Encuesta: ¿estaría Vd. dispuesto, por un sueldo decentillo, a construir una cárcel, con la condición de que se quedará dentro cuando esté terminada?
Apuesto a que ningún lector diría que sí, y sin embargo muchos mentirían.
Concretamente todos los policías que trabajan hoy mismo a destajo para construir esa cárcel.
Hay que ser muy ciego para no darse cuenta del camino por el que nos llevan los políticos de todos los colores.
La agenda 20 y trinca, “no tendrás nada y serás feliz”, emergencias sanitarias y climáticas (todas más falsas que un euro de madera), sequías inducidas, incendios provocados, genocidios planificados, adoctrinamiento dogmático y un infinito etcétera.
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Nada de ello sería posible sin esa cohorte de esbirros que nos imponen esas medidas bajo coacción violenta. Esos a los que llamábamos policías, antes de que nos secuestrasen una primavera (por cierto, todavía no nos la han devuelto).
Pero ellos y sus familias, por si no se han dado cuenta -como parece-, no viven en Marte ni en Shambala. Viven aquí, en la misma prisión que han fabricado para nosotros.
Les tenemos muy en cuenta el detallazo de que compartan celda con nosotros, pero espero que nos perdonen si no se lo agradecemos.
Si Vd. se ve retratado de cuerpo entero y desea romper esta inercia, lea aquí la solución:
Poner fecha, pasar a limpio y enviar.
Si buscas bien, en el cine encontrarás las preguntas y las respuestas:
La hermandad de la campana (1970).
Ceremonia ritual de iniciación a la hermandad: el juramento.
Cuando el libre albedrío de los seres humanos queda supeditado a la obediencia ciega.
Disidencia + Acción = RESISTENCIA
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Podéis ver mejor la escena en nuestro canal de YouTube:
https://www.youtube.com/c/ResistenciaHiperbórea
Pues, lo siento por todos los tratados y muertos por los métodos y protocolos criminales, lo siento por sus familias y sus seres queridos (a veces esto no coincide). A mi padre lo mataron como a otros muchos en la misma ciudad dónde el vivía con dos “chutes” de morfina. Si, mor-fi-na, el primero para destrozarlo con los efectos secundarios, el segundo para rematarlo. ¡Gracias!, doctora ¡gracias!. Veinte años atendiendo a mi familia, plena confianza en la que resultó ser una asesina sin escrúpulos. Hay muchos tipos de drogas…., antes de decirme que llamaría al juez si me oponía al segundo pinchazo, me dijo que a sus propios padres les trataría igual que al mío. Pues bien, no le deseo eso para sus padres, SE LO DESEO PARA SUS HIJOS….Ahora, dicho lo que he dicho salido desde el fondo de mis entrañas, intentaré expulsar de mí los demonios que me han poseído……, no por ti, desgraciada, por mí.
Esther:
No descarte presentar una denuncia penal por un posible homicidio. Nos arrepentiremos más o menos de lo que hagamos, pero nos arrepentiremos siempre de lo que no hicimos.