El jueves 27 de enero, de 11h a 14h, tendrá lugar una gran cacerolada frente al  Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, en la calle Historiador Chabás, 2 de València. Convocan las organizaciones Unión Activa Valencia, Triple V y NANOM (No Al Nuevo Orden Mundial)

La implementación del Pasaporte Covid ha supuesto una vulneración flagrante de los derechos fundamentales que amparan a los ciudadanos españoles.

Y no sólo su aprobación en la Comunidad Valenciana en el pasado mes de diciembre fue una decisión judicial contraria a la Constitución Española sino que además ha demostrado su total inutilidad y un efecto contraproducente en todos los niveles de la sociedad.

El fiasco de las inoculaciones experimentales que permiten, y según algún estudio incluso incrementan, el contagio, combinado con la implementación del QR, la estacionalidad del virus y el testeo masivo han tenido como resultado un aumento espectacular de los casos y de la Incidencia Acumulada.

A la barra libre para contagiar de los Pasaportes QR (afortunadamente Ómicron es leve) se suma otra consecuencia perversa: coaccionar a quien no quiere inocularse por no considerar necesarias, efectivas y seguras las inoculaciones génicas experimentales.

Tan evidente es el fracaso del Pasaporte Covid como “herramienta para controlar la pandemia” así como su ilegalidad, que comunidades autónomas como Asturias, Cantabria o Aragón ya han renunciado a seguir haciendo uso de él.

Sin embargo, en la Comunidad Valenciana, el presidente Ximo Puig, lejos de entrar en razón, ha anunciado su intención de ampliar su uso.

Y como no puede justificarlo ya sanitariamente, el Molt Honorable ha pasado a defender su impacto económico alegando que “da más seguridad a los locales” y que “las comunidades autónomas que lo han adoptado han tenido mejores resultados económicos para su sector turístico”.

Argumentos sin base y que suponen una burla al sector hostelero que ha sufrido un evidente chantaje por parte del Govern: tras el sufrimiento infringido con medidas anticientíficas, propuesta de Pasaporte a cambio de levantar restricciones de aforo y horario. Así, en dos años, la pequeña y mediana hostelería valenciana ha sido uno de los grandes damnificados por la gestión política, además de los niños.

Esto confirma lo que muchos llevan meses sospechando; que tras el empeño de “Vacunar, vacunar y vacunar” y de restringir derechos, se encuentran motivaciones espurias, poco transparentes y profundamente antidemocráticas. Tal vez el Gobierno valenciano está vendiendo los derechos de los ciudadanos a los intereses de las farmacéuticas. Estas empresas firmaron contratos secretos con la Comisión Europea (recordamos que la presidenta Van der Leyen está casada con un CEO de una biotecnológica ligada a Pfizer)

Unión Activa Valencia llama a participar masivamente en la protesta ante el TSJCV, órgano judicial que no ha puesto ninguna limitación de momento al gobierno de Ximo Puig, para expresar públicamente que un nuevo auto favorable al Pasaporte cae ya en una posible prevaricación y connivencia con las restricciones antidemocráticas que Puig lleva meses imponiendo. En este sentido, cabe señalar que Tribunal Superior de Justicia de Aragón, en su desestimación de la ampliación del uso del Pasaporte argumentó que el “sacrificio de un derecho fundamental no es una opción”.

Por último, Unión Activa Valencia insta al TSJCV a proteger el Estado de derecho y a hacer valer la democracia, fundamentada en el respeto a los Derechos Humanos y los Derechos Fundamentales de los ciudadanos.