El Dragón, disfrazado de Nuevo Orden Mundial, ha liberado a su bestia más temida: el Leopardo, a cuyo rugido se van uniendo las naciones, coreando como un mantra lo que se dice en la Biblia: “¿Quién es semejante a la Bestia y quién podrá combatir contra ella?

Resulta que, en 1947, un grupo de científicos de la Universidad de Chicago, haciendo bueno el dicho que reza: “Cuando el diablo no tiene nada que hacer, con el rabo mata moscas”, se le ocurrió la feliz idea de poner en funcionamiento un siniestro reloj de alcance planetario: “el del Juicio Final”, con la filantrópica finalidad de informar al perplejo inquilino de este planeta-rebaño, a través del análisis de los miedos climáticos y otros asociados de similar jaez, del tiempo que le quedaba para disfrutar del fútbol y de las series de Netflix, antes de ser definitivamente desahuciado.

Pues bien, el relojito de marras, que no solo va hacia atrás en cuenta regresiva sino que utiliza la hora de las brujas (las doce de la medianoche) como referente temporal de ese hipotético apocalipsis, parece que en los últimos días se ha acercado peligrosamente a escasos segundos de lo que nos quieren vender como un fatídico Armagedón.

¡Vivan con intensidad! ¡Consuman compulsivamente! ¡Forniquen bien y no miren con quién!, parece ser la consigna –entre otras menos honrosas—que tratan de inculcar a los insignificantes “bípedos implumes” que habitamos este corral, para que permanezcamos ausentes de la brutal realidad con la que nuestros idolatrados dirigentes están gestionando nuestras vidas.

A veces, ocurre que se escucha un cacareo disidente por entre las crestas engreídas de los gallos del corral, pero son las mismas gallinas las que se encargan de correr a picotazos al insolente, que acaba desplumado o, algo peor, escaldado en la olla del granjero.

Pero hoy el gallinero se muestra especialmente inquieto. El siniestro reloj, estratégicamente colocado en el lugar principal del comedero aviar, indica que faltan noventa segundos para la medianoche. ¡Inquietante! Al parecer, el mecanismo llevaba parado desde el año 2020, cuando con motivo del inicio de la plandemia del –llamémosle así en ausencia de algo más concreto que lo identifique, pues el pretendido virus nunca fue aislado— “grifo”(animal mitológico, este, de origen chino, mitad pangolín y mitad murciélago) avanzó cien segundos de un tirón. ¿Recuerdan?

El fatal adelanto de la apocalíptica hora con el que hoy nos quieren agasajar, retransmitida por televisión sin escatimar en aparato escénico ni simbología ad hoc (vieja sacerdotisa vestida de túnica morada, personaje chino a su siniestra, cortina negra descorriendo lo que simula ser una lápida funeraria, reloj en forma de escuadra, agujas que forman un compás…), viene motivada por el análisis que ese comité de expertos universitarios chicagüenses hace de la escalada en el conflicto de Rusia con Ucrania: “Las amenazas poco veladas de Rusia de usar armas nucleares le recuerdan al mundo que la intención o error de cálculo, es un riesgo terrible”.

¡Por Dios! ¡Defendámonos de semejante atropello al corazón de la civilización! ¡Unámonos en santa cruzada contra el infiel! , jalean a coro los propietarios de las principales granjas avícolas del planeta. Y, cual emperador Constantino, que, antes de batirse contra su cuñado Magencio por el trono de Roma, vio en el cielo la señal del crismón y, junto a él, la inscripción: “In hoc signo vinces” (con este signo vencerás), así, el “Príncipe de este mundo” invoca al símbolo de ese Nuevo Orden Mundial que, con similar intención sanguinolenta, ha de (des)unir a los pueblos en lucha fratricida consigo mismo.

Y la palabra designada para proceder a la satánica ceremonia de invocación, extraída para la ocasión de unos cielos más saturnales que divinos, no podía venir más a cuento; porque, mucho nos tememos que en el nombre de los carros de combate, que recientemente se han decidido enviar a Ucrania, se halle el siniestro abracadabra: LEOPARDO.

Leemos en Apocalipsis 13.2: “Y la bestia que vi, era similar a un leopardo, y sus pies como pies de oso, y su boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder, y su trono, y grande potestad”.

Sea como fuere, la palabra leopardo ha conseguido calar rápidamente en el ciudadano de a pie como sinónimo de máquina de guerra omnipotente, ante la que nadie, ni siquiera el temido Putin, pueda escapar.

Alemania, que oficia de sacerdotisa en este aquelarre globalista, ha sido la primera en apuntar sus Leopard 2 contra Rusia y en favor de Ucrania. Luego siguió EE.UU. con sus Abrams y, ayer mismo, España aprobaba su adhesión a la cruzada leopardina liberando sus “bestias” en dirección a Rusia. Los demás acólitos se irán sumando en cascada.

Da la impresión de que todo se está desarrollando con demasiada prisa. Como si no se quisiera dejar tiempo para pensar. No de otro modo, y a pesar de la gravedad de los hechos que están aconteciendo, el gallinero apenas levanta la vista de ese otro reloj cuadrado –tonto, para más señas— que, rigiendo “los trabajos y los días” desde el comedero, lo tiene narcotizado y presto a servir de forraje junto a los nuevos nutrientes insectívoros que ya se están sirviendo como papillas, léase el gusano de la harina, la langosta migratoria, el grillo doméstico y la larva de escarabajo del estiércol.

No sé si se habrán dado cuenta, pero ya no se trata de material humanitario o logístico. La contribución de armas de alto poder destructivo por parte de España a la coalición judeomasónica (¿el león y el oso/urs: EEUU y Europa?) entraña, de facto, un descarado casus belli contra Rusia. Según recoge en declaraciones recientes el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia: “La guerra contra Rusia preparada por Occidente ya no es híbrida, sino casi real”.

¿Alguien se ha preguntado si esta gravísima decisión de suministrar nuestros carros de combate Leopard 2, teniendo nuestro propio enemigo natural a las puertas (Marruecos), no debería de haberse sometido previamente a su aprobación en el Congreso?

El Dragón, disfrazado de Nuevo Orden Mundial, ha liberado a su bestia más temida: el Leopardo, a cuyo rugido se van uniendo las naciones, coreando como un mantra lo que se dice en la Biblia: “¿Quién es semejante a la Bestia y quién podrá combatir contra ella?

¡Que Dios nos pille confesados!

 

12 Comentarios

  1. Con el envío por parte de España de esos leopard , el funesto y traidor felón monclovita, nos ha puesto una diana en el culo a todos los españoles por parte de Rusia, es evidente. En Alemania han habido algunas tímidas manifestaciones en contra del envío de los tanques… En España no movemos el trasero del sofá para manifestarnos aunque nos peguen fuego al salón. Esto es más serio de lo que muchos piensan

  2. ¿Alguien nos ha consultado a los españoles (sí, el Pueblo) si queremos que nuestro país entre de facto en una guerra, al enviar ayuda militar a Ucrania, un país en guerra con Rusia?
    Que yo sepa, Ucrania no forma parte de la Unión Europea, no forma parte de la OTAN (una organización militar internacional al servicio del sionismo anglosajón) y no tiene ningún acuerdo bilateral de defensa con el Reino de España.
    Todos los que quieran defender a Ucrania, lo tienen muy fácil: que monten una División Púrpura, cojan una mochila y que vayan al frente.
    Por cierto, que rapidito se ha echado tierra encima (silencio informativo) con temas como el torpedeo de los gaseoductos realizado por submarinos anglosajones o como el misil que disparó Zelensky contra Polonia, para provocar la entrada “justificada” de la OTAN en la Tercera Guerra Mundial.
    Hispanos, Resistencia.

  3. En agosto de 2018 deje por escrito en los comentarios de una revista y comentaba a conocidos y amigos aquello que pensaba hacer “el Mierda” y que la mayoria de españoles no podían ni imaginar.

    Mas o menos en este orden:
    Quebrar la nación.
    Subvertir el orden constitucional por medio de leyes habilitantes,
    Asaltar las instituciones.
    Culminar el golpe de estado de 2017.

    Exactamente lo que ha hecho, sin embargo tuve que soportar la sorna de muchos o casi todos durante cuatro años, ya parece que lo empiezan a entender pero no del todo.

    En marzo-abril de 2020 en aquella misma publicacion, revista pretendidamente seria, comenté a propósito las fases de la “Plandemia” que ya se vislumbraban con claridad.

    En marzo de 2020 tenía tanta información como la que ha salido en estos tres años a propósito de oas “vacunas” aunque he de reconocer que comencé investigando esa misma tecnología aplicada a animales, esas páginas desaparecieron al poco, desde allí pude buscar todas las patentes relacionadas y hacerme una idea clara de lo que pretendían hasta llegar a la moneda digital centralizada y el nombre de todos los presuntos implicados.

    Las fases que yo dije entonces y quedaron por escrito en aquella publicación fueron.

    Virus.
    Cuarentena-encierros.
    Vacuna.
    Pasaporte digital.
    Guerra en europa.
    Sanciones.
    Inflación.
    Pobreza y miseria.
    Moneda digital.

    No hace falta decir que cerraron la sección de comentarios de la publicación.

    Los ultimos dias de febrero y primeros de marzo de 2022 comenté en aquí en “El Diestro” que no pensaba que Rusia invadiera Ucrania, y aún lo sigo creyendo, aunque la haya invadido. No tenía sentido esa invasión a no ser que Rusia estuviera en verdadero peligro, como al parecer por los hechos posteriores así era, o porque estuviera de acuerdo con los EEUU para simular la guerra, destruir Europa y reordenar al gusto la economia mundial y el control social.
    En cualquiera de los supuestos Europa siempre perdia, fuera una guerra acordada o provocada por EEUU e Inglaterra, léase OTAN, los otros son lacayos. Por lo que escribí en El Diestro febrero-marzo de 2022:

    Las sanciones a Rusia y la guerra provocarán la división economica del mundo en tres sectores, EEUU e Inglaterra como aliados y Europa como siervo; China, Rusia e India creando otro sector económico y los países árabes de intermediarios. Mas o menos asi se está conformado el mundo a dia de hoy, grosso modo.

    Solo hay dos maneras de resolver el conflicto, con una victoria de Rusia ya que ésta no puede perder la guerra, o una escalada del conflicto con una guerra total en Europa. Por ahí vamos de cabeza, sin frenos y a empujones de los cobardes dirigentes europeos.
    La guerra terminará cuando Europa esté quebrada, destruida y rendida a los EEUU.
    También me costó alguna crítica de algún comentarista al que no le faltaba razón parcial.

    Seguimos en las mismas, Rusia no puede perder la guerra pero EEUU puede prolongarla todo lo que quiera, no sabemos si intentará también provocar a China con Japón e India, no sabemos si piensa también revolucionar los países árabes con atentados a Israel, no sabemos nada, pero todas las posibilidades están abiertas, por lonque mas le vale a los europeos ser sensatos y ponerse a escuchar “Imagine” de John Lennon, que por cierto siempre he detestado, pero que es bueno que los europeos que aplauden a Zelensky y Biden con las orejas vuelvan a escuchar, en esta ocasión por su bien.

      • Pues eso, que todos los idiotas que cantaban esta canción callan ahora pero la cantarán despues de ser destruidos, es casi la canción perfecta para culminar la agenda 20-30 cuando los borregos una vez masacrados, pobres y hambrientos vuelvan es estar estabulados.

        Hala, a cantar a destiempo.

        • Muy buen análisis. A mi me paso algo similar, porque una vez que los comentarios críticos eran mayoritarios en un medio que presumía de “liberal”, cerraron los comentarios sin previo aviso y sin explicación alguna. Ante la demanda de algunos suscriptores preguntando qué había pasado, alegaron dificultades informáticas. Otro cuento chino. Por supuesto me dí de baja del medio y dejé de leerlo.

  4. RUSIA LE ACABA DE PREGUNTAR A ALEMANIA SI LE HA DECLARADO LA GUERRA¡¡¡.
    PUEDE QUE NOS QUEDE A PARTE DE OCCIDENTE POCO TIEMPO DE PAZ,Y SE DECLARE LA 3ª GUERRA MUNDIAL.
    QUE HIJOS DE PUTA la Otan y todos los satanistas que organizaron la PLANDEMIA y está brutal guerra,además taparan el escandalo de las vacunas si se expande la guerra y habría quiebra bancaria y hambrunas.
    Se lo han montado bien los gobiernos en la sombra para enriquecerse y masacrarnos ofreciendo a las víctimas a satan en ceremonias masónicas.QUE DIOS NOS AYUDE.

  5. Nada que no se esperase de estos lacayos del globalismo que son los países europeos en manos de la clase dirigente más corrupta y mediocre desde la Segunda Guerra Mundial. La situación que vivimos no se entiende si no hay un plan orquestado detrás que no nos cuentan.

    No escucho desde la Unión Europea llamamientos a un alto el fuego, a parar la guerra, a abrir negociaciones, como en tantos conflictos anteriores. Solo hablan de enviar armas y echar más gasolina a la destrucción, además de la pasta que están ganando. Borrell, Von der Leyen y muchos que no salen en los medios o están medio escondidos con este tema están a sueldo de otros, haciéndose aun más ricos. Los traficantes de armas y de mercenarios están haciendo un gran negocio.

    No les quepa duda que cuando todo se acabe, todas estas armas acabarán en Europa Occidental, en manos de mafias del narco, de asaltadores de casas y de yihadistas. Vamos a vivir momentos muy duros. Precisamente cuando el conflicto de Ucrania acabe, los europeos vamos a sufrir por nuestra estupidez y por estos dirigentes corruptos y absolutamente traidores. Cuando todo arda, se quitarán de en medio y querrán disfrutar de lo pagado por sus amos en el otro extremo del mundo. Espero que no puedan escapar del infierno que están montando.

  6. Muy buen análisis. A mi me paso algo similar, porque una vez que los comentarios críticos eran mayoritarios en un medio que presumía de “liberal”, cerraron los comentarios sin previo aviso y sin explicación alguna. Ante la demanda de algunos suscriptores preguntando qué había pasado, alegaron dificultades informáticas. Otro cuento chino. Por supuesto me dí de baja del medio y dejé de leerlo.

  7. Disidentia controlada de… fecante. La pela es la pela. Una decepción más a la interminable lista. Sin sumisión no hay eurillos.

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