Unión Europea

Anda la Unión Europea –nido de lobbies mundiales y de parlamentarios comisionistas de los mismos y no para la defensa de los ciudadanos europeos- preocupada por que haya un salario mínimo interprofesional en cada uno de los países miembros, que garantice una vida digna a los trabajadores.

[Se contratarán 1.500 personas para limpieza de montes en la Comunidad Valenciana]

No deja de sorprender que se preocupe de ese salario y le pase indiferente, la forma con la que el propio estado, extorsiona a posteriori a quien lo ha recibido. Es el caso de España, muy singular como saben, donde la presión fiscal es la más elevada de la Unión Europea, por mucho que los fríos números puedan decir lo contrario. En España -además de los impuestos habituales que se pagan en otros países, con una legislación fiscal razonable para el ciudadano- nos extorsionan de mil maneras diferentes, sobre el beneficio del trabajo.

La fiscalidad, es uno de los muchos ejemplos de cómo nos machacan en España, mientas la Unión Europea, mira para otro lado. Pero hoy, me centraré, en los dos actores que hacen posible el S.M.I.; el que lo recibe, y el que lo paga, al gran comisionista, El Estado, el que se lleva la mayor tajada. Mientras la Unión Europea, se preocupa  de los trabajadores, desatiende de forma importante, a los responsables de pagarlo,. Va en la misma línea, que los comunistas y socialistas que gobierna  España, también,  los de otros partidos que se dicen de otra ideología, pero que son a la hora de maltratar al emprendedor, a la empresa, tan comunista como los primeros.

Ya me quedo definitivamente aquí en España; Una vez más, les recordare, -a ver si les llega a los legisladores europeos- No seré yo el que esté en contra de garantizar un salario mínimo razonable, además de  justo al que trabaja  -aprovecho para recordar, que la productividad, ha desaparecido de cualquier convenio laboral que se firme en España- pero estos señores de la misma manera deben de tener en cuenta que para que un señor pueda ganar un salario, tiene que haber una empresa, que lo contrate con anterioridad, y que además, obtenga beneficio. De otra manera, está condenada al cierre y con ello desaparecen, los puestos de trabajo.

La situación de los Autónomos españoles, nunca , que se sepa, ha sido motivo de debate en aquel parlamento. En España, la cuota de a la Seguridad Social de estos trabajadores, es con mucha diferencia, la más alta de Europa, seis veces, la de Francia, que es la segunda, no es  lo peor. Lo peor, es que incluso teniendo pérdidas, esa cuota es de pago obligado. En la mayoría de los países europeos, los autónomos que iniciar una actividad, no pagan cuota hasta que han superado unos ingresos, equivalente más o menos, al salario mínimo de cada país. De igual manera, es a partir de esos beneficios cuando Hacienda se deja ver, nunca antes. Muchos de vosotros no lo saben, pero en España ya tenemos un régimen fiscal para los autónomos que tienen que pagar por año adelantado, la previsión de beneficio. De no haberlo, a posteriori, tiene que reclamarlo, y ya saben cómo Hacienda se las gasta, en esos casos.

En paralelo a garantizar un salario mínimo interprofesional, deberían de preocuparse,  de que las empresas tuvieran un mínimo de viabilidad; en los países más prósperos de Europa las empresas normalmente cuando están bien orientadas, cuando  están bien gestionadas, se mantienen en el tiempo. Solo el 0.6% de las empresas que se inician en España, superan el año de vida. Situación dantesca –muy por encima pero que muy, de la media de la Unión Europea- que no hace reflexionar a nadie.

Aquí en España, los derechos laborales de los trabajadores, es  la mejor manera que nuestros gobernantes, han encontrado, para extorsionar al empresario y al emprendedor y por supuesto, con el organismo europeo de observador pasivo. En el camino, nos  queda al emprendedor en la mayoría de los casos, no solo habiendo  perdido los ahorros de toda su vida, si no arruinado para el resto, y si ayudas –se las dan a otros- de ningún tipo.

Saquen sus conclusiones, pero antes de ello, ya solo recordarle que a pesar de todas las milongas que nos puedan contar; los europeos más desarrollados del norte, estarían encantados de tener  una España de hoteles, bares y camareros  a bajo coste, porque España  -al margen de la clase política- es el paraíso, es el lugar ideal para que ellos, veraneen, para que tengan su tercera o su cuarta vivienda y naturalmente,  cuánto peor este la economía española, pues mejor.

También te puede interesar...


Artículo anteriorLey del sí es sí…, o no, según convenga a las mujeres
Artículo siguienteEl toro Locomotor
Terminadas mi obligaciones genéticas; lo de cultivar los árboles, garantizar la continuidad de la especie y escribir un libro, me dedico a darle voz a todo lo que me descuadra en mí de rededor, muy especialmente la falta de justicia en su más alto concepto. Cuando no lo hago, escucho la voz de mi padre que me recuerda que "nunca se ha escrito nada de ningún cobarde". como apenas puedo dar voz, escribo pequeños textos para intentar suplir "mi afonía" y además me esfuerzo intentando que lleguen a la gente. Tengo infinidad de escritos publicados en "círculos menores" He sido pregonero de la Semana Santa de mi ciudad, Tomares. He publicado la novela; Costalero de Sevilla, Mi blog personal es Incorrectamente Político, encabezado por una foto de George Orwell y su más célebre frase: Periodismo es publicar aquello que alguien no quiere que publiques, todo lo demás son relaciones públicas.

1 Comentario

  1. Y, además, todo eso desde la incorporación a la entonces CEE en 1986.
    Lo que ocurre es que para los alemanes, daneses, austríacos, suecos, etc., a los que acaparan la mayor parte de industrias y riqueza europea, les conviene ser libres a ellos, pero esclavos a los españoles, es decir, lo bueno para ellos y lo malo para los españoles. Por tanto, a Alemania, a Dinamarca, a Austira, etc., les conviene que España sea socialista y comunista cerril, en colaboración con los “afrancesados” políticos, mediáticos, burocráticos, empresariales y financieros “españoles” de nuestro tiempo, que son los únicos que se benefician de mantener España en el socialismo actual ruinoso y esclavista del fisco, eso sí, alegando que España es muy “próspera” en democracia (solo fijarse en la evolución del PIB per cápita en PPA. España rebasaba con creces el 80% con respecto a los países más ricos de Europa en 1975. Pues bien, hoy, no llega ni al 70% y bajando. Con Franco hubo convergencia en crecimiento económico, con democracia divergencia y creciente miseria y esclavitud, tal cual aunque se niegue incluso con tortura).

    El problema de los impuestos (robo repugnante anticristiano) es que en España la industria está en vías de extinción, y las que permanecen lo hacen por producir en régimen de oligopolio (sin competencia, que ese es uno de los frutos de los impuestos, que actúan como barrera al emprendimiento y la inversión, es decir, barrera a la libre competencia). El campo ya ni siquiera puede subsistir como desde 1986, con millonarias subvenciones socialistas de la PAC. Y el campo se queda desierto. Los jóvenes no quieren saber nada de tractores, cosechadoras, rebaños, tierras y regadíos. Quieren vivir de funcionarios en la ciudad. El único empleo que se crea es de funcionario (la mayoría a dedo, es decir, de elegidos por sindicatos, partidos, logias, etc.). Los autónomos no sobreviven ni un año tras abrir su negocio. En los barrios de ciudades, los locales comerciales se quedan vacíos a tasa creciente.
    Todo ello es el resultado de décadas del mercado de trabajo más rígido de la tierra (que no permite al que busca trabajo a trabajar por menor salario y peores condiciones hasta que surja otra oportunidad mejor. El que rinde, puede ser descartado de decenas de empresas, pero es seguro que en algunas sí será admitido, por pura lógica de creación de valor y riqueza), que acabará por asesinar de hambre y miseria a millones clamando al Cielo venganza.

    Todo ello es el resultado también de la estafa piramidal de la arbitraria y ladrona seguridad social, que cercena toda posibilidad de ganar un salario mayor y que encarece el trabajo, reduciendo su demanda por parte de empresas que sobreviven. La seguridad social, además, cercena la tasa de crecimiento de las economías a largo plazo.

    Todo ello es el resultado del terrorismo sindical y patronal, unos porque sus afiliados, que ni dan un palo al agua en su jornada habitual, ni trabajan a punta de pistola impidiendo que trabajen otros que les sustituyan que sí estarían dispuestos a hacerlo, no quieren ni en pintura (bajo amenaza de desencadenar una sangrienta guerra) que se pueda negociar libre e individualmente todos los términos de la relación laboral, mientras que los mafiosos patronos no quieren emprendedores nuevos que compitan con ellos aceptando empleados previamente desempleados con sueldos y condiciones peores hasta mejores oportunidades. Un crimen masivo, vamos.

    ¿De qué sirve el populismo político (que no económico) de elevar significativamente el salario mínimo interprofesional? Veamos:
    a) incrementará el coste del empleo, reduciendo su demanda y haciendo aún mucho más difícil acceder al trabajo a los desempleados;
    b) el trabajador afectado se verá beneficiado a costa de reducir las probabilidades de que los desempleados puedan acceder al empleo. Incidencia especial a los que buscan su primer empleo;
    c) muchos sectores experimentarán la quiebra de empresas que no pueden asumir ese salario mínimo (muchas de ellas hoy sobreviven a base de subvenciones que se agotan). Téngase en cuenta que en España buena parte de los sectores de mucha actividad (servicios hoteleros y de ocio, p. ej., así como servicios relacionados con el turismo) presentan una productividad muy baja en comparación con las muy eficientes industrias punteras alemanas o austríacas, luego estos sectores de servicios, verán reducidas sus empresas en las que irán al cierre (se apuntalará la estructura oligopólica en no pocos lugares). Esto, a su vez, empeorará la situación de los trabajadores que, lejos de tener mejor salario, irán a la calle y a la oficina de empleo.
    d) aumentará con toda seguridad la corrupción y los contratos a media jornada que exijan la jornada efectiva completa por parte del empleado si quiere ser contratado. Fraudes y corrupción se multiplicarán, así como los sobornos a funcionarios para hacer la vista gorda y la efectiva reducción, que no aumento, de sueldo que experimentarán los que antes tenían jornadas de 40 horas y que ahora serán solo contratados, al nuevo smi, por 30 ó 25 horas.
    e) aumentará la hostilidad y el resentimiento de unos y la paz en las naciones se verá resentida. Se multiplicará el narcotráfico, la delincuencia, el terrorismo, el crimen, etc. Por desgracia, los políticos no pagarán, pues la gente les sigue votando y apoyando como a ídolos aunque les traigan la muerte en cada una de sus locas disposiciones. Los políticos son tan diabólicos que eluden siempre la responsabilidad de las catástrofes que ellos mismo han creado y generado, pasando ante la gente como corderos, cuando son lobos sanguinarios.

Comments are closed.