¿Se acuerdan de cuando Pablo Iglesias hablaba de plasmas o de que los partidos políticos realizaran sus negociaciones con luz y taquígrafos y no en oscuros reservados? Pues bien, eso ha pasado a la historia desde el primer día porque, desde el primer día en el que dijo ese tipo de frases, Pablo Iglesias estaba mintiendo y ahora lo hemos podido volver a comprobar.
Se está practicando contra Vox otro de esos cordones sanitarios a los que tan acostumbrados nos tiene la izquierda española y que provocan que, día sí y día también, se cometan auténticas injusticias incluso en el Parlamento con quien ose disentir del gobierno o, simplemente preguntar.
Y una vez más los perjudicados por ese cordón sanitario son los parlamentarios de Vox que no pueden hacer preguntas en el Congreso que son totalmente lógicas y que vienen muy al caso de todo lo que está pasando en España y en parte de Sudamérica en estos momentos. Esas preguntas eran referentes a Podemos, a su financiación por parte de Venezuela, de Ecuador, de Bolivia y a la relación de todo esto con la reciente, ilegal y escandalosa visita de Delcy Rodríguez a Madrid.
¿Y que ha hecho la Mesa del Congreso que está absolutamente dominada por la extrema izquierda y el separatismo? Rechazar esas preguntas de una forma totalmente irregular puesto que son preguntas procedentes y mucho más con la que está cayendo en estos momentos.
Ya que en el Congreso se impide que se hagan estas preguntas vamos a ocuparnos todos de dar a esas preguntas toda la difusión que merecen para que socialistas, podemitas y separatistas queden en evidencia, que no en vergüenza porque no tienen.
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