Si España quiere contar con las mismas alianzas históricas que ha tenido hasta ahora, el gobierno de Pedro Sánchez las está poniendo en peligro. Son ya muchas las afrentas que está realizando este indigente presidente a nuestros aliados históricos, a EEUU. Cuba es tan solo una de ellas.
Y parece que en Estados Unidos están empezando a hartarse de los posicionamientos que está tomando España en el panorama internacional gracias al gobierno socialista. Uno de los últimos ha sido la no asistencia de Borrell a una reunión de la coalición contra el Daesh en Washington, pero el estaba acompañando a los Reyes en el vergonzoso viaje que el gobierno les había organizado a Cuba.
La situación por la que estamos atravesando a nivel nacional e internacional no está para juegos de este tipo y menos planteando provocaciones a unos aliados como EEUU. Las relaciones de Pedro Sánchez con el régimen venezolano ya nos han provocado un problema arancelario con el gobierno norteamericano y el gobierno español, en lugar de intentar ir solucionando esos problemas los va empeorando.


Y todo ello se nota en las contadas ocasiones en las que hemos podido ver juntos a Donald Trump y Pedro Sánchez. El presidente norteamericano no tiene ninguna simpatía por el presidente en funciones y, para comprobarlo, no hay más que ver el trato que le dispensa a Pedro Sánchez, como el día que le mandó sentarse cuando Sánchez quería hacerle un poco la pelota.
Por otro lado Sánchez tiene un historial. Y las barbaridades que ha dicho a través de su cuenta de Twitter contra el presidente Trump, es obvio que le pasarán factura en sus relaciones y sobre todo a nuestro país al completo. Es muy probable que haya mucho tarado encantado con que esas relaciones no vayan bien, para empezar el propio Pablo Iglesias, pero todo ello nos sitúa en una posición internacional muy débil.
Enlace directo a ABC: “Así ha hundido Sánchez las relaciones entre EE.UU. y España”.