Los alguaciles son la presencia de la autoridad en el ruedo, actuando como agentes ejecutivos de la autoridad que preside el festejo. A ellos se hace ya referencia en una Pragmática de la Reina Isabel la Católica del año 1503.
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En la actualidad los alguaciles protagonizan el despeje del ruedo, que ahora se hace de manera simbólica, pero que antiguamente era un verdadero despeje y los alguaciles se veían obligados a echar al público del ruedo para que pudiera dar inicio el festejo.
Una ver finalizado el despeje de la plaza los alguaciles se destocan y saludan al Presidente del festejo. En este momento el Presidente les entrega la llave de toriles y estos se la dan al torilero, en la actualidad esta entrega de la llave se realiza de manera simbólica.
Durante el desarrollo del festejo los alguaciles transmiten a los intervinientes en el mismo las órdenes del Presidente y además entregan los trofeos otorgados.
Antiguamente los alguaciles eran los verdaderos encargados de que se cumplieran las normas taurinas, lo que les causaba algunos problemas con el respetable. Hoy día son una figura que desarrolla una labor importante pero no están mal vistos. Es más, en la actualidad se han convertido en una figura vistosa y que recuerda a la tradición histórica del toreo, sobre todo por su vestimenta de la época de Felipe IV.
