Uno de los personajes que más decepción nos han provocado en estos dos últimos años, ha sido el televisivo Iker Jiménez. La decepción ha venido provocada porque de Jiménez nos esperábamos valentía y con lo que nos hemos encontrado es con que no es más que lo mismo que podemos ver en cualquier televisión de España y del resto del mundo.
Es evidente que, para Jiménez, ha primado el hecho de mantenerse en la televisión, antes que investigar la realidad de lo que verdaderamente ha estado sucediendo con esto de la farsemia. Y por si eso fuera poco, ha sido el encargado de dar fama a un tipo siniestro y absolutamente despreciable como César Carballo. Es decir, que lo de decepcionante es poco.
Pero el caso es que, de vez en cuando, se le cuela algún “infiltrado”, como sucedió en su momento con Enrique de Vicente, que le chafa el guión y le pone en algún que otro aprieto.
Esta intervención se produjo en 2020 y parecía que había conseguido “evitarlas” durante un tiempo. Peo hace unos días, el Dr Cabrera le volvió a hacer la faena poniendo, de nuevo, en riesgo el “estatus” de Jiménez y muy probablemente el futuro televisivo del propio Cabrera. Y es que eso de hablar claro y sin tapujos, cada vez está peor visto en la televisión. Y eso que Cabrera, dentro de su valentía fue excesivamente prudente, bajo nuestro punto de vista.
De vez en cuando es necesario que una voz discordante se escuche por televisión para que el discurso oficial gane fuerza.
Es una manera de fingir que existe un debate. Si el espacio televisivo dura dos horas, por ejemplo, vale la pena perder un minuto creando polémica, eso si, muy controlada y ajustada al guión.
Iker Jimenez y es una aparición o espectro que solo aparece en las casas de aquellos que tienen sus televisiones encendidas y sintonizadas con las frecuencias de la mentira.
Buena observación
Buena observación.
Muy buena observación !!! Gracias.
Lo más llamativo es que, seguramente, todos aquellos que acuden a ese programa, saben perfectamente de que va todo ésto.
El que de vez en cuando aparezca algún personaje que deje entrever que sabe de que va, realmente poco dice, porque quién siga el programa, estará convencido de lo que ahí se cuente por la dirección que ha tomado este periodista y del “argumento” oficial y el que se aburrió de escuchar manipulaciones, no ve el programa precisamente por eso.
Debatían sobre lenguaje inclusivo, una tía, presunta profesora de la complutense, mantenía que había que utilizarlo para no herir su sensibilidad, argumento de peso, jeje…. El engendro, suelta en un momento, a un comentario de un hombre, que defendia la postura lógica, “para empezar el Congo no existe”.
Esto hay que ponerlo aparte, que suenen las campanas. Profesora de la complu, para cagarse.
Apoteósico, nadie en el programa de iker, ninguno de los tertulianos de la mesa, tampoco iker, le dijeron a esta ignorante dictadorzuela de sentimientos, Buena mujer, existe el Congo, de hecho hay dos paises en Africa que llevan el nombre, Congo.
Ya estaba un poco cansado de lo que se contaba en el programa, pero esto ya fue la gota que colmó el vaso de la paciencia.
Lo peor es que el tipo presume de lo bien que lo hace.
EN cuanto aparece una progre feminazi, por muy torpe que sea, todo este plantel de tíos, literalmente se caga de miedo. Es penoso.
Me fascina este doctor….no se vende y además creo que bastante nos está diciendo. El que quiera q lo vea . Pero esta es la realidad
Que no se vende dice jajaja
Este Cabrera tampoco es trigo limpio y lo mismo te da una de cal, que otra de arena.
Cuidado !!!
Jajajaja, que weno, este Cabrera es muy inteligente, dice la verdad pero se mantiene siempre en el limite para no mojarse en del todo. No como el Friker perro del sistema que ademas con sus peroratas al final de sus programas intenta vendernos que es victima de todo esto y no digamos nada de su mujer analfabeta zampabollos con sus nuevos programas globalistas