Nos parece absolutamente inconcebible y de tomadura de pelo criminal lo que está sucediendo en el mundo con la excusa del virus porque, evidentemente, nos han tomado por tontos.
Resulta que nos encontramos con un supuesto virus “natural” que ha entrado en nuestras vidas hace ya más de un año y medio. Los expertos han sido incapaces de aislar, secuenciar y purificar ese supuesto virus, pero son capaces de identificar sus supuestas mutaciones con infinidad de “variantes”. Si no han sido capaces de identificar al “virus” original, no podemos entender cómo pueden identificar esas supuestas variantes.
A finales de 2020 llegaron las mal llamadas vacunas que se iban a convertir en el arma “mágica” contra el virus y la única “solución” posible para que la población se “inmunizara”, tirando por tierra la lógica inmunización natural que adquiriríamos todos a medida que los supuestos contagios del virus fueran avanzando.
Pero parece ser que eso tampoco funciona, que ese medicamento experimental que se está inoculando una gran parte de la población es, precisamente, el causante de las variantes. Si recuerdan, al principio de toda esta farsa nos contaban que el virus no podría sobrevivir por encima de los 26 grados de temperatura y ahora resulta que nos encontramos con contagios en verano. Han sido tantas las contradicciones con la que se nos ha estado intentando engañar que podríamos escribir un libro de varios tomos con todas ellas.
Pero es que ahora nos encontramos con que la OMS parece tener línea directa con el virus como si mantuvieran reuniones periódicas con él porque nos cuentan, en declaraciones del director de la oficina regional para Europa, Hans Kluge, que habrá unos 236.000 muertos más en el continente europeo, antes del próximo 1 de diciembre. Y para justificar sus predicciones nos dicen que “la semana pasada el número de víctimas mortales aumentó un 11%, un incremento que confirma esta previsión”.
Y como nosotros no nos consideramos imbéciles, a pesar de lo que crea la OMS y los muchos miserables que hay por el mundo, tenemos muy claro que lo que está vaticinando esta gentuza son las muertes que provocarán las vacunas, no el virus. Simplemente, nos están preparando para lo que muchos vemos venir, un otoño y un invierno trágico provocado por la vacunación.
Camuflarlo con muertes provocadas por lo que sería un virus natural no es más que una nueva muestra de hasta qué punto llega la criminalidad y la indecencia de estos miserables. Y es que hay que seguir usando la lógica. Si cada vez hay más vacunados en Europa, sobre todo en España. Si cada vez somos menos los no “inmunizados”, ¿cómo es posible que la incidencia del virus aumente si cada vez es menor el número de personas que, según el relato oficial, podría ser víctima de ese contagio?
El problema de todo esto es que seguimos siendo muy pocos los que analizamos todos y cada uno de los movimientos de esta gente. Hay que contrastar lo que nos decían y lo que nos dicen, hay que analizar cómo va evolucionando su discurso sin dejarse influenciar por lo que digan gobiernos, televisiones y médicos vendidos. Si mantuviéramos la mente “limpia” de manipulación y analizáramos lo que nos dicen en cada momento seríamos más los que dudáramos del relato oficial y este se iría diluyendo poco a poco.
Hay que ser consciente de que nos enfrentamos a unos psicópatas criminales a los que no les importa nada cuánta gente se lleven por delante para conseguir sus objetivos. Seguir pensando que los gobiernos o la OMS velan por nuestra salud y nuestro bienestar es, simplemente, ridículo a estas alturas de la película.
Fácil, es como el mago que sabe cual es la próxima carta en salir de una baraja trucada.
Muy fácil , ellos ya saben en cuanto tiempo van a hacer efecto las vacunas de la pócima ponzoñosa.
Las vacunas ,matan, fueron hechas para eso,hay que reducir la población mundial y para ello se han inventado una pandemia con la que al principio nos han engañado a todos, pero que luego varias personas nos hemos dado cuenta de que todo era una gran mentira propaga por os gobiernos y los medios de comunicación, la dictadura sanitaria vino por parte de la organización criminal OMS.
Quien va a juzgar a estos criminales, eso es lo que debería preocuparnos.
Son como el asesino del calendario que avisa que vamos a matar pero no hay policía que le detenga ni juez que les meta en la cárcel.
Conseguiremos llevarlos a los tribunales como en la segunda guerra mundial se hizo contra los nazis.
Tendremos un segundo Núremberg??
Eso se pretende. No será por falta de denuncias por Crímenes contra la Humanidad y Genocidio que les están poniendo en todas partes.
Estos criminales acogotaron a la ciudadania aborregada al principio de la plandemia con cifras astronomicas de muertos…..por suerte sus diabolicos pronosticos jamas se cumplieron, no tanto porque la gente fuera obligada a encerrarse en casa y a llevar mascarillas hasta para dormir, no no fue por eso sino porque simplemente no habia virus mortal en ningun sitio. Si no que expliquen las muchas contradicciones vividas y viviendose aun hoy. La lista de absurdos es tan grande que sorprende que los españoles en su mayoria todavia no se hayan dado cuenta, señal de que sobran muchos españoles. ¿Recuerdan aquella letra de aquella cancion que decia “que se mueran los feos, que no quede ninguno de ellos” de loquillo y los trogloditas? Parafraseando la letra podriamos decir “que se mueran los borregos, que no quede ninguno” Diria mas, y es que estoy seguro que la OMS cuando habla de miles de muertos se refiere a los borregos, a esos que se han dejado inocular el veneno experimental y a esos que ademas no se quitan la mascarilla ni debajo del agua, se bañan en gel hidroalcoholico, disfrutan y se aborregan aun mas respirando sus propias excreciones, y van por la calle embozados con tres o cuatro mascarillas inutiles, esos que cuando entras en una tienda no te dejan tocar los objetos para que no los contamines pero eso si A LA HORA DE PAGAR COGERAN TUS BILLETES Y TUS MONEDAS SIN NINGUNA PREOCUPACION!!! A toda esa borregada deciros que estais destinados a desaparecer, pero no por enfermos no, sino por gilipollas.
Así empezaron la plandemia, con las “estimaciones” del Imperial College de Londres. Las de Ferguson, que en los primeros días de confinamiento en RU fue pillado cruzándose furtivamente la ciudad para cubrir a su amante (sin el menor temor a “contagiarse” o “contagiarla”).
Luego en octubre la OMS reconoció que las cifras definitivas habían sido “significativamente inferiores a las estimaciones iniciales”. Pero no salió en la prensa oficialista y en cualquier caso el rebaño ya estaba irracionalizado mediante shock.
Los “expertos” tampoco encontraban explicación -vaya expertos de mis c..- a la bajísima incidencia en África.🤭
Pues eso. Que el virus es la tele, y la inmunodeficiencia la corrupción y la mediocridad intelectual de las instituciones y la población.
Pero el plan siniestro ya sabemos desde un principio en qué consiste:
Fase I – plandemia de terror, colapso, protocolos homicidas y “casos” fraudulentos obtenidos con tests fraudulentos y curvas dirigidas informáticamente, aprovechando la gripe dura cíclica y otras ayuditas tóxicas.
Fase II – “vacuna” masiva
Fase III – a cosechar lo “vacunado”, y hacerlo pasar por “virus”.
Fase IV- genocidio etnicida y NOM
Así que puede ser que esta vez los “expertos” estén “estimando” bien.
👏👏👏👏
236.000= 2+3+6= 11
11%
9-11
11=……
Que buenos todos los comentarios!,solo añadirle al porcentaje de vacunas experimentales,la radiación con 5G.
Merecen la pena de muerte estos malditos criminales
La Organización Criminal OMS, junto con la Organización Mafiosa de las Naciones Unidas y otras entidades superiores son las que han creado toda esta gran mentira, yo si inoculo veneno a la población mundial se más o menos cuando va a hacer efecto y cuanta gente va a morir por esta causa y lo que han inoculado a la gente no es veneno, es algo mucho peor, por eso yo prefiero la muerte antes que probar suerte con ese brebaje, si me quieren matar que lo hagan de frente y mirando mi cara y que no deleguen en un bata blanca para que me mate con una jeringuilla.
Es curioso que la gente se tragara lo de que el virus se destruyera por encima de los 26 grados y aún así siguiera temiendo que su cuerpo que está siempre a 36, pudiera sucumbir ante un contagio.