Nos ha llegado, vía WhatsApp, un vídeo de la red social Tik Tok que demuestra lo ridículo de algunas medidas. Entra una persona en un restaurante sin mascarilla y recibe la recriminación del camarero, que le dice que sin mascarilla no puede acceder al local, el cliente sale a por la mascarilla, entra en el local, se sienta en la mesa y, de momento, se quita la mascarilla, recibiendo el agradecimiento del camarero por su proceder.
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Algo que demuestra la inutilidad de algunas medidas… Os dejamos con el vídeo…
