figuras

Leyendo un artículo firmado por el gran Recortes sobre Antonio Romero Martínez, hermano de Pedro Romero, me he topado con un párrafo que me ha llamado mucho la atención y que quiero compartir con todos los lectores y amigos de El Diestro un párrafo que dice mucho de la actitud de las figuras, una actitud que parece muy habitual a lo largo de la historia de la tauromaquia y que cambia poco a lo largo de los siglos. Dice así este párrafo:

[Conoce las oportunidades de empleo internacional de Roche Bobois]

«Contratado Pedro Romero en la Corte para la temporada de 1791, impone como segunda y tercera espada a sus hermanos José y Antonio; la Junta de Hospitales acepta no sólo a estos diestros, sino hasta los honorarios que Pedro señala, que son tres mil reales por corrida para él y mil quinientos a cada uno de sus hermanos. El gran deseo de los consiliarios de toros de poder escriturar al que en las corridas reales había vencido a sus compañeros, siendo aclamado por el público como el coloso del arte, hizo se allanasen todas las dificultades. Con el mismo cartel de espadas se dieron las corridas de las temporadas de 1791, 92 y 93».

Así las cosas podemos comprobar como la figura de la época, Pedro Romero, imponía a sus compañeros de cartel e incluso los honorarios de estos, algo que muchos achacan a las de hoy en día, a las figuras de siempre.

¿Pensáis que es así?, ¿creéis que las figuras imponen actualmente hasta ese punto?