Los austriacos que se niegan a recibir la vacuna COVID-19 obligatoria antes de que el gobierno imponga una fecha límite enfrentan a prisión y enormes multas por incumplimiento.
[Nuevas ofertas de empleo publicadas por Angulas Aguinaga]
Las preguntas sobre qué pasaría con aquellos que todavía se negaban a aceptarlo ahora se han respondido en forma de un borrador que se filtró a los medios de comunicación, según informa el digital Info Wars en un artículo que puedes leer en este enlace.
“Según el proyecto de ley, cualquier persona que se niegue a asistir a una cita de vacunación programada recibirá una citación oficial de las autoridades locales. Si una persona no se presentaba, sería convocada una vez más en las próximas cuatro semanas ”.
“Si también se ignora la segunda solicitud oficial, la persona enfrentaría una multa de 3.600 € o cuatro semanas de prisión. La multa aumentaría a 7.200 € para quienes ya hayan sido multados dos veces por violar el requisito de vacunación “.
Nadie será “llevado por la fuerza” a un centro de vacunación para que lo pinchen en contra de su voluntad, aunque tenga la seguridad de que lo pondrán “a la fuerza” tras las rejas si continúan negándose.
Si se aprueba, la legislación permanecerá en vigor durante tres años, y el gobierno decidirá si recuperarse de COVID es una exención razonable.
Solo estarán exentos las mujeres embarazadas y los niños menores de 12 años, además de aquellos que enfrentan “un peligro para la vida o la salud” al recibir la vacuna.
Quien nos puede salvar de tanta locura? yo solo veo un asteroide.
Uno en cada hemisferio y a la vez, por si acaso.
Buenas tardes: Espero que esta ilegalidad no se convierta en realidad, es evidente que posiblemente estemos delante de otra artimaña mas, contra los que ejercen su libertad de no inyectarse algo que se encuentra en fase de experimentación. Ahora donde está Europa ante esta aberración contra los valores expresados en la fundación de la UE. La respuesta mas importantes seria la judicial planteando su paralización presentando el informe del Dr. Campra. La otra es presentarse en manifestación para entrar en la cárcel eso si previamente haber sacado todo su dinero del Banco.
Muerte ya a estos nazis, fuerza pueblo y defender vuestros derechos.
Ya no me sorprende nada. De unos hijos de Satanás genocidas y sin escrúpulos, verdaderos indigentes morales, no se puede esperar nada bueno. Aberrante es poco, todo esto es de una criminalidad tan evidente que es aterrador, pero más que nada porque ningún juez va a posicionarse en contra y eso es lo que verdaderamente asusta : el nivel de corrupción y criminalidad en que se ve envuelto un mundo gobernado por psicópatas de manual, donde los ciudadanos se ven inermes ante la maldad y crueldad sin límites de unos tarados mentales.
¿Es que no hay un juez justo en ese país?
Nada. Humo de caña. Seguro que aquí no llega.
Nosotros sigamos a lo nuestro. A llamarlos criminales, asesinos, genocidas y todo lo que nos relaje.
Esto es como si en una trinchera, el enemigo te dispara con calibre 7,62 y tu le respondes gritándole:bobo!. Seguro que les ganamos.
Hay que repasar la historia. Y ver que cuando los judíos quisieron reaccionar y plantar cara ya era demasiado tarde. Ya estaban en guetos, desarmados y confinados. Y de ahí al matadero.
Pero a nosotros eso no nos pasará. Nosotros somos más listos. Tenemos internet para desahogarnos.
Tranquilos. No nos pongamos nerviosos ante tantos guantazos. Seguro que les coge tendinitis y dejan de pegarnos.
A ver si lo pillamos a la primera. Alguien tiene la menor duda de estos monstruos que quieren exterminar a miles de millones de humanos -y ahora ya llevan unos cuantos de miles ejecutados con la inyección letal y el 5G-,¿ no van a multar o encarcelar a los que se nieguen a pinchar?
Me citan y voy allí con unos impresos de la carta de bioética y del código de Nuremberg, para dejarles bien claro que cualquier intento de forzarme a recibir un tratamiento experimental contra mi voluntad es un crimen contra la humanidad, entre otros experimentos forzados con humanos. A los presentes les preguntaría si estarían dispuestos a responder ante los tribunales ante el tema de posibles indemnizaciones por efectos adversos. ¿Que llaman a la policía? Pues les explico el marrón que les puede caer si cumplen una orden por parte de unas autoridades que más tarden pueden acabar en un tribunal.
No importa lo chulo que se pongan. Si tratan de obligarme a un tratamiento médico están cometiendo un delito, y más grave cuando ni es seguro, ni eficaz ni necesario (se conocen otras alternativas con medicamentes más conocidos y por tanto más fiables).
¿Quién va a obedecer una ley en la que te juegas la propia vida y encima el que lo ordene va a acabar en los tribunales por ello, incluso enfrentarse a la pena de muerte por crímenes contra la humanidad?
Austriacos!levantaos!a ver si nos dais ejemplo a los españoles .. porque..vaya tela…
Me preguntaba que para que sirven los codigos de nuremberg y los demas tratados internacionales que protegen a los ciudadanos libres… pero luego me he acordado de que sirven lo mismo que la constitucion española, para nada.
Hay que empezar ya a pensar a que tipo de castigo habra que condenar a todos estos asesinos, porque la horca ya como se queda corta. Tienen que vivir, y si fuera posible incluso alargarles la vida tanto como fuera posible, pero haciendoles sufrir lo indecible.
Todos podrán acogerse a la excepción “peligro para la vida o la salud” ¿no?
Los Nazis a vuelto a Austria.
Me quedo sobrecogido, ante esto, la única solución Austriacos aunque duela es que os ponéis el puto brebaje o matáis a vuestros dirigentes, no hay más, recordad, muerto el perro se acabo la rabia.
Si al imbécil del Mejide y todos sus colegas telebasureros les parece bien esta persecución nazi que lo diga y así se podrá constatar la mala sangre nazi que corre por todas sus venas
Y el juez se enfrenta a la muerte porque como esto siga asi alguno va acabar mal estais a punto de que la gente estalle y luego direis que nadie lo podia preveer. Se esta experimentando con la gente y nos tenemos que someter voluntariamente pues va a ser que no y va a ser que se va a liar.
Sin novedad en el frente. Vamos bien. La purga continúa.
Disidencia + Acción = RESISTENCIA
El abogado alemán Reiner Fuellmich impulsa un procedimiento judicial que ha recogido cientos de testimonios y pruebas sobre la fabricación intencional de la alarma sanitaria en torno al Covid-19. En la prensa se ha denominado Segundo Juicio de Nuremberg, o Nuevo Tribunal de Nuremberg. Oficialmente se denomina Comité Alemán de Investigación del Coronavirus. Un equipo de más de 1.000 abogados y más de 10.000 expertos médicos han iniciado un proceso judicial contra los CDC, la OMS y el Grupo de Davos por crímenes contra la humanidad. Este proceso ha efectuado presentaciones judiciales en distintos países. Ha sido denominado «Segundo Juicio de Nuremberg», por la gravedad de los cargos y el impacto internacional del expediente. Reiner Fuellmich es el abogado que logró condenar al gigante automovilístico Volkswagen en el caso de los catalizadores manipulados. También logró que se condenara al mismísimo Deutsche Bank como empresa criminal.
https://diariodevallarta.com/category/contracara/la-otra-cara-del-covid-19/reiner-fuellmich-segundo-juicio-de-nuremberg/
Con independencia de que van a saco, está claro que, el primer ministro austriaco, ha recibido las dádivas correspondientes, imagino por parte de las farmáfias y de los elicópatas. El por qué de Austria, es cómo el por qué de China. No creo sinceramente que ésto sea así, cómo el dictadorzuelo de Feijóo. Asustan para implantar el pasaporte definitivamente, que es lo que más les interesa. Control y control. Para los que no quieren kakunarse, ya inventarán algo para meterlos debajo del mismo paraguas, pero de esas medidas, nada. Lo que nos llega, es lo que quieren que pensemos y acongojarnos, pero la verdad, creo que ya tenemos el c.., pelaó.
El número 1 del nuevo orden mundial es Klaus Schwab Rotschild. Hay que cortarle la cabeza a la serpiente. En la web: http://www.uncatolicoperplejo.com tenéis más información.