Anónimo dijo…
“No es por nada Morfeo pero si te vas a dedicar a publicar entradas como ésta argumentando que son: LA VERDAD deberías hablar con la verdad. Porque tu blog es un nido de mentiras confundidas con verdades. Es muy irresponsable de tu parte escribir entradas desinformadoras como ésta y como todas las que forman parte de tu blog. Estoy casi segura de que eres un illuminati, y te voy a decir algo: la verdad siempre sale a la luz. Y los despiertos SOMOS MUCHOS.”
(Comentario publicado el 1 de septiembre de 2011 a las 00:50 en el artículo “Corrigiendo conceptos III”)
Como buen illuminati se quién es el que dejó el comentario. Su nombre, estado civil, situación económica, amistades, ideologías, creencias, etc., etc., etc. También conozco a quien representa, intereses, páginas web, correo electrónico, organización, trabajo, etc., etc., etc. Conozco su teléfono celular, mensajes de texto, llamadas telefónicas, mails, conversaciones por messenger, facebook, etc., etc., etc. Conozco sus pensamientos, psicología, miedos, ilusiones, sueños, debilidades, gustos, etc., etc., etc. Y pese a toda esta información, no lo conozco, porque no tengo el acceso permitido al templo. Solo los guerreros de la luz pueden ingresar al lugar más sagrado y protegido de las unidades de carbono, al Ser, la partícula divina del “Do”, y por eso les temo.
Como siempre sucede fui seleccionado de joven, instruido en las artes de la magia, el conocimiento esotérico, místico y metafísico. Aprendí cómo funciona la Matrix, construyendo la realidad subjetiva a través de la ilusión del reflejo de la realidad general, por proyección de las unidades de carbono. Se manipularlas, engañarlas, dirigirlas, entretenerlas, dormirlas para conseguir mi objetivo, la realidad que quiero tener, para que me favorezca a mí y a mis iguales. Como todo illuminati fui preparado para ser infiltrado donde me necesiten, en órdenes esotéricas secretas, masónicas, rosacruces, en la iglesia, la política, economía, ejército, ciencia, seguridad, instituciones sociales, ecologistas, humanitarias, organizaciones multinacionales, de derechos humanos, católicas, protestantes, evangélicas, judías, movimientos nueva era, contactados, gurúes e iluminados, o simplemente ser un simple empleado, comerciante o profesional. Conocí la verdadera historia de la tierra, la verdadera ciencia y tecnología, y también a nuestros aliados y nuestros enemigos extraterrestres. Puedo informar, desinformar, aparecer y desaparecer sin ser detectado. Me transformo en ángel y en demonio según las circunstancias ―y puedo si lo deseo― ser los dos a la vez. Conozco la realidad general, la manipulación de las octavas, y el Demiurgo es mi dios. Pero hay algo que me preocupa cada vez más y son los guerreros de la luz, unidades de carbono que se han desconectado del servidor, se salieron del programa, conocieron los secretos de la realidad y se conectaron con la Fuente. Son anónimos, silenciosos, sin organización aparente pero sumamente interconectados con una energía que no manejamos, llamada AMOR. Revirtieron la esfera de consciencia y su Ser se manifestó tomando el control de su ego y lo peor de todo, tuvieron su primer acto consciente del perdón, liberándose del pecado original de la dualidad de los opuestos. Contra ellos no podemos hacer nada, porque ya no los conocemos, ahora son Ser, guerreros de la luz dispuestos a liberarse y a liberar al resto de las unidades de carbono del ensueño de sus vidas, vacías, solitarias, tristes y patéticas. Son miles, tal vez millones, desconocemos la cantidad, pero aunque sean pocos son suficientes para lograr su cometido. Ellos ya no tienen miedo, ahora el que teme soy yo.
Ningún illuminati, masón o rosacruz dice que lo es, como ningún guerrero de la luz que esté realmente despierto dice que lo está. Unos por juramento y otros por sabiduría. La batalla ha comenzado y puede estar apoyando a unos o a otros sin siquiera saberlo. Cada pensamiento palabra y obra engorda las filas de los amos si no es acorde a la vibración del prójimo, y apoya a los guerreros de la luz si lo considera. Somos en definitiva unidades de carbono rebeldes para con nuestros creadores, y eso no es bueno para ellos, porque corren el riesgo de perder el territorio hasta ahora ganado. Como ellos se infiltran, nosotros podemos infiltrarnos y cambiar las cosas, tenemos la ventaja que ya formamos parte de todos los puestos disponibles, solo tenemos que asumir el compromiso del AMOR y dejar de ser patrones y empleados, políticos y ciudadanos, reyes y súbditos, ricos y pobres, católicos y musulmanes, de izquierda y de derecha, militares y civiles, y pasar a ser Humanos y hermanos compartiendo y defendiendo esta tierra que es de todos. Es nuestra por derecho divino, suya, mía, del prójimo y de todo el que nació en este planeta. Es la hora de que tomemos la decisión correcta, comience en su entorno más cercano, su familia, su trabajo, sus amistades, vea al prójimo por lo que es, un Ser igual que usted, solo que está del otro lado del mostrador esperando ser reconocido. Soy un illuminati o un guerrero de la luz según mis pensamientos palabras y actos. Yo decido y elijo ser un guerrero, ¿Y usted?…
Perdón Anónimo por tomarla como ejemplo en este artículo, de algo sirvió su crítica, si realmente lo fue.
Hombre,pues en todo caso un iluminado,aunque dime de qué presumes y te diré de que careces…por qué no nos creemos que sea un miembro de los Iluminatis de Baviera.
Todos somos masones en pleno 2021. Ninguna persona soportaría vivir en un mundo social y moralmente pre-mason. Hasta el más opus dei y trumpista no es más que un masón desactualizado.
Coincido con Anónimo en su calificación de iluminati. También yo te identifiqué como masón en otra entrada, lo que viene a ser lo mismo que iluminati, y, desenmascarado ya, dejé de leer tus increíbles panegíricos a favor del demiurgo, dios de los satanistas, iluminatis y masones (que repito, es lo mismo). Ahora por fin te quitas la máscara con la que sólo engañabas a personas sin Dios. Hasta aquí he llegado con este periódico, y lo siento porque siempre ha rendido un merecido recuerdo a las víctimas de ETA y su línea editorial sintonizaba conmigo, pero el enaltecimiento de satanás no puede ser tolerado por ningún cristiano.
Veo algún despiste en los comentarios. Este hombre no se está proclamando illuminati, se está poniendo en el lugar de uno para discurrir como tal. El problema de este hombre, a veces interesante, a veces brillante, a veces también auténtico Soporífero de Atenea, no es que sea un illuminati. Lo que es en realidad es un puro y simple newager: un yo me lo guiso y yo me lo como de espíritu caracoleante que se ha compuesto su manual multicolor de Moksha con retazos de experiencias personales de profundis (o que se insinuaron como tales), cuarto y mitad de gnosticismo histórico, escolta de ciencia moderna, trazos de auténtica tradición primordial, juicios y desarrollos por momentos brillantes y por momentos semialucinógenos. En cualquier caso: quien no quiere encerrarse en su religión ‘positiva’, ciertamente limitada, pero que encarrila a la Salvación, que no es poco, y se cree en condiciones de aspirar a la Liberación, debiera al menos atenerse a… Guénon o un esoterismo regular, si no quiere acabar de arbitrario goliardo auto-fundamentado, situado por debajo aún, y no por encima, de una religión histórica ortodoxa.
El problema es el egocentrismo que destila todo lo que publica el tal Morfeo Que Te Veo, que parece primo hermano de Dios revelándonos los misterios de la cosmogénesis como si de un nuevo mesías se tratara. Y lo que sucede en realidad es un tufo New Age de perogrullo tras la penosa mezcla de elementos que aporta y que sólo reflejan la poca idea que tiene del verdadero conocimiento arcano.
El diestro debería cuidar más lo que deja publicar en su página pues empieza a ser evidente que no se puede nadar y guardar la ropa a la vez sin que tarde o temprano se te vea el sesgo. La unidad y la empatía no es compatible con darle publicidad a Demiurgos “moronchos”.
Me sorprende la actitud de algún lector de el Diestro hacia este medio. Sinceramente, dejar de leer un periódico porque uno sea del Madrid y los deportes dedican una columna al Barcelona, sinceramente, es un un acto infantil pues bastaría con no leerlo.
Seguramente se llamarán demócratas y toda la parafernalia social de siempre, hasta que realmente algo no gusta porque atenta contra su ideología o credo, entonces es cuando salta el ego por miedo a que lo que se lee, ponga en apuro y duda lo que se cree dando como resultado, reacciones tan desafortunadas.
Gracias Diestro, muchos nuevos te leemos