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No, no son estos políticos carentes del más mínimo sentido de la justicia y de la honestidad, los mayores culpables, son los juristas que les han enseñado el camino, los más responsables y que lejos de buscar la justicia, solo buscan eludirla

Lo sucedido en la comunidad de Madrid nada más que Isabel Ayuso firmara la disolución de la Asamblea, solo se puede definir como esperpéntico. A continuación, juristas del máximo nivel dándole opciones de legalidad a la moción de censura presentada a raíz de la disolución y como consecuencia de esta, buscando retorcer la ley. Todavía, hay quien se extraña de que, en Europa, se tomen a pitorreo la justicia española.

El Lazarillo de Tormes, escrito por Guzmán de Alfarache a mediados del siglo XVI, nos avisaba de lo que se nos venía con el subgénero denominado “La Picaresca” que nace aquí en España y con plumas tan reconocidas como las de Góngora y Quevedo. Esta forma de entender y de actuar nos dejó bastante marcados, y ya, nunca desapareció de nuestra sociedad. El trilero, o el tahúr del Mississippi, es un personaje muy reconocido entre nosotros y que nunca nos falta, en mayor o en menos grado.

Desgraciadamente, en los últimos años, personajes de esta catadura moral, han ido sumando galones hasta el punto de participar al máximo nivel en la gobernanza de España. Es muy barato criticar hoy y a raíz de los recientemente acontecimientos, al político más multicolor de los conocidos, incluso a su jefa, o al que parece estar en la eterna pubertad por la moción de censura presentada ayer. Sin embargo, no han sido estos los primeros en buscar lagunas en las leyes buscándole un fin que la misma no contempla. No me voy a olvidar de como el más tibio entre los tibios, el tibio por excelencia, D. Mariano Rajoy, acudía una y otra vez al Tribunal Constitucional eludiendo responsabilidades sobre los delitos tan graves que se dieron en Cataluña en 2017.

No, no son estos políticos carentes del más mínimo sentido de la justicia y de la honestidad, los mayores culpables, son los juristas que les han enseñado el camino y que además intentan justificarlo, los más responsables y que lejos de buscar la justicia, solo buscan eludirla.  Nos hemos acostumbrado ya en España y cuando la situación, y en interés personal así lo demanda, a cuestionar lo más incuestionable, a ceñirse a la literalidad de la ley y no a su espíritu que por mucho que se pretenda en su desarrollo, nunca puede llegar a reflejarse en plenitud.

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Faustino
Terminadas mi obligaciones genéticas; lo de cultivar los árboles, garantizar la continuidad de la especie y escribir un libro, me dedico a darle voz a todo lo que me descuadra en mí de rededor, muy especialmente la falta de justicia en su más alto concepto. Cuando no lo hago, escucho la voz de mi padre que me recuerda que "nunca se ha escrito nada de ningún cobarde". como apenas puedo dar voz, escribo pequeños textos para intentar suplir "mi afonía" y además me esfuerzo intentando que lleguen a la gente. Tengo infinidad de escritos publicados en "círculos menores" He sido pregonero de la Semana Santa de mi ciudad, Tomares. He publicado la novela; Costalero de Sevilla, Mi blog personal es Incorrectamente Político, encabezado por una foto de George Orwell y su más célebre frase: Periodismo es publicar aquello que alguien no quiere que publiques, todo lo demás son relaciones públicas.

3 Comentarios

  1. Bueno, ya San Pablo nos enseñó en 1 Co 6, 1-8 lo que son los tribunales mundanos (de España o la UE o cualquier otro país y tiempo), así que nadie se extrañe. Además no es nada nuevo lo que ahora ocurre, lleva ocurriendo más de cuatro décadas en España.
    Espero que eldiestro sea fiel a Jesucristo, como ha mostrado en otras noticias, y no un diario digital liberal conservador, es decir , fariseo e hipócrita. La copa hay que limpiarla por dentro.

  2. A veces, en mi fuero interno, me revelo contra aquellos que me formaron en los principios y valores de honradez , honor, respeto, generosidad, etc. De estos principios no me puedo desprender y me siento en inferioridad manifiesta ante toda esta miseria moral que nos invade y nos oprime. Con tirachinas no puedes hacer frente a los misiles de toda esta podredumbre.

  3. Como profesional del Derecho que soy, TOTALMENTE DE ACUERDO CON SU BRILLANTE ARTÍCULO.
    ¡Debería ser usted abogado, o profesor de Derecho, PUES RAZONA MUY BIEN!
    Y, al tiempo, debo entonar el mea culpa, el nombr propio, pero sobre todo, de la profesión a la que tengo el dudoso honor de pertenecer…
    DESPUÉS DE LA MATANZA DE LOS ABOGADOS LABORALISTAS DE ATOCHA, EN 1977, LA ABOGACÍA NO HA VUELTO A QUEJARSE DE NADA.

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