Solo quedan ocho días,
para que las urnas hablen,
y vemos a Zapa-bis
mintiendo como un bergante.
Pues que no nos venga ahora,
explicándonos sus planes,
porque sabemos muy bien
que traerá miseria y hambre.
Él solo dice mentiras
e inventa datos triunfales,
pensando que somos lerdos
y tragamos sus chantajes.
Nos quiere vender su burra,
aunque su burra no ande,
empleando como siempre
un engañoso lenguaje.
No le incomodan las trampas,
ni le molestan los fraudes;
a él solo le interesa
tener repleto su zaque.
Pues conmigo que no cuente,
que busque en otro paraje,
porque soy un jubilado
que no quiere que le engañen.