El Gobernador del estado norteamericano de California, Gavin Newsom, es un defensor a ultranza de la vacunación del COVID-19, de hecho en su estado se exige la vacunación a niños, pero lo que llama la atención es que, según publica ‘Los Angeles Times’, no ha vacunado a su hija de 12 años.
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Según la noticia, que puedes leer en este enlace, el Gobernador de California dijo que su propia hija, que recientemente cumplió 12 años y es elegible para la vacuna, aún no la ha recibido porque tiene “una serie de otras inyecciones” que recibir primero.
Es decir, el propio Gavin Newsom, que exige las vacunas para los hijos de los demás, a su hija de 12 años no la inocula; sinceramente nos llama mucho la atención esta actitud del progre Gobernador de California, pues él debería ser el primero en dar ejemplo.
Pero parece que las vacunas son para los hijos de los demás, que la hija del Gobernador de California no será vacunada. Cuanto menos curioso y una decisión que dice mucho de la confianza que Gavin Newsom tiene en la vacuna del COVID-19.
Que pena que los malos ganen siempre. Si si ya se lo que me van a decir, que eso no es cierto, que el bien siempre gana, si si, pero hoy no…..mañana.
Porque para cuando el bien logra vencer, el mal ya se ha llevado por delante todo lo que habia que llevarse y todo lo que tenia intencion de llevarse. Y es que al final, aun cambiando la expresion de que el mal siempre gana, se puede decir que pase lo que pase, el mal sale ganando.
Pues tienes mucha razón.
Toda esta patraña siempre estuvo pensada para joder a los pobres, ni más ni menos. Estos degenerados psicópatas ni se van a poner la basura tóxica ni se la van a poner a sus allegados, pues el mal lo quieren para los demás. Su crueldad e hijoputismo no tiene límites, no pensemos en que nos gobiernan personas, no lo son, son engendros sin alma.
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Obvio, las ovejas pendejas que asumen, aceptan y aman todo el lo que sus líderes les dicen hacen.
Mientras estos líderes soló miran para abajo burlándose de ellos.
Cuanto borrego, cuanto cretino, qué pena, qué asco de sociedad miserable, aborregada, embrutecida y absolutamente nauseabunda.
Hay algo que se te pasa por alto, y es que la gran mayoría de las personas viven para dar rienda suelta a su egoísmo. El hedonismo reina en nuestro mundo, quien vive para complacer sus sensaciones e instintos, sin importar lo que dicha conducta afecte a sus prójimos, se engaña a si mismo y engaña a los demás. Es decir vive engañando para alcanzar sus hedonistas objetivos y por lo mismo frecuentemente será engañado. Amigo las multitudes cosechan lo que siembran. Ancho es el camino que conduce a la perdición y multitudes van por esa carretera distendidos y alegres, sin percibir que tal conducta conduce a su destrucción. Estrecho y difícil es el camino que conduce a la vida y pocos son los que lo hallan. ¿Ya oíste hablar de ello?