Dentro de varios siglos, quién sabe si milenios, habrá dos bibliotecarios archivando libros antiguos. No serán libros impresos en papel, aunque tampoco serán en formato pdf. No sé cómo serán esos libros. Uno de los bibliotecarios le dirá al otro:
“¡Mira qué libro he encontrado! Leo un fragmento: En aquella época, la humanidad sufrió una crisis por un terrible virus que hizo que mucha gente muriera. Pero gracias a la ciencia y a sus vacunas, se venció al virus, y los seres humanos continuaron en progreso hacia una sociedad más democrática, solidaria, inclusiva, resiliente, y sostenible, ante los desafíos surgidos por las pandemias y el cambio climático. ¿Dónde archivamos este libro?”
Y el otro bibliotecario, con más años de experiencia, le responderá: “Ponlo en la sección de Historia”.
Después, el bibliotecario más joven tomará otro libro y dirá:
“¿Y este tan raro? Fíjate, te leo un trocito: En 2020 todos los seres humanos fueron engañados masivamente y conducidos a una demolición controlada de su civilización, dentro de un minucioso plan de genocidio silencioso e ingeniería social llamado Agenda 2030. Primero, sometieron a la población a una aniquilación de sus libertades individuales, usando como pretexto, un agente patógeno inexistente. Segundo, les encerraron en sus casas. Luego les quitaron sus negocios. Después les inyectaron micro y nanotecnología, bajo coacción y con coartada de campañas de vacunación masiva. Estas inoculaciones produjeron todo tipo de males en las personas: enfermedades y afecciones cardiacas, sanguíneas, neurológicas, pulmonares, hepáticas, cutáneas, cáncer… Y para seguir inyectándoselo a la población engañada, se les dijo que esos males los causaba una serie de virus que aparecieron durante toda aquella década. Lo cierto es que el único objetivo era implementar la biotecnología necesaria dentro del organismo humano, para alcanzar el ideal eugenista-transhumanista, fusionar la informática con la biología humana, y someter al ser humano en un sistema de esclavitud inexorable con biotecnología con base en el carbono. Desde entonces, los seres humanos son controlados no sólo en sus movimientos físicos, sino también en su mente, sus pensamientos, sus emociones, su comportamiento. Y así, se alcanzó un nuevo orden mundial, con la colaboración de instituciones corruptas y criminales, transformando a la humanidad en un reducido y controlado rebaño de ganado, gestionado por una Inteligencia Artificial que decide quién vive y quién muere en una monstruosa sociedad distópica infernal. ¡Pues vaya…! ¿Y este libro dónde lo pongo?
Y el bibliotecario del futuro, que sabía hacer bien su trabajo, le contesta:
“Pues ponlo en Mitología… o mejor aún: tíralo a la basura.”
Ese es mi temor.
BUENÍSIMO !!!