Hace años, a una conocida le diagnosticaron “Esclerosis”. Yo había leído, en la página de la asociación “Mercuriados”, que los síntomas pueden confundirse con los del envenenamiento por mercurio ya que, tanto en uno como en otro caso, lo dañado es el “Sistema Nervioso Central”. Según se decía en esa página, el envenenamiento por mercurio puede ocurrir por inyectar vacunas elaboradas con “Timerosal” y también por parchear muelas con “amalgamas de plata” (Amalgamar no es otra cosa que mezclar mercurio con otro metal).
Tras confirmar que coincidían en ella ambas circunstancias (Tenía varias amalgamas en su boca y la vacunaban, cada año, contra la gripe, por ser diabética), hablé con su marido y le sugerí que interesara un análisis de metales pesados. –¡Fíjate si tu mujer se cura, haciendo algo tan sencillo como sacar esas muelas envenenadas y tomar algún quelante!- Pensé que se alegraría, o por lo menos, que se sentiría esperanzado. Lo que no pensé es que se enfadaría, que es lo que hizo. Hoy la mujer solo sale de casa para ir al “centro de día” (Y no es que vaya, la llevan).
Hace menos años, le tocó a una persona más cercana. Digo “le tocó” porque, para muchos médicos, la esclerosis y otras muchas enfermedades son como una lotería macabra –Cosas de tu genética, “tatocao”- Hablé con su mujer y le dije lo que había leído (Yo sabía que él tenía varios dientes sellados con amalgama). Desde entonces no me habla.
¿Cómo es posible que se enfadaran conmigo ambos consortes, si lo único que hice fue darles, gratuitamente, una información, que yo tenía, por haber pasado muchas horas investigando? ¿Por qué no se atrevieron a solicitar el análisis de metales? Pues porque era tanto como dudar del diagnóstico recibido, y dudar del diagnóstico era tanto como dudar de la autoridad de su médico. De manera indirecta, sin pretenderlo, desafié el principio de autoridad (Que en lógica no es más que una falacia, un error) ¿Se enfadaron porque tienen fe en la autoridad y yo miné esa fe con mis palabras? No, es el miedo y no la fe lo que hace que las personas se atengan a todo lo que dispone la autoridad, sin cuestionarlo. La prueba es que, cuando le hablo a alguien del dióxido de cloro, lo primero que me pregunta es -¿Se podría enterar mi médico, si lo tomo?-
Los médicos forman parte del sistema nacional de salud, y se pretende que los sistemas nacionales formen parte de un sistema mundial llamado OMS, cuya corrupción es más que evidente. Los médicos están llamados a ser las máximas autoridades, por encima de los políticos, pues ya hemos visto que, en caso de emergencia sanitaria, cualquier cosa que se les ocurra, se ejecuta sin cuestionamiento. Multas, palizas, encarcelamientos, secuestros (Tanto de vivos como de muertos), eutanasias forzadas; de todo eso hemos tenido durante estos dos últimos años (¿No eran los nazis los que hacían esas cosas?). ¿Y qué les hace falta para decretar una emergencia sanitaria? ¡Les basta con un resfriado!
Puede que alguien piense que el primer sistema nacional de salud se inventó “con fines nobles”. No voy a entrar en eso pues, a estas alturas, ya es del todo irrelevante. Lo cierto es que hoy es un incuestionable centro de corrupción. Si la idea inicial fue hacer un fondo común para atender a los más débiles, la idea actual es “fabricar débiles” para saquear ese fondo. ¿Quién no ha visto a alguna persona mayor, saliendo de la farmacia, con una gran bolsa de plástico llena de cajitas amputadas? ¿Quién paga todo eso? ¿Cómo vas a decirle a esa persona que se informe, antes de aceptar que le inoculen un mejunje experimental? –Si quieren matarme- te dirá -¿No podrían hacerlo igual con cualquiera de estas cajitas?-
Es duro decirlo pero, los que se han vacunado, lo han hecho porque se sienten atrapados por la farmacopea, porque no conciben vivir sin drogas farmacéuticas, porque son drogadictos y temen enfadar a sus médicos, a sus “camellos”. Cuantas más recetas rellena el médico, más comisiones obtiene, más logran vender las farmacéuticas, más debe pagar la Seguridad Social, más efectos adversos para el “cliente” y más recetas para tratar esos efectos adversos. ¿Cuál es el límite? Es un misterio, si tenemos en cuenta que, en un país arruinado, como es España, que no puede pagar las ayudas a los dependientes, no han faltado “millones para el covit”.
Hace pocos días me enteré de que murió, en mi pueblo, una persona de mi misma edad, de “mi quinta”. Problema cardiaco. Pauta completa. -Cosas de la genética, “leatocao”- Comenta la gente, en la cola de la farmacia. Ya sé que están arruinando el país y encima nos echan la culpa a los que no queremos tragar los mejunjes, pero no te enfades con ellos. Bastante tienen con lo que tienen. Muchos se acuestan, cada noche, temiendo no despertar. ¿Puedes concebir un sufrimiento mayor? Si les hablas del dióxido de cloro, verás el miedo en sus caras y les oirás decir -¿Y si lo tomo y se entera mi médico?-. Pero también es verdad que ver las caras alegres de los que se van liberando, compensa, con creces, cualquier enfado que te puedas encontrar.
En toda la plandemia no he visto despertar a nadie. España es un país de disminuidos intelectuales.
La verdad es que es increíble el grado de incultura, falta de información de todo lo importante, y vacuidad de la gente. Pero también fuera de España. Son auténticos borregos. En lugar de pensar con el cerebro, lo hacen con las vísceras.
Jojo.
Noticia: la Organizacion Mafiosa de la Salud paraliza su valoracion de la vacuna rusa sputnik por la invasion rusa de Ucrania.
Ustedes diran que ambos temas no tienen nada que ver. En efecto. Pero deja claro la politizacion globalista de esa letrina que es la OMS. Y no pierde oportunidad para demostrar a qué intereses sirve. Que no son los de los ciudadanos.
Cada día está más despierto José Miguel…
Felicitaciones!!
De eso se trata ¿No?.. Gracias por desearme felicidad… Un abrazo.
Los despiertos estamos a un lado de una valla imaginaria y hacer que los otros crucen esa valla se convierte en una tarea dificilisima y con muy pocas posibilidades de éxito. Yo, por supuesto, sólo lo intento con mis familiares en primer grado de consanguinidad, a los cuñaos, lo siento, que les den, no han hecho otra cosa que ponernos muy difícil la vida. Ahora empezamos a ver la luz del túnel y confirmar que acertamos de pleno en nuestra decisión. Quizás deberíamos reclamar que paguen ellos los costes sanitarios que se están produciendo por inocularse el experimento alegremente, cosa que pidieron muy vehemente muchos el año pasado, incluido el ínclito Luis Enjuanes, el que decían que nos iba a salvar a todos con su vacuna, para los que nos negamos a pasar por la aguja. En fin cada día más feliz de pertenecer al grupo control. Ahora toca pensar en rehacer la sociedad perdida y enjuiciar a tantos malnacidos que nos han intentado destruir.
Prefiero no comentar nada, porque los borregos se merecen lo que les pase, y nosotros tambien por no haberlo impedido a tiempo de la unica manera en como se impiden los genocidios.
Ahora llegados a este punto no queda nada mas que hacer que esperar lo peor de lo peor, para todos.
Yo prefiero que me deseen “lo mejor de lo mejor”, como Carlos. Está bien no ser optimista, siempre que tampoco seas pesimista.
Claro que el principio de autoridad es el principal que rige sus vidas.
Aunque deje de leer todos los medios del régimen en los primeros días de Plandemia y la televisión la dejé de ver hace muchos años, y además he tenido la suerte de ser excepcionales los vacunados en mi círculo familiar y de amistades, no he podido sustraerme a la Plandemia totalmente, y eso me jode, lo de la guerra me molesta menos, se que el que se vacuna por miedo es un cobarde como enemigo con un arma en la.mano, no me imagino a un mal médico cogiendo un fusil con valentía aunque si “eutanasiando” a un anciano indefenso mientras se marca un baile para Tiktok.
A mí lo único que me ha dado miedo es caer en la trampa, y aunque en un primer momento como otros muchos intenté explicar lo que podría esconderse tras la Plandemia, enseguida desistí del asunto al darme cuenta que había cosas positivas tras el disparate covidicio.
La guerra en Europa también la advertí en abril de 2020 y el dinero digital objetivo último de la Plandemia junto a otros subproductos semanas después en abril de 2020.
El problema o lo mágico es que todo se ha cumplido según lo previsto por los malos e intuido por los buenos, y es aquí cuando esta mañana con el café he buscado un libro de mitología para comprender a fondo a Casandra y su maldición con la experiencia de lo vivido.
Apolo no le retira a Casandra el don de la profecía sino el de la persuasión. Todas sus predicciones serán ciertas, pero nadie las creerá.
Todo se cumple según lo previsto, para evitarlo la sociedad debe recuperar el don de la persuasion, y para eso es necesario que cambiemos las predicciones que se cumplen por la síntesis, según la RAE ” Composición de un todo por la reunión de sus partes” y esa síntesis lanzarla a la cara de los antitéticos, concordantes, compatibles y analíticos.
Que se ponga coloraos por vergüenza intelectual y empírica. Que se escondan como ratas por la ridiculez concordante con sus creencias ajenas a la realidad. Ataquemos con saña y crueldad un pensamiento pervertido ajeno a la síntesis que está atrapado en el análisis “Distinción y separación de las partes de algo para conocer su composición.” como si fuera un cepo oculto en un libro de teoría política y social del siglo XX
No se han enterado estos i”ntelectuales” que nos llaman negacionistas que el hombre es mucho más hijo de puta en el siglo XXI, el hombre evoluciona, dicen ellos, y ahora son semidioses como Apolo.
Ataquemos al enemigo, ataquemos con dureza a los que presumen de pensar y de saber, ahí les dolerá, y lo demás vendrá rodado, volveremos a ser hombres
Casi cien artículos llevo publicados en “El Diestro” con esa intención… Me ha gustado tu apunte sobre el Mito de Casandra. No lo conocía. Profundizaré yo también.
La figura del camello sanitario es notable, pero los fármacos intelectuales son lo peor, y el mono de esclavitud al sufrimiento es muy poderoso. ¡miedo a la libertad! Y no hay mayor culpa que la auto traición perversamente inducida por el amo, por lo que el comercio de justicia para equilibrar la balanza se realiza en otro campo de juego, el emocional, mientras en el intelectual se imponen las órdenes y justificaciones del gobierno del sufrimiento y la abundancia.
¿Pero, cómo traspasar esa muralla de niebla hasta llegar al corazón de las personas?
Eso es un arte, el de conectar con lo verdadero, el de conocernos y desarrollarnos.
“Ésto que éstá sucediendo está autorizado a pasar porque no se le ha pedido a papá Estado, como le hemos pedido cosas a papá Noel, los certificados o pases intelectuales para pensar, soñar, crear, equivocarse libremente y por cuenta propia. Seguramente, los más angurrientos pedirían el certificado de valentía y honor, que se lo llamaría Pase Digno. Así sí lo compran, por lo que en la siguiente e inevitable dictadura del bien es posible administrar la libertad como corresponde, con todas las de la ley sin la trampa, y por supuesto, con polichías que multen y metan presos a los rebeldes sumisos hasta que restablezcan su confusión.”
Es cierto, cuando no hay respeto sólo queda la compasión, porque el respeto es una consecuencia de un reconocimiento mutuo, y cuando hay mucho desvalance emerge el conflicto, la sumisión y el fanatismo. ¿Quién podria respetar a un cobarde o a un deshonesto? ¿A un esclavo? ¿Quién podría negar alguna facultad natural, y asegurar que alguien no la posee?
Lo que se considera es la vida, como el tesoro máximo a cuidar y eso no necesita justificación ni argumentación jurídica alguna, la verdad es así.
Todos estamos dormidos o ensoñando en algo, porque el conocimiento es enorme, y lo que hay son intensidades y coloraturas emergentes, y todos nos encontramos con y en la verdad muchas veces al día sin reconocerlo, porque hay que cumplir con las órdenes de lo que debería ser, y eso no es efcicáz como denominador común, porque es un prógrama de servicio y a pesar de él, logramos conquistar. Es decir, que pensar únicamente desde dentro de la ficción sólo se crean complementos para el sistema siendo una resistencia reactiva y lógicamente un reflejo natural, mientras que observar la ficción desde fuera únicamente, es dar la espalda a lo verdadero y vasto de donde tomamos lo que consideramos como nuevo.
Realmente, todo se encuentra a la vista y disponible, aunque la naturaleza siendo el Si a todo, también llamado Dios, creación, realidad, verdad, amor y vida, no es una idea a la cuál se le pone barba y túnica, la naturaleza exige unos mínimos de libertad, valentía y honor para consumar una comunicación real, en caso contrario, se encuentra la ficción, en donde se experimenta lo opuesto, lo rechazado.
“todos nos hemos equivocado, probablemente nos estemos equivocando en algo ahora, y posiblemente no equivocaremos más adelante, aunque también hay momentos en que nunca nos hemos equivocado, ni nos equivocaremos”
Hay un truco para no equivocarse nunca. Lo difundió Agustín de Hipona. Decía “Ama y haz lo que quieras”.
Nos acostumbraron desde pequeños a pastillas milagrosas…te duele la cabeza?,una pastilla,no puedes dormir?…una pastilla y así pastillas para todo.
Quizás es que antes las pastillas eran de otra cosa y si curaban…las de ahora con solo leer sus efectos adversos dan ganas de no tomar ni una.Y para tratarte el corazón te estropean los pulmones,y para curar estos te estropean los riñones y al final coges diabetes….no hay salida!.
Y si no eres adicto a los medicamentos legales recetados por camellos legales,pues te haces adicto a otra cosa,a un blogg,a comprar cosas,a cualquier vicio…y tampoco hay escapatoria.
Ahora la gente se está volcando en los suplementos,algunos funcionan,otros no tanto,y puede que al final muchos medicamentos sean solo placebos y que actúe más la persuasión que la química…como en la política,de la que ya…tampoco podemos escapar.
Aconseja al ignorante, y te tomará por su enemigo” (proverbio árabe)
Así es señor mío la cosa. Y la verdad es que no sé si el mecanismo que desencadena esa reacción, es la incertidumbre insoportable que les provoca salirse un milímetro del marco, su imperiosa necesidad de seguridad que no les permite poner en cuestión nada, o el miedo al ridículo (orgullito). El caso es que he llegado a la conclusión que no hay nada que hacer con ellos, nadie te puede salvar de ti mismo salvo tú mismo.
En fin, que estamos en tiempos muy interesantes. Después de una época de relativa estabilidad dominado y señoreado todo por la más absoluta mediocridad de hombrecillos insignificantes con mentalidad de funcionario, vamos saliendo del letargo. Estamos viviendo momentos cruciales para la humanidad sin duda y aunque es duro de admitir, era necesario algo que removiera los cimientos, porque la realidad es que la degeneración es ya insostenible. Que esto sea un revulsivo que sepamos aprovechar depende de nosotros, pero la verdad es que continuar como estábamos, con lo más mediocre controlando todo (Los Sánchez, Casados o Rufianes como botón de muestra) se ha tornado insufrible. Veremos hasta donde son capaces de llegan todos estos demonios globalistas, apoyando su acción y confiando su ejecución en personajillos tan mediocres. Todo ha ido de mal en peor precisamente por la poca grandeza y la degradación humana de los dirigentes (y de todo el que tiene algún puesto de responsabilidad, por pequeña que está sea. Desde un director de colegio de pueblo, hasta un presidente. Todos “relajados” en la mecánica, sin cuestionarse nada siguiendo el método y precipitados en la perversión sin darse cuenta y, encima, considerándose a si mismos “estupendos” y divinos de la muerte en su blindada “corrección) de los últimos años, justo los que hoy, vendidos, nos han vendido a todos. No confiaría – si yo fuera uno de ellos -mucho en que no la caguen por algún sitio. Sánchez, Trudeau, Macron?……por favor, son muñecos, carne muerta envolviendo un vacio. De verdad alguien puede creer que gente tan anodina puede alumbrar algo digno de perdurar?.
Veremos…….