Mis lectores saben que me gustan los artĆculos breves. Soy el primero que rehĆŗye los artĆculos demasiado extensos, pero en este caso no se trata de un simple artĆculo sobre el tema. Pretende ser un informe que se puede utilizar, incluso legalmente, como ācontramedidaā frente a los abusos de un empleador ātragacionistaā. Incluyo versión en Word para que pueda ser editada e impresa en caso de necesidad. Puede tambiĆ©n ser utilizado para elaborar un escrito de alegaciones/recurso frente a una multa por no portar mascarilla.
LA MASCARILLA DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LA PREVENCIĆN DE RIESGOS LABORALES
CONSIDERACIONES PREVIAS
El uso de la mascarilla ha sido muy controvertido, considerĆ”ndose innecesario en los primeros meses de 2020 e imponiĆ©ndose su uso posteriormente, y hasta la fecha. El cuestionamiento de su eficacia y de los posibles efectos adversos, que se ha sustraĆdo a la opinión pĆŗblica, resulta, tal vez por ello, absolutamente indispensable, toda vez que los organismos de salud pĆŗblica que nos imponen su uso conocen esa información, pero no la divulgan como serĆa su obligación.
El gobierno ha derivado a los empresarios la responsabilidad del uso de mascarilla en los centros laborales, pero para adoptar cualquier medida de P.R.L., de acuerdo a la Ley, resulta indispensable hacer un estudio de necesidad, eficacia y seguridad, seguido de una evaluación individualizada, como veremos.
NECESIDAD DE LA MASCARILLA
SegĆŗn la nauseabunda propaganda de que hemos sido objeto, la mascarilla es indispensable para evitar la propagación del virus sars-cov-2.Ā
Pero ¿es eso cierto? MÔs aun, en el colmo de la duda metódica, principio bÔsico de la ciencia moderna, vamos a dudar la mayor: ¿existe el virus?
Esta pregunta no es ilusión de una mente acalorada o delirio insano de la fantasĆa. Preguntado el Ministerio de Sanidad por esta capital cuestión, su respuesta no puede ser mĆ”s elocuente: āEl ministerio de Sanidad no dispone de cultivo puro de sars-cov-2 para ensayos, y no tiene un registro de laboratorios con capacidad de cultivo y aislamiento para ensayos.ā
Accesible aquĆ: https://www.eldiestro.es/wp-content/uploads/2021/09/RESPUESTA-MINISTERIO-DE-SANIDAD.pdf
No voy a extenderme sobre los Postulados de Koch, que determinaban, hace aƱos (en la ciencia clĆ”sica) la prueba de que un determinado patógeno era el causante de una enfermedad. Hoy estĆ”n suspendidos de empleo y sueldo, sustituidos por dogmas propagandĆsticos pseudocientĆficos, que sólo pueden responder a intereses bastardos y espurios.
Abundando en la ciencia clĆ”sica, hay estudios muy serios que apuntan en diferentes direcciones para explicar el cuadro clĆnico denominado ācovid-19ā, como el āInforme Barbastroā, que encontró una correlación imposible estadĆsticamente entre la mortalidad por ācovid-19ā y la vacunación de la gripe, o el informe Rubik-Brown, que encontró doble correlación, igualmente inexplicable, entre la covid-19 y la radiación electromagnĆ©tica, geogrĆ”fica y clĆnica. No hay ācovid-19ā donde no hay radiación electromagnĆ©tica, y el cuadro clĆnico ācovid-19ā se corresponde, exactamente, con el producido por esa radiación. ĀæCasualidad?
Informe Barbastro: https://zenodo.org/record/4009604#.YdIEZ8nMK1t
Informe Rubik-Brown: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/34778597/
Pero es que, aunque el virus existiera y fuera el causante de esa enfermedad, actualmente sabemos que la misma tiene una mortalidad del 0,02%, inferior a la de una gripe comĆŗn.
EFICACIA Y SEGURIDAD DE LA MASCARILLA
Al aparecer ambos aspectos unidos en numerosos documentos, los estudiaremos juntos.
- A) La propia normativa que regula en EspaƱa el uso de mascarillas, tan profusa como mutable, pero que admite siempre un amplio abanico de circunstancias eximentes. Por todas las normas, baste ver el art. 6.2 del RD-L 21/2020, reproducido casi literalmente a dĆa de hoy en la Ley 2/2021.Ā
La causa de tantas exenciones no puede ser otra que la existencia de numerosos efectos perjudiciales, de los que las autoridades, que como veremos los conocen, no quieren hacerse responsables.
Y eso, como mĆnimo, porque EspaƱa ha suscrito el Convenio de Oviedo, por instrumento de ratificación publicado en el BOE de 20 de octubre de 1999, que en su art. 2 dice:
ArtĆculoĀ 2.āPrimacĆa del ser humano.
El interƩs y el bienestar del ser humano deberƔn prevalecer sobre el interƩs exclusivo de la sociedad o de la ciencia.
Nuestras autoridades, en su propaganda, admitieron la inutilidad del uso de la mascarilla para proteger al usuario (por eso no se permiten para este uso las FFP2 con vĆ”lvula de exhaustación), pero insisten obstinadamente en su uso indiscriminado, para una supuesta protección del resto de los ciudadanos. Sin embargo vemos que, segĆŗn este convenio, el interĆ©s de la sociedad no puede prevalecer sobre el del individuo, y nadie, mĆ”s que el propio individuo, puede decidir cuĆ”l es su interĆ©s. Luego en caso de conflicto es el propio individuo quien debe elegir āno la sociedad, supuestamente representada por el gobierno-. Por lo tanto, imponer el uso de mascarilla a alguien al que le perjudique (como veremos, todo el mundo), vulnera los compromisos adquiridos por EspaƱa.
- B) Los informes de la OMS sobre el uso de mascarilla.Ā
Estudiemos el de fecha 5 de junio de 2020, accesible en este enlace:
En su pƔgina 4 puede leerse:
A la fecha no se conocen estudios en los que se hayan investigado la eficacia y los posibles efectos secundarios del uso general o continuo especĆfico de mascarilla⦠Esta prĆ”ctica (la del uso de mascarilla) nace de las preferencias y los valores firmes que se otorgan a la prevención de posibles infecciones por el COVID-19 en los trabajadores de salud y en otros pacientes no aquejados de esta; dichas preferencias y valores pueden pesar mĆ”s que la posibilidad de incomodidad y otras consecuencias negativas del uso sostenido de una mascarilla mĆ©dica y la ausencia de pruebas de su utilidad por el momento.
Es decir, que no hay NINGUNA evidencia cientĆfica, ni de su eficacia, ni de sus posibles efectos adversos. En estas condiciones, imponer el uso de mascarilla vulnera el principio de precaución recogido en el art. 191 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, supuestamente aplicable en todos los estados miembros.
Pero aún hay mÔs. En su pÔgina 5, el informe de la OMS dice:
Cuando los trabajadores de salud usen mascarillas mĆ©dicas durante todo el turno, habrĆ”n de procurar:Ā Ā
-cambiarse la mascarilla mĆ©dica cuando se humedezca, se ensucie o se deteriore;Ā Ā
-no tocar la mascarilla mĆ©dica para ajustarla o desplazarla del rostro por ningĆŗn motivo; si esto llegara a ocurrir, hay que quitarse la mascarilla con cuidado, ponerse otra nueva y asearse las manos;ā¦Ā
Como es pĆŗblico y notorio, es exactamente lo contrario de lo que hacen la inmensa mayorĆa de los ciudadanos. Y sigue diciendo el informe
Cuando se adopte el criterio del uso continuo especĆfico de mascarillas mĆ©dicas hay que tener en cuenta los posibles peligros y riesgos mencionados en seguida:Ā
- la contaminación por el propio usuario derivada de la manipulación con las manos contaminadas;Ā
- la posibilidad de contaminación que puede surgir si el usuario no cambia una mascarilla que se ha humedecido, ensuciado o deteriorado;Ā
- la posible aparición de lesiones cutÔneas de la cara, dermatitis irritativa o empeoramiento del acné cuando las mascarillas se usan por muchas horas;
- las mascarillas pueden resultar incómodas;Ā
- una falsa sensación de seguridad (esta es la mejor de todas) que puede propiciar una observancia menos rigurosa de otras medidas preventivas esenciales, como el distanciamiento fĆsico y la higiene de las manos;Ā
- el riesgo de transmisión por gotĆculas y de salpicaduras a los ojos, si la mascarilla no se combina con el uso de protección ocular;Ā
- los inconvenientes o dificultades para usar mascarilla en determinados grupos de población vulnerables como los aquejados de trastornos mentales o discapacidades del desarrollo, los sordos y los niƱos;Ā
- la dificultad para llevar la mascarilla en ambientes cÔlidos y húmedos.
- C) Recomendaciones del Ministerio de Sanidad.
Puede consultarse el original en este enlace:
- Recomendaciones sobre la puesta y retirada de las mascarillas.Ā
Las mascarillas quirĆŗrgicas no deben usarse del revĆ©s en ningĆŗn caso.Ā
NingĆŗn tipo de mascarilla debe llevarse al cuello o en la frente.Ā
El uso de mascarilla deberÔ ir siempre asociado al seguimiento estricto de las medidas generales de higiene descritas a continuación:
– Antes de ponerse una mascarilla hay que lavarse bien las manos con agua y jabón o con una solución hidroalcohólica.
– Cubrir la boca y la nariz con la mascarilla y evitar que haya huecos entre la cara y la mascarilla.Ā
– Evitar tocar la mascarilla con las manos mientras se lleva puesta y si se hace lavarse bien las manos con agua y jabón o con una solución hidroalcohólica.
– Desechar la mascarilla cuando estĆ© hĆŗmeda y evitar reutilizar las mascarillas de un solo uso. Las mascarillas quirĆŗrgicas son de un solo uso.Ā
– Por cuestiones de comodidad e higiene, se recomienda no usar la mascarilla por un tiempo superior a 4 h. En caso de que se humedezca o deteriore por el uso, se recomienda sustituirla por otra.Ā
– En caso de ser imprescindible realizar de manera muy puntual un uso intermitente de la mascarilla, se debe extremar la higiene de manos al quitarla y ponerla, y se debe almacenar en un recipiente o bolsa de papel limpios, colocĆ”ndola de manera que no se contamine la parte interior que va a estar en contacto con la cara.Ā
– Quitarse la mascarilla por la parte de atrĆ”s, sin tocar la parte frontal ni la parte interior que estĆ” en contacto con la cara, desecharla en un cubo cerrado y lavarse las manos con agua y jabón o con una solución con base alcohólica.Ā
– En el caso de mascarillas higiĆ©nicas reutilizables, Ć©stas se deben lavar conforme a las instrucciones del fabricante.Ā
De este punto y el anterior se concluye de modo inequĆvoco que el uso correcto de la mascarilla es un acto complejo y laborioso, que exige un conocimiento, celo, atención y medios materiales que no estĆ”n al alcance de todos. Como tĆ©cnico superior en PRL me atrevo a afirmar que no estĆ” al alcance de casi nadie, de modo que la inmensa mayorĆa de la población, como mucho, se limita a fingir que lo hace.Ā
- D) El Instituto de Salud Carlos III, del Ministerio de Sanidad.
En su pƔgina web se puede encontrar el siguiente documento:
https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S1130-14732008000200003
Que llega a la siguiente conclusión sobre el uso de mascarillas por los cirujanos, en intervenciones quirúrgicas de mÔs de una hora:
Conclusiones. Según nuestros hallazgos, el ritmo del pulso aumenta y la concentración de SpO2 disminuye después de la primera hora de la operación.
De este punto y el āBā (recomendaciones de la OMS), se concluye inequĆvocamente que la mascarilla supone un riesgo real para todos los usuarios, incluso si se utiliza adecuadamente, cumpliendo todos los preceptos recogidos en el apartado āCā, y tanto mĆ”s cuanto mĆ”s se incumplan estos preceptos.
- E) El informe sobre las mascarillas de la fiscal D. Valerie Isabel OyarzĆŗn Fontanet.
Esta seƱora, fiscal en LĆ©rida, elaboró en octubre de 2021 el informe āmascarillas, derecho y protecciónā que puede encontrarse en el siguiente enlace:
En Ć©l ratifica y amplĆa todo lo expuesto en los apartados anteriores, concluyendo, con abundante evidencia cientĆfica, que la mascarilla, lejos de ser inocente, es un artilugio que puede llegar a ser muy peligroso, sobre todo para algunas personas, para las que puede llegar a ser un instrumento de tortura.
LA NORMATIVA DE PREVENCIĆN DE RIESGOS LABORALES
El Real Decreto 773/1997, que regula los equipos de protección individual,Ā
establece en su art. 5.1:
- 1.Ā Los equipos de protección individual proporcionarĆ”n una protección eficaz frente a los riesgos que motivan su uso, sin suponer por sĆ mismos u ocasionar riesgos adicionales ni molestias innecesarias. A tal fin deberĆ”n:Ā
- b) Tener en cuenta las condiciones anatómicas y fisiológicas y el estado de salud del trabajador.
Y en su art. 7.2:
- Las condiciones en que un equipo de protección deba ser utilizado, en particular, en lo que se refiere al tiempo durante el cual haya de llevarse, se determinarÔn en función de:
- a) La gravedad del riesgo.
- b) El tiempo o frecuencia de exposición al riesgo.
- c) Las condiciones del puesto de trabajo.
- d) Las prestaciones del propio equipo.
- e) Los riesgos adicionales derivados de la propia utilización del equipo que no hayan podido evitarse.
Todo ello ratificado en la GuĆa TĆ©cnica āad hocā, que se encuentra aquĆ:
En suma, que cualquier EPI, en realidad todos los EPIs ācomo es una mascarilla-, tienen algĆŗn tipo de contraindicación y efectos adversos.Ā
Las mascarillas, como hemos visto, no son la excepción.Ā
Un empresario debe estudiar detallada y meticulosamente los EPIs que entrega a sus trabajadores, evaluando sus ventajas e inconvenientes, e informar a esos trabajadores del modo adecuado de usarlos, incurriendo en responsabilidad si no lo hace. Es decir, ningĆŗn empresario puede imponer a sus trabajadores el uso de mascarilla, sin un estudio previo que acredite su necesidad, eficacia y seguridad, problema arduo tras los datos expuestos anteriormente.Ā
SITUACIĆN LEGAL DE LA MASCARILLA EN LOS CENTROS DE TRABAJO
Nuestro gobierno, haciendo gala de una tĆ©cnica jurĆdica paupĆ©rrima, en su Ćŗltima reforma de la normativa sobre mascarillas, el R.D. 286/2022, se olvida de tratar en su texto articulado el asunto, y en su exposición de motivos (un simple brindis al sol) dice:
En el entorno laboral, con carÔcter general, no resultarÔ preceptivo el uso de mascarillas. No obstante, los responsables en materia de prevención de riesgos laborales, de acuerdo con la correspondiente evaluación de riesgos del puesto de trabajo, podrÔn determinar las medidas preventivas adecuadas que deban implantarse en el lugar de trabajo o en determinados espacios de los centros de trabajo, incluido el posible uso de mascarillas, si asà se derivara de la referida evaluación.
Si es Vd. empresario le pregunto Āæha realizado esa evaluación? En caso negativo ya sabe lo que puede hacer con las mascarillas.Ā
Y en caso afirmativo, pregunto Āæha sido la evaluación individualizada para ese trabajador?, porque, como ya hemos visto, no afecta a todos por igual, y deben tenerse en cuenta las circunstancias personales.Ā
CONCLUSIĆN
NingĆŗn empresario puede imponer a sus trabajadores el uso de mascarilla para āprotegerlosā del sars-cov-2, sin realizar una evaluación individualizada, trabajador por trabajador.
PRL informe mascarilla DIFUSIOĢN
Excelente artĆculo, enhorabuena por todos los datos expuestos.
Me gustarĆa que algĆŗn prevencionista refutara, con datos cientĆficos, lo que dice el autor. Si se atreve.
47 studies confirm ineffectiveness of masks for COVID and 32 more confirm their negative health effects
https://www.lifesitenews.com/news/47-studies-confirm-inefectiveness-of-masks-for-covid-and-32-more-confirm-their-negative-health-effects/?utm_source=must_reads
La muerte a nivel mundial por hepatitis en niƱos se ha desatado y nadie hace nada,las vacunas estƔn masacrando a todos los niveles.
Exacto, y aún nadie se entera, y cuando lleguen a enterarse, ya estarÔn muertos.
Los que llevan meses abrazĆ”ndose y ābesĆ”ndoseā con mascarillas ĀæsabrĆ”n cómo se hace un cultivo bacteriano sobre una placa Petri?
Juntar mascarillas es exactamente eso, intercambiar colonias de microbios de una a otra que, en un par de horas, con calor y humedad, proliferan a millones, tras lo cual, usted se las traga aliƱadas de CO2.
Si tanta precaución quieren tener, deberĆan saber que al respirar normal el aliento sale lejos y se va, pero con el bozal, que hace un efecto cazamariposas, toda la microbiota se queda atrapada justo frente a su siguiente inhalación.
Lo perfecto para esnifar microbios propios y ajenos durante horas.
Que los mĆ”s hipocondrĆacos y aprensivos se hayan enganchado a reciclar aliento aliƱado de bacterias, hongos y partĆculas que nuestro sistema respiratorio arroja lejos por algo, es una paradoja.
Y lo prueba que se lo quitan para estornudar porque se dan asco a sĆ mismos.
Es como ponerse un paƱal y dejarlo todo el dĆa con sus deyecciones dentro bien mezcladitas, pero peor, porque el ojaldre anal al menos no se lo vuelve a meter para adentro.
AsĆ que, adelante, sigan āprotegiĆ©ndoseā atrapando lo que deberĆa irse junto a su boca y su nariz para volver a metĆ©rselo, es sĆŗper sano.
Si, ademĆ”s, como hacen la mayorĆa, no paran de tocĆ”rsela por delante para reajustarla una y otra vez, aƱaden al gazpacho microbiológico de su mascarilla los frotis de cuanto tocan. Teclado con partĆculas fecales, pomos de puertas con restos de esputo ajeno, miasmas de mesas y sillas junto a revuelto de hongos de sus propios dedos.
Una cosa sanĆsima oiga.
Al final del dĆa lleva usted doce horas respirando una ensalada de movidas vivas al aroma de spike tal, que lo mĆ”s normal es lo que le pasa, que tiene la cavidad bucofarĆngea como el culo de un mandril.
Siga ācuidĆ”ndoseā. (Fernando López-Mirones, āEl culo de un mandrilā [Un aullido.])