En España, tenemos dos partidos entre el comunismo y la social-democracia que no tienen pudor en expresarlo, mientras que los otros dos, se mueven en una social-democracia más… tenue, más disimulada. Actuado como tal pero intentando aparentar que son liberales, mas o menos. En general en España, todos los partidos, buscan aumentar en lo posible, el intervencionismo público o dicho de otra manera, aumentar el control sobre los ciudadanos.
He tenido una discursión, a través de las redes sociales, con un señor de reconocido prestigio liberal en España, acerca de la situación actual de los productos del campo. Se inició porque mi contertulio, culpaba a la legislación y a la fiscalidad, que según él, da lugar a que la administración pública se quede la gran tajada del precio final que el consumidor paga por esos productos. Yo le hice observar que aunque era importante ese intervencionismo público, aún mas importante es, la concentración que se produce en nuestro país de la oferta en la Distribución Comercial, en la que cuatro o cinco multinacionales se quedan con más del ochenta por ciento del total. Con ello, imponen el precio a los agricultores además de decidir a quién se les compra los productos y a quién no. Cuando usted llega a una de estas multinacionales a hacer la compra, se encuentra en muchos casos, con productos agrícolas de alto consumo, naranjas, patatas… que no son españoles. Es cierto que hay épocas del año en que no se producen aquí, pero en la mayoría de de las veces, es porque estas multinacionales y por intereses de oscura explicación, y créanme, no es siempre cuestión de precios, prefieren traer esos productos allende nuestras fronteras.
Me contestó mi interlocutor, que ya estaba bien de tanto lloriqueo, que los agricultores se unieran para hacer una propuesta conjunta de precios y así tener más fuerza. Fue cuando le dije que sabía mucho de teoría pero nada de cómo funciona la economía a pié de campo. Me sorprende como los muchos y magníficos economistas de corte “liberal” que tenemos en España, no admiten la existencia del neo-liberalismo que padecemos. Le hice referencia a la ley 15/2.007 para la Defensa de la Competencia y para el ejercicio del libre mercado, en la que se prohíbe explícitamente, la concentración referida y que no se daría si no fuera por la gestión de “ponerse de perfil” que ejerce la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia(C.N.M.C.) -Rajoy quitó a Arias Cañete de ministro de agricultura y lo mando al Parlamento Europeo por estos motivos- se imaginan lo que pasaría… ya pasa, si en España solo hubiera tres compañías de telecomunicaciones, tres bancos, tres petroleras, dos empresas de comunicación, tres compañías de energía eléctrica…pues sí, eso !!. Le envié a mi interlocutor, un pequeño texto en el que le explicaba como los pequeños y medianos agricultores, llevan sus productos al mercado central, en mi caso de Sevilla, donde venden sus productos en razón a la “ley de la oferta y la demanda”. Cuando hay mucha entrada de producto vale poco y mucho cuando la entrada es escasa, vendiéndolos sin imposición alguna de multinacional y consiguiendo “un precio justo”. Pueden hacerlo porque a este mercado acuden a comprar las fruterías y puestos de los mercados de abastos y hay cierto equilibrio, entre los que compran y los que venden. Evidentemente, en ese mercado, salvo raras excepciones, no compran las multinacionales que tienen intervenido casi en su totalidad, la oferta de productos agrícolas al último consumidor.
Fue cuando mi interlocutor, me dijo que el “precio justo” no existe; el valor de las cosas, no viene determinado por sus costes de producción- nuevamente definición de manual aunque arranca de una premisa cierta pero a la que hay que añadir otras variables, pensé yo, aunque esta vez no se lo dije- Pero si le conteste que en una economía de “libre mercado” se considera “precio justo” al valor del producto cuando “la ley de la oferta y la demanda “ no está adulterada, cuando no hay competencia desleal y por supuesto, una concentración desmedida e ilegal como la existente. Tras contestarle -sabiendo que está en un club de liberales al que yo también pertenezco, y que ese club tiene de liberal lo que yo de comunista- me contesto con unos signos que no se que quieren decir pero creo que nada bueno y con lo que dimos por terminado el debate.
En la España actual, la democracia esta adulterada, y lo está porque los contrapoderes no funcionan, consumado el hecho; fundamentalmente en la falta de independencia de los tres poderes perfectamente reconocidos. A partir de aquí, emana esta costumbre-norma a todos los estamentos públicos y ámbitos sociales. Hemos visto estos días como en el Congreso de los Diputados, se han conformado 33 comisiones y a un partido que por el voto de los ciudadanos ostenta una séptima parte de la representación total en el Congreso no preside ninguna, cuando debería presidir una de cada siete comisiones. En cambio un partido del todo minoritario como es el PNV, el caso más grafico, preside una de ellas. Cuando se hace trampa en el lugar que esta para evitar que se hagan, que podemos esperar sobre lo que pueda hacerse en la bolsa de la compra. La ley que he mencionado con anterioridad, existente en toda la Europa desarrollada y además se respeta. La intención de la misma, es evitar que un señor pueda quedarse con todo el mercado, monopolio. Aquí también existe la ley como he dicho antes, pero no se respeta porque los “contrapoderes” no funcionan. Estamos muy cerca del monopolio, de momento oligopolios de dos o tres, y para desgracia nuestra, no se da solo en este sector y el sistema por defecto, desactiva a cualquier “Arias Cañete” que pudiera surgir.
TODAS LAS REDES SOCIALES DONDE PUEDES ENCONTRANOS, HAY QUE ESQUIVAR LA CENSURA