“Es un sueño poder elegir aprender a montar en bici además de a bailar sevillanas” este es el titular de unas declaraciones sobre un proyecto que se hace realidad, y que va a financiar la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla con casi treinta mil euros. Tengo que reconocer que la idioticia, hoy -afortunadamente, no alcanza a los que se criaron y se educaron en la cultura del esfuerzo y que asistieron a clase- no deja de crecer.
Sabido es que toda organización que favorezca a la mujer y contra el hombre, tiene garantizada la correspondiente subvención y demás favores. Pero pienso que les están tomando el pelo de forma alarmante. Que una mujer, en este caso la fundadora de una asociación, al parecer la que ha promovido este proyecto, ofrezca este titular. No dice nada bueno de la ambición de las mujeres. El proyecto para que las mujeres lideren la sociedad, no va por buen camino. Si de verdad el feminismo quiere liderar esta sociedad, tendrá que cambiar los hábitos, los tópicos ya existentes e iniciar un proceso basado en algo nuevo, diferente y que de verdad atraiga. Tratar de imponerla, como hoy se hace, solo conduce al fracaso.
Es posible que haya hoy un colectivo abundante de mujeres, que no determinante, si no fueran por las subvenciones, que ya no quieran ser princesas, que hayan dejado de buscar a su príncipe o similares. Pero de ahí a decir que su sueño sea aprender a montar en bici, es irse al extremo contrario. Desde que tengo uso de razón, y hace ya mucho de eso, las mujeres siempre han montado en bici, muy especialmente en la China comunista de Mao, de hace ya casi un siglo. En España, que nunca ha sido comunista, casi siempre lo hacían más por recreo y diversión. Siempre se han vendido bicicletas específicas para mujeres -incluso cuando no se hacían cursillos al efecto- y que, naturalmente, hoy se siguen vendiendo.
Hoy, las más viejas estrategias comunistas y totalitarias, vuelven a la actualidad. Es cierto, que solo en los medios de comunicación subvencionados, que son casi todos -unas veces desde lo público y otras, desde intereses muy oscuros- son los que lo publicitan, más que informan, y los que tratan estos hechos, como si de una premisa del todo cierta y consolidada se tratara. Como decía antes y que ya dijo Einstein, la estupidez humana es infinita.
TODAS LAS REDES SOCIALES DONDE PUEDES ENCONTRANOS, HAY QUE ESQUIVAR LA CENSURA
* El 33% de las feministas son lesbianas, que quieren “a todas las mujeres” solo para ellas…
* Otro 33% son amargadas, de las que no encuentran a nadie que las aguante, o se quiera acostar con ellas.
* Y el otro 33% son tontas perdidas, que no saben ni lo que quieren, y se apuntan a la moda, como en tiempos de FRANCO se hubieran apuntado a la Sección Femenina.