¿Recuerdan la parafernalia que se montó cuando empezaron a llegar los primeros viales para las inoculaciones? Camiones escoltados por la policía y el ejército. Viales almacenados en frigoríficos a bajísimas temperaturas para su conservación… todo un espectáculo que muchas personas parecen haber olvidado.

¿Y a partir de ese momento, con qué nos encontramos? Sorprendentemente, a partir de ese momento nos dimos cuenta que hasta esa forma de transportar y almacenar los viales, también era una farsa. A partir de ahí, se producían inoculaciones masivas en vacunódromos que estaban al aire libre en pleno verano con temperaturas que superaban los 30 grados, mientras se mantenían los viales en mesas a pleno sol esperando a los incautos que se los iban a inocular.

Todo un teatro para convertir al tema inoculaciones en el tema estrella de la temporada y para engañar a millones de despistados. En estos días se ha producido una noticia, con respecto a los viales de Moderna, que nos ha llamado poderosamente la atención.

Han sido retirados una serie de lotes de Esta marca porque, según publican medios como ‘El País’, se había encontrado un mosquito dentro. ¿Un mosquito dentro de un vial que debía pasar por “estrictos” controles de fabricación, de almacenamiento y de transporte. ¡Un mosquito! ¿Se imaginan encontrar un mosquito en cualquier plato que le sirvieran en el último restaurante del sitio más recóndito de España? Es tremendo. Si no fuera tan preocupante, nos entraría hasta la risa floja.

Entonces nos surge la gran pregunta, si esa es la seguridad que tienen unos viales con lo que todos podemos ver a simple vista, ¿qué puede haber en esos brebajes que no podamos ver? ¿Qué puede encontrarse en ese veneno a un tamaño microscópico? ¿Se lo pueden imaginar? ¿Se pueden hacer una idea de lo que puede haber?

Pero, como ya sabemos, los beneficios son mayores que los riesgos. ¡Dónde va a parar! Y eso es algo que tienen que pensar porque se los digan las televisiones, los políticos, o los médicos vendidos de turno. Es tremendo.

 

7 Comentarios

  1. Tengo que confesar que el control de calidad farmacológico que me mostró el nivel de preocupación por la plebe desprotegida de nuestras autoridades sanitarias con más claridad fue el momento en que adosaron una pegatina del Gobierno de España, chúpate esa, al Áureo Palé de la primera remesa de vacunas, fue un instante mágico, algo así como si ponerle la pegatina garantizase su calidad, Palabra de Sánchez, me vacuno Señor.

    Fue el estricto control de calidad y los ensayos clínicos por parte de nuestras queridas, responsables y eficientes autoridades sanitarias antes de administrar la incógnita composición lo que me llevo a partirme de la risa y decidir que se iba a vacunar su …. ….., Pues eso.

    Por cierto, ya que hablamos de despertadores génicos de enfermedades dormidas, escucho por ahí en programas dedicados a observar el incógnito elemento que se preguntan por unas fibras… solo recordar por si hay algún interesado que las patentes de este tipo de terapias génicas llevan fibras de seda que interactúan con el grafeno.

  2. Ahora solo hace falta cruzar los titulares de la patente con Melina Gates y comprobar que tipo estudios financiaban y los archivos borrados de internet.

  3. Aquí tenemos una tesis sobre el grafeno/fibroina, no hay que irse muy lejos, solo a Murcia.

    http://hdl.handle.net/10803/362097

    “Efectos de films de fibroína de seda/óxido de grafeno vs fibroína de seda/óxido de grafeno reducido sobre células madre humanas de ligamento periodontal”

  4. No serán los mismo mosquitos con el ADN alterado que billy puertas ha soltado según dicen en la Florida? Que curioso, la vacuna de el y los mosquitos también de el. A ver si es que es una muestra de regalo, cortesía de la casa para que los vayamos probando . Como ahora también nos dice que comeremos moscas y gusanos….

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