jinetes

En el capítulo 6 del Apocalipsis, versículos 1-8, se describe la apertura, por parte del Cordero, de cuatro de los siete sellos del Libro. Dando comienzo a una serie de actuaciones y acontecimientos que según los hechos y razones que se van a exponer, ya han comenzado a producirse en nuestro mundo.

[Si Os Encontráis Con La Secretaria De Igualdad Del PSOE, Ni Os Acerquéis A Ella]

La imagen que corresponde al conjunto de los cuatro jinetes es la de la destrucción sistemática y progresiva que está provocando el “rey de la mentira”, Satanás, en nuestro mundo terrenal, cuando se le dan poderes  (Se le dio una corona).  Este proceso como se describe a continuación, cada vez se detecta con mayor claridad.

De esta manera textual se muestra la apertura del primero de los sellos mediante los dos primeros versículos:

1 Y seguí viendo: Cuando el Cordero abrió el primero de los siete sellos, oí al primero de los cuatro Vivientes que decía con voz como de trueno: «Ven».

2 Miré y había un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; se le dio una corona, y salió como vencedor, y para seguir venciendo.

Desgranando el versículo dos:

“Miré y había un caballo blanco”. En este caso, interpreto que el caballo blanco es el  gran engaño del rey de la mentira. Se puede comprobar  que un caballo blanco es el que utiliza nuestro redentor en el capítulo 19 versículo 11-12, y no solo el Redentor: en el versículo 14 se lee “Y los ejércitos del cielo, vestidos de lino blanco puro, le seguían sobre caballos blancos”.

Los hechos de éste jinete lo ponen en evidencia. Todas  sus obras van envueltas en una falsificación de la idea de derecho y/o modernización, léase: aborto (derecho de la mujer), eutanasia (derecho a muerte digna), ideología de género y creación de falsos matrimonios (derecho a la no discriminación).  La creación de sistemas económicos como el comunismo o el globalismo que anulan la individualidad creando colectivismos alienantes unidos a una enorme pobreza, en base a una supuesta modernización. La corrupción sistemática de gobiernos, instituciones y fuerzas de seguridad a nivel mundial, que han secundado y siguen secundando a gobiernos que como simples esbirros de sus dueños, la élite globalista, han engañado al mundo con la existencia de un falso virus SARS COV-2 que ha permitido inyectar a gran parte de la población, supuestas vacunas con tóxicos comprobados como el grafeno que forma estructuras visibles al microscopio y posibles productos igualmente visibles pero de naturaleza desconocida.

“ y el que lo montaba tenía un arco”. Un arco es  un arma de larga distancia en relación a la espada. Un arma selectiva, silenciosa, de apariencia discreta, de difícil percepción, no se caracteriza por producir devastaciones o destrucciones apreciables  pero su uso continuo y constante puede realizar efectos destructivos irreparables.

¿ No son de este tenor los enormes males que este jinete ha producido en el mundo a lo largo del siglo XX y hasta nuestros días? . Veamos algunos ejemplos:

La implantación del asesinato de la vida humana intrauterina. Empezó como despenalización para acabar como un derecho de la propia madre a disponer de la vida del ser engendrado.

La implantación del asesinato de personas (eutanasia) primeramente  a petición propia y actualmente  por decisión de personas ajenas al propio asesinado.

La destrucción de la ley natural implícita en la propia creación, como la existencia de dos sexos hombre y mujer unidos por una relación que produce vida nueva y sustituirla por la autoafirmación de un género que pasa a identificar a la persona y no solo ante sí misma sino ante la propia sociedad, que ya empieza a admitir todo tipo de relación sexual entre personas con independencia de sexo, edad y procedimiento.

– Que decir del destrozo sistemático de la familia potenciado desde el poder con leyes tan diabólicas como las uniones homosexuales con toda las atribuciones propias de un matrimonio natural.

“se le dio una corona” Un Ángel caído, como es  Satanás,  no es poseedor por sí mismo de ninguna corona ya que toda corona tiene que ser otorgada por el dueño de la Creación. Así pues se nos presenta un Satanás convertido en rey que indica un tiempo en el cual su acción puede ser más intensa y pronunciada, como vamos a analizar a continuación.

“ y salió como vencedor y para seguir venciendo”. Sin duda Satanás salió como vencedor del mundo desde el primer momento, lo demuestra el hecho del ofrecimiento a  Nuestro Señor Jesucristo en el momento del comienzo de su vida pública: (Mat.4:9. “ y le dijo: Todo esto te daré, si postrándote me adoras.”) En la actualidad, su triunfo queda de manifiesto por la deriva moral y social sin precedentes en la historia, a la que estamos asistiendo y sin posibilidad por medios  humanos de su recuperación. Veamos:

Los tres poderes del Estado y la propia monarquía están corrompidos, como lo muestra el rey con su emblema de la Agenda 2030 de la élite satánica globalista; un presidente del gobierno fruto de unas elecciones fraudulentas donde el recuento de las actas electorales no se realiza manualmente como manda la ley sino que los resultados los dicta un ordenador cuyo programa se desconoce y de este hecho son conocedores todos los grandes partidos incluido VOX, lo que los hace igualmente corruptos, como simples esbirros de ese satánico poder capaz de poner y quitar presidentes. Zapatero, Rajoy, Sanchez…

Las fuerzas de seguridad mermadas por la sustitución de los mandos no dispuestos a secundar ilegalidades por otros de fácil obediencia  no exenta de prebendas, han dejado en evidencia su menosprecio a la Constitución y a la defensa de los ciudadanos con actuaciones ilegales y empleo de una fuerza injustificada. Su actuación en la falsa pandemia producida por un virus político inexistente a día de hoy, ha sido vivida por todos.

Nuestra democracia que se define como Estado democrático de derecho se asentó en nuestra constitución sobre un poder judicial independiente y en la realidad hemos venido asistiendo a la corrupción del sistema  judicial desde dentro (masonería infiltrada, según el conocido Caso Royuela) y desde fuera por la acción de todos los partidos políticos que nombran a sus jueces para los puestos de decisión, por cierto ya corruptos de entrada al permitir su nombramiento en cumplimiento de leyes falsamente constitucionales, aunque el mismo constitucional tampoco está exento de tropelías legales.

Qué decir de los medios de información con sus periodistas incapaces de salirse de guiones cuyas directrices han sido previamente marcadas, pánico inicial con un virus inexistente como ingrediente y solamente tratable con vacunas que primero sanan y luego solo lo disminuyen pero se paraliza toda la vida social y laboral. Por cierto la guerra de todos contra Ucrania parece que paralizó de momento sus absurdas mutaciones.

Tristemente todo lo anterior se puede aplicar a ese mundo sanitario que incapaces de salirse de oscuros PROTOCOLOS llevaron  a la sanidad al descrédito, saltándose a la torera principios básicos de la relación enfermo-médico, como la emisión de diagnósticos vía telefónica y abuso estúpido de falsas pruebas PCR, etc, cuya inutilidad ya es manifiesta para cualquier persona crítica e inmersa en la simple realidad.

Acabo con la transcripción bíblica de los tres jinetes restantes:

3 Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo Viviente que decía: «Ven».

4 Entonces salió otro caballo, rojo; al que lo montaba se le concedió quitar de la tierra la paz para que se degollaran unos a otros; se le dio una espada grande.

5 Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer Viviente que decía: «Ven». Miré entonces y había un caballo negro; el que lo montaba tenía en la mano una balanza, 6 y oí como una voz en medio de los cuatro Vivientes que decía: «Un litro de trigo por denario, tres litros de cebada por un denario. Pero no causes daño al aceite y al vino.»

7 Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto Viviente que decía: «Ven».

8 Miré entonces y había un caballo verdoso; el que lo montaba se llamaba Muerte, y el Hades le seguía. Se les dio poder sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con la espada, con el hambre, con la peste y con las fieras de la tierra.

Nos encontramos en tiempos apocalípticos. Para muchos, la fe apoyada en la Biblia, puede constituir una referencia que nos ayude a su interpretación.

*Un artículo de Pablo Blas Villarmín