Parece que en Estados Unidos se están moviendo muchos sectores alarmados por los efectos secundarios provocados por las vacunas y ya se están pidiendo responsabilidades y el fin de la vacunación en los tribunales.

De esta forma, la asociación America´s Frontline Doctors presentaba el pasado 20 de mayo una demanda en la corte del estado de Alabama por la que se pedía una “orden temporal de restricción” a la vacunación contra el coronavirus. La demanda es la número 2:21-cv-00702-CLM.

DEMANDA PRESENTADA EL 20 DE MAYO

En las últimas fechas ha habido novedades en lo que respecta a esa demanda ya que el pasado 19 de julio ha sido ampliada para presentar más pruebas. Entre las pruebas aportadas se recoge el testimonio de una empleada de los CDC llamada Jane Doe. Doe es una programadora de ordenadores con experiencia en la materia en el campo de análisis de datos de atención médica y el acceso a los datos de Medicare y Medicaid mantenidos por el Centro de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS).

AMPLIACIÓN DE LA DEMANDA 19 DE JULIO

El testimonio de Jane Doe se recoge en la página número 41 de la misma y dice lo siguiente:

La experta de los demandantes, Jane Doe, es una programadora de ordenadores con experiencia en la materia en el campo de análisis de datos de atención médica y el acceso a los datos de Medicare y Medicaid mantenidos por el Centro de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS), (véase la Declaración de Jane Doe en el Anexo D).

En los últimos 20 años, ha desarrollado más de 100 algoritmos distintos de detección de fraude en el campo de la salud para su uso en los sectores público y privado. En su opinión experta, el VAERS [organismo sobre efectos adversos de las vacunas] reduce la estimación de muertes causadas por las vacunas en un factor conservador de, por lo menos, 5. A partir del 9 de julio de 2021, el VAERS reportó 9.048 muertes asociadas con las Vacunas.

Jane Doe consultó los datos del servicio de salud (CMS), según afirma, determinando que el número de muertes ocurridas en los 3 días siguientes a la inyección de las vacunas superan a las notificadas por el VAERS en un factor de al menos 5, lo que indica que el verdadero número de muertes causadas por las vacunas es de al menos 45.000.

Ella señala que en la campaña de vacunación contra la gripe porcina de 1976 (en la que el 25% de la población estadounidense de ese momento, 55 millones de estadounidenses, fueron vacunados), la vacuna contra la gripe porcina se consideró peligrosa e insegura, y se retiró del mercado, a pesar de que la vacuna mató a solo 53 personas“.

Ahora hay que esperar a que la justicia estadounidense se pronuncie sobre esta demanda pero se podría dar la circunstancia de que, hasta que esto suceda, decidieran suspender cautelarmente la vacunación e iniciara las pertinentes investigaciones.

Pero hasta que se vayan conociendo más noticias con respecto a este asunto debería imperar la prudencia de las personas para evitar la vacunación hasta que realmente se nos presente un medicamento seguro y no uno experimental. Dicen que los beneficios son mayores que los riesgos pero a viendo las pruebas que se están presentando, esa afirmación parece otra más de las muchas mentiras y falsedades que se nos están contando con respecto a las vacunas.

 

1 Comentario

  1. Los fabricantes de vacunas ahora han hecho posible que el genoma humano se altere permanentemente, y que la relación de la humanidad con la naturaleza cambie para siempre, mediante una inyección farmacéutica experimental a la que se hace referencia falsamente como una “vacuna”.La ciencia médica se ha quedado obsoleta,no reconoce sus errores ni sus fracasos.

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