Resulta que el Ministerio de Hacienda no va a tener piedad con aquellos que, por culpa del estado de alarma y de la crisis del coronavirus, se vean en la necesidad de aplazar el pago de impuestos -tampoco va a tener Hacienda piedad con los autónomos a los que sigue maltratando-, pues les va a cobrar un 3,75 % de interés.
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Así lo denuncia OK Diario en una noticia que puedes leer en este enlace y que deja a las claras lo que realmente le importa a este Gobierno, sacar tajada y machacar a la clase media española.
Como dice la noticia, «las pymes que quieran aprovecharse de esos aplazamientos fiscales deben saber que acabarán pagando intereses a Hacienda por osar hacer uso de la supuesta mejora anticoronavirus: el Estado les cobrará un 3,75% en intereses a partir del cuarto mes. Todo un negocio, pero para Hacienda».
Pero es más, aunque el Decreto Ley que contempla las medidas por el estado de alarma suspende los plazos administrativos, los que afectan a presentación de impuestos y demás plazos tributarios no han sido suspendidos.
Estas son las maneras de Pedro Sánchez, así trata a los ciudadanos, a los autónomos, a las pequeñas y medianas empresas. Y luego dice que no quedará nadie atrás… para alucinar.
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No pueden dejar de cobrar, pero al menos debían darse facilidades. Evidentemente siempre se puede solicitar el fraccionamiento, que puede ser hasta de cinco años, y sin garantías para menos de una cantidad bastante razonable. Pero eso si, se debe solicitar en plazo, y en la causa explicar que es por el cierre de la empresa o la reducción de su actividad. No creo que haya negativas a otorgar estos aplazamientos, pero en este caso excepcional no estaría mal exonerar del pago de intereses si se solicita por un año como máximo.
Y para la declaración de Renta hacer otro tanto. Que el interesado pueda valorar la solicitud del plazo que le interese, con el máximo del año, y lo pueda liquidar en cuotas de igual cuantía todas ellas.
En vez de poner a parir a los funcionarios de hacienda, por favor valoremos las circunstancias y hagamos propuestas realmente aplicables.