Lo reconocemos, el periódico ‘La Razón’ nos tiene tremendamente despistados. Si por un lado se está comportando como el resto de medios siendo simples voceros del relato oficial, por el otro, de vez en cuando, saca informaciones más que comprometidas que tiran absolutamente por tierra ese relato. Nos da la sensación de que no es más que una estrategia para empezar a posicionarse de perfil cuando todo esto pase y acabe destapándose la verdad.
Pero vayamos a lo que nos cuentan hoy. Han publicado un artículo en el que analizan el número de contagios que se han producido en esta llamada “sexta ola” y lo han comparado con las olas anteriores. Y adivinen, en esta ola se han producido 4.796.992 contagios y la suma de contagios de las olas anteriores da una cifra de 4.972.765 contagios. Y todo esto según fuentes del Ministerio de Sanidad.


Si se dan cuenta, llevamos meses escuchando que la solución para todo esto eran las inoculaciones. Es más, cuando alguien se inoculaba le calificaban como “inmunizado”. Viendo estos datos no podemos evitar preguntarnos lo de siempre: ¿inmunizados de qué?
Cada vez es más evidente que las famosas inoculaciones experimentales no han sido más que una forma de engaño con la que muchos se están enriqueciendo. Y les vamos a confesar algo, si solo se trata de ganar dinero nos indignamos pero es solo dinero. El problema es que, bajo nuestro punto de vista, el asunto va mucho más allá del simple enriquecimiento económico. Eso es lo que más nos preocupa.
Dentro del gigantesco fraude multifactorial de la “pandemia” y el virus cansino, la pieza clave es el test. El timotest, con sus “positivos” de chichinabo y su escandaloso desajuste cifras tests/ logística de laboratorios.
Cada vez se hacen más tests, por lo tanto cada vez se pueden añadir a la contabilidad fraudulenta más “positivos” que como sabemos todos es a lo que hacen identificar como “contagio”, y esto a su vez con “enfermedad”. Ilusionismo verbal.
Y sobre ese fraude que empezó antes de la fuga pangolinera, se añaden esas cifras de personas inoculadas con eso, que efectivamente están enfermando y muriendo.
Pero seguir negando la validez del test y exigiendo la nulidad de casi la totalidad de “diagnósticos” sigue siendo la prioridad número uno. Me parece increíble que después de dos años aún no se haya logrado tumbar ese pilar fundamental.
Pero si los CDC e incluso la OMS, sin olvidar la declaración del propio Ministerio de Sanidad de aquí, niegan la mayor en cuanto a la validez de los PCRs, test de antígenos y demás zarandajas, para diagnosticar cualquier enfermedad y esta en particular.
A ver de que estamos hablando, con que veracidad y sobre todo con que fiabilidad, se sigue dando por bueno, el resultado de una prueba que cada uno se hace en su casa. Es como si coges un botecito para análisis de orina , para ver si tienes cataratas y aunque veas perfectamente, si te da positivo, rápidamente lo comunicas a tu médico y te quedas en tu casa “viendo” la tele,
Como está claro que todas estas medidas no provienen de ningún respaldo sanitario, ni siquiera del propio Gobierno, sería lo lógico buscar a esas ratas que dictan estas incongruencias.
¿Quién valida esas pruebas? Realmente, se están auto diagnosticando, cosa que es incomprensible ante una supuesta enfermedad tan “letal”. Otra prueba del engaño y de la injustificable medida sanitaria que, de su resultado positivo, se obliga a tomar. Cómo aquí, menos trabajar, se hace caso a todo lo que dictan, no pocos se están aprovechando del tal circunstancia confinatoria, dando como resultado, que las calles aparezcan vacías mañana , tarde y noche, en detrimento de cualquier actividad social y económica. Hecho éste, que vino precedido del periodo navideño y la gran idea de vender esas pruebas en las farmacias a la alcance de cualquiera, tenga las neuronas alteradas o carezca de ellas.
En definitiva, es esta sociedad la que ha dejado aparcado, bajo tierra, el sentido común y la capacidad de discernir, la que con su “responsabilidad” mal entendida, da muestras de una esclavitud mental muy preocupante, haciéndose reos de su propia ignorancia.
Si sólo fuera en ésto, igual tendría arreglo, el problema es que con su actitud y aptitud en otros temas, están sirviendo a que la implantación de la famosa agenda , sea un camino de rosas. La autodestrucción está servida.
España como otros países va a declarar dentro de poco,que el coronavirus es una resfriado común,que se reproduce en los pulmones y se propaga por la garganta la primera semana…y terminarán las restricciones.
Alemania aconseja a la gente hacer gárgaras con agua tibia y sal por la mañana y por la noche para cambiar el pH de la garganta y hacer que no se reproduzca el patógeno.
Y eso es todo…aunque seguirá muriendo gente por la vacuna.Ya hay libros y manuales de supervivencia escritos en EEUU,por qué en las ciudades socialistas morirá más gente que reemplazarán por inmigrantes,y habrán carencias de todo tipo,mucha gente se irá a vivir al campo.A nosotros nos suena a lo de los cristianos viejos…
Y si a partir de ahora regalan una piruleta a cada positivo el asunto puede ir a peor. Yo estoy convencido.
jajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja…😉
Desde el más profundo desconocimiento de cómo llegan las notificaciones a la prensa, televisión o radio, de todas estas cifras, de las diarias de contagios, de los fallecimientos y de las mentiras tan brutales que sueltan, me pregunto si no hay forma legal de solicitar investigaciones sobre si toda esa información es veraz o no y si de éstas, los comentarios gratuitos que exponen sin el menor pudor, se ajustan a la realidad y veracidad. En el caso de que deriven tal información a la responsabilidad del Ministerio, solicitar a este lo mismo y si éste, a su vez, lo deriva a hospitales, seguir tirando del hilo, hasta llegar a ovillo.
Lo mejor de todo es que la ciencia del siglo XXI no es capaz de saber por qué y de qué mueren cien personas mas al día. Joder con la ciencia del siglo XXI, eso debe ser porque lel sensor corporal de los fallecidos aún no envía señales que avisen del cambio climático o del cambio del ritmo cardíaco, seguro, pero en cuanto tenga el chip en activo la SienSia del XXI sabrá de qué, como y cuando morirán.
Viva la SienSia del siglo XXI, el control neuronal y el huevo cocido.
Esa misma ciencia que identificó el “virus” a toda pastilla, fabricó en diez minutos los PCR; predijo y predice sus infinitas variantes y olas, determinó que “sólo se saldría con vacunas”, y por supuesto desarrolló la “vacuna” en tiempo récord, y finalmente concluyó que el virus “había venido para quedarse”.
Esa ciencia.
Pero qué profundo asco dan algunos medios: https://www.elcorreogallego.es/covid/mas-de-75000-gallegos-mayores-de-cincuenta-anos-perderan-la-validez-de-su-pasaporte-covid-manana-IE10279045 . Leo los párafos iniciales, que transcribo abajo, y me dan arcadas (aparte de mentir como bellacos, ya que casi ningún bar por aquí, nadie te lo pide):
“El pasaporte covid se ha convertido ya en nuestro documento más valioso.
Hoy por hoy es mejor salir de casa sin el DNI que sin el certificado, pues las actividades a las que pueden acceder sin él son muy limitadas, prácticamente inexistentes en la comunidad gallega. Así las cosas, tenerlo al día es fundamental para poder disfrutar del ocio y, a partir de este 1 de febrero, además de acreditar tener la pauta completa, para los mayores de cincuenta años será necesario también tener la tercera dosis.”
1 + 1 = 2 (💉+💉 = 💀💀)
1 + 2 = 3 (💉+💉+💉 = 💀💀💀)
2 + 2 = 4 (💉+💉+💉+💉 = 💀💀💀💀)
Suma y sigue…
👿.