 (BSL3) para evaluar si la proteasa principal puede mutar para producir cepas resistentes del virus. Es importante tener en cuenta que estos estudios son requeridos por los reguladores estadounidenses y globales para todos los productos antivirales y son realizados por muchas empresas e instituciones académicas en los EE. UU. y en todo el mundo”.

Pero por otro lado, el comunicado tiene un apartado que a nosotros nos ha llamado poderosamente la atención, uno en el que publican los efectos secundarios del veneno. Agárrense porque nunca se han visto tan claros y mucho menos contados por los propios fabricantes de la pócima:

“INFORMACION DE SEGURIDAD IMPORTANTE

Vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19, bivalente (Original y Omicron BA.4/BA.5), COMIRNATY® (vacuna COVID-19, ARNm) y vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19

Informe a su proveedor de vacunas sobre todos sus condiciones, incluso si usted:

• tiene alguna alergia
• ha tenido miocarditis (inflamación del músculo cardíaco) o pericarditis (inflamación del revestimiento fuera del corazón)
• tiene fiebre
• tiene un trastorno hemorrágico o está tomando un anticoagulante
• está inmunocomprometido o está tomando un medicamento que afecta el sistema inmunitario
• está embarazada, planea quedar embarazada o está amamantando
• ha recibido otra vacuna contra el COVID-19
• alguna vez se ha desmayado en asociación con una inyección

• Es posible que la vacuna no proteja a todos

• No debe recibir COMIRNATY (vacuna contra el COVID-19, ARNm), la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech o la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech, bivalente si ha tenido una reacción alérgica grave después de una dosis previa de COMIRNATY o la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19 o cualquier ingrediente de estas vacunas

• Existe una remota posibilidad de que estas vacunas puedan causar una reacción alérgica grave. Una reacción alérgica grave generalmente ocurriría entre unos minutos y 1 hora después de recibir una dosis de la vacuna. Por esta razón, su proveedor de vacunas puede pedirle que permanezca en el lugar donde recibió la vacuna para realizar un seguimiento después de la vacunación. Si experimenta una reacción alérgica grave, llame al 9-1-1 o vaya al hospital más cercano

Busque atención médica de inmediato si presenta alguno de los siguientes síntomas:

• dificultad para respirar, hinchazón de la cara y la garganta, latidos cardíacos acelerados, sarpullido en todo el cuerpo, mareos y debilidad

• Miocarditis (inflamación del músculo cardíaco) y pericarditis (inflamación del revestimiento fuera del corazón) en algunas personas que recibieron COMIRNATY® (vacuna contra el COVID-19, ARNm) o la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech. El riesgo observado es mayor entre los hombres adolescentes y los hombres adultos menores de 40 años que entre las mujeres y los hombres mayores, y el riesgo observado es más alto en los hombres de 12 a 17 años de edad. En la mayoría de estas personas, los síntomas comenzaron a los pocos días de recibir la segunda dosis de la vacuna. La probabilidad de que esto ocurra es muy baja.

• Los efectos secundarios que se han informado con estas vacunas incluyen:

• Reacciones alérgicas graves
• Reacciones alérgicas no graves, como sarpullido, picazón, urticaria o hinchazón de la cara
• Miocarditis (inflamación del músculo cardíaco)
• Pericarditis (inflamación del revestimiento exterior del corazón)
• Dolor en el lugar de la inyección
• Cansancio
• Dolor de cabeza
• Dolor muscular
• Escalofríos
• Dolor en las articulaciones
• Fiebre
• Hinchazón en el lugar de
la inyección • Enrojecimiento en el lugar de la inyección
• Náuseas
• Malestar
• Nódulos linfáticos inflamados (linfadenopatía)
• Disminución del apetito
• Diarrea
• Vómitos
• Dolor en el brazo
• Desmayo asociado con la inyección de la vacuna
• Irritabilidad inusual y persistente
• Mala alimentación
inusual y persistente • Fatiga o falta de energía inusual y persistente •
Piel pálida, inusual y persistente fría
• Mareos

Estos pueden no ser todos los posibles efectos secundarios de estas vacunas. Llame al proveedor de vacunas o al proveedor de atención médica acerca de los efectos secundarios molestos o los efectos secundarios que no desaparecen.

• Las personas siempre deben pedir consejo médico a sus proveedores de atención médica acerca de los eventos adversos. Informe los efectos secundarios de las vacunas a la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. (FDA) y al Sistema de Informe de Eventos Adversos a las Vacunas (VAERS) de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). El número gratuito de VAERS es 1-800-822-7967 o informe en línea en www.vaers.hhs.gov/reportevent.html . Además, las personas pueden informar los efectos secundarios a Pfizer Inc. en www.pfizersafetyreporting.com o llamando al 1-800-438-1985”.

Mucho se ha hablado en estos días sobre la veracidad del vídeo de Project Veritas, sobre si pudiera ser una especie de montaje por lo que cuenta el sujeto identificado como directivo de la compañía. A nosotros eso nos parece poco relevante. En realidad, lo único que nos importa es que, con vídeos reales o falsos el relato vaya cambiando, como está cambiando.

Lo que más nos importa es que la gente deje de envenenarse sea como sea. Cualquier información, venga de donde venga, que ayude a convencer a la gente para que no se envenene y que ayude a poner a los responsables de este genocidio delante de un juez, nos parece importante.

 

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6 Comentarios

  1. Por un lado tenemos a la universidad de Boston haciendo ganancia de función, creo que después lo negaron, pero yo lo leí en periódicos de todo el mundo.

  2. Por otro lado tenemos “Los mejores centros médicos académicos de Boston se unen a los centros de innovación terapéutica de Pfizer”

  4. Según El Diestro, el virus NO existe. Luego no puede haber variantes. Y no existe porque ningún gobierno ha dado pruebas de su existencia. Vale.
    La inoculación mata porque destroza el sistema inmunitario de los inoculados, exponiéndoles a morir de miles de maneras con una probabilidad mucho mayor, aun partiendo de una situación de salud. Parece bastante verosímil. De acuerdo. Pero no inocularse no garantiza vivir (esta vida) más de 120 años por muy “listo” que se crea ser.
    Pero, ¿y los muertos apilados en féretros en marzo de 2020, con oficiales, suboficiales y soldados de la UME muertos en actos de servicio durante la reclusión forzosa, cuando les enviaron de limpieza a muchos lugares? ¿Es también un montaje? Porque sin no hubo ni hay pandemia, todo ha sido un montaje criminal. ¿Lo afirmáis, El Diestro? ¿O no os atrevéis a afirmarlo?

    ¿Tenían razón las de la manifa 8M de 2020 en subestimar el covid diciendo las mamarrachadas de turno de que el mayor virus es el machismo y aquellos que cantaban como hinchas de fútbol “coronavirus, oé, coronavirus, oé….”? Porque si no hay virus ni pandemia, ¿por qué habían de preocuparse feministas y cachondos y el resto de la población?

    ¿Se debió permitir, como finalmente lo hicieron casi todas las naciones (por motivos económicos y por tratarse de China, ama, dueña y señora de los ahorros de la mayoría de ricos de occidente, con sus carteras e inversiones en su industria, y no la total y rápidamente bloqueada Sierra Leona con lo del ébola), la libre circulación mundial de personas procedentes de China desde finales de 2019 sin preocuparse de prevenir muertes (si realmente las hubo, aunque no entre conocidos y familiares de El Diestro, por lo que se ve)?

    ¿Consideráis acertado NO haber actuado como se hizo en la crisis del ébola, es decir, controlar toda salida en vuelos y barcos de ese país africano donde surgió el brote (al menos aparentemente) y así no perjudicar al resto de naciones de la tierra?

    ¿Tenía razón el tipo ese de los rulos del gobierno, con su séquito de los más prestigiosos “científicos” españoles y extranjeros del mundo mundial que nunca comprometieron sus nombres, el tal Simón, de que solo morirían una o dos personas (31/01/2020) y que no había que tomar medida alguna en puertos y aeropuertos, que era innecesario? ¿Afirmáis vosotros esto también, que decís que no hubo ni hay pandemia, ni virus?

    ¿Afirmáis que el covid no ha matado más que a unos pocos si acaso?

    ¿No puede ser posible, pregunto, que mate tanto el covid (sea lo que sea, virus o no), como la inoculación, tanto el uno como la otra (quizá mucho más la segunda y a más largo plazo)?
    ¿Por qué motivo habría de excluir el uno a la otra? Que el covid matase a pocos y que inocularse de modo generalizado fuese como matar moscas a cañonazos (suponiendo buena intención en las autoridades sanitarias), no excluye la posibilidad de que el covid sea real, aunque no afecte más que a una parte mínima de la población, pasándolo el resto casi sin enterarse y disipandose por inmunidad natural (que ahora a lo mejor ya no la van a tener los inoculados).

    Y por último. Lo que sí está claro es que la población no inoculada NO tiene culpa alguna, ni del covid, ni de las inoculaciones, ni de la catástrofe económica que han desatado, ni de la guerra o guerras por venir. Así que esas psicósis tan extendidas sobre contagios, están de más. Nadie tiene un laboratorio en casa y fabrica inoculaciones o viruses o lo que sea el covid de las narices, luego nadie puede ser perseguido por no inocularse, ni siquiera por meterse un palillo por la nariz cada vez que va a trabajar o a ciertos lugares. Si se quiere buscar responsabilidades criminales, si se quiere perseguir criminalmente, persígase a China, a Pfizer, a Moderna, a Astrazeneca, a la OMS, a la ONU, al foro Davos, a la UE, a los gobiernos, a los políticos, a los “científicos”, etc., pero que dejen en paz a las personas no inoculadas, que ninguna culpa tienen de lo que no han generado en absoluto, malditos cobardes asesinos.

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