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La defensa de ciertos valores fundamentales que deben informar cualquier sociedad que quiera garantizar, no ya su prosperidad, sino tan sólo su supervivencia es algo que muchos hoy parecen haber olvidado. Confiados en esa religión llamada progreso según la cual la historia camina indefectiblemente a una mejora continua, no ven que labran la propia destrucción de sus sociedades llamando al bien mal y al mal bien.
Sin embargo, principios como el de la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural, la familia como institución baluarte frente al estado o la libertad del individuo frente a colectivismos, son luces que aún brillan en ciertos políticos como reductos de lo que, parece ser, ya nadie defiende. Uno de esos reductos, es Rodrigo Mediavilla.
Rodrigo Mediavilla, (1991, Palencia) es un joven de 28 años, senador por el Partido Popular en las últimas elecciones generales y presidente provincial de Nuevas Generaciones del PP de Palencia. Por otra parte, es Licenciado en Periodismo y Graduado en Derecho por la Universidad de Valladolid; actualmente cursa el Máster de Acceso a la Abogacía por la Universidad de Deusto y el Ilustre Colegio de la Abogacía del Señorío de Vizcaya.
En primer lugar, muchas gracias por concedernos esta entrevista.
Gracias a usted y a sus lectores.
Para quien no le conozca, ¿qué le impulso a entrar en política y cuál es su visión de esta?
Me afilio al Partido Popular en el año 2011, impulsado por el hartazgo con las leyes de Zapatero, leyes marcadas por un fuerte componente ideológico que para nada representaban al conjunto de la sociedad española. Desde aquel momento sigo creyendo que el partido que mejor representa los intereses del común de los españoles y no únicamente de un sector, es el Partido Popular.
En cuanto a mi visión de la política, la concibo como un servicio público. Entiendo que la política es una vocación, no una profesión, siempre teniendo en cuenta ese servicio público, hacer la vida más sencilla a nuestros ciudadanos y dejar un mundo mejor a nuestros hijos del que a nosotros nos han dejado nuestros padres y abuelos.
Hace unos dos años, voz en pecho, se destacó por defender su ponencia sobre la vida durante un congreso del PP. ¿Cuál fue el objeto de esta? ¿En qué consistía? ¿Cómo fue acogida?
Se trataba de una enmienda que, junto con otros compañeros, presentamos a los estatutos que nos proponían los ponentes. Esa enmienda consistía básicamente en la defensa del derecho a la vida desde el momento de su concepción hasta su muerte natural. Esta fue acogida entre aplausos por los compromisarios que llenaban el plenario en el que se discutía, como se puede comprobar en la hemeroteca. Esa misma enmienda fue propuesta, pocos meses después, en el último congreso nacional de Nuevas Generaciones del PP, fue aprobada y actualmente se encuentra recogida en el artículo dos, letra j, de nuestros estatutos nacionales, dentro de los fines de la organización.
¿Cuáles son para usted los valores fundamentales que el Partido Popular debe defender sin ambages? ¿Considera, como dicen algunos, que éstos le harían perder votos?
Yo creo que lo que ha caracterizado precisamente al PP, desde su fundación con don Manuel Fraga ha sido la defensa de la libertad, la propiedad privada, la familia, la vida, la dignidad de toda persona humana, la defensa del principio de subsidiariedad (es decir que aquello que puede hacer la sociedad civil lo haga ésta y no el Estado), el apoyo a las víctimas del terrorismo y por supuesto la defensa de la unidad de España.
No creo para nada que la defensa de los anteriores principios perjudique al Partido Popular, más bien al contrario, esos valores son los que nos han dado grandes mayorías absolutas. A mi juicio, es complicado que alguien pueda mostrarse en contra de estos; es más, es algo que cualquier partido constitucionalista debería compartir, es en la concreción de estos principios, en el desarrollo legislativo de los mismos, donde pueden surgir divergencias.
A su juicio, ¿cómo podemos abordar la realidad del aborto y otras realidades que afectan directamente a los principios comentados?
Creo que la mejor forma de afrontar este tema es en clave positiva y propositiva. Es decir, apoyemos con todas nuestras fuerzas a la maternidad y a la natalidad. El aborto es un fracaso de la sociedad, muchas mujeres que recurren a él lo hacen abocadas por un contexto económico o social y un Estado que no la ofrece alternativa alguna a la decisión que ha tomado. En España se destina a la natalidad menos del 1,5% del PIB, mientras que otros países de nuestro entorno alcanzan el 3% como Francia o los Países Nórdicos, en cualquier caso, estamos aún muy lejos del 2,7% que invierten de media en esta materia los países de la Unión Europea. Un ejemplo claro es que según el INE cuando se pregunta a las mujeres en edad fértil por el número de hijos que desean tener la mayoría responden dos o más, sin embargo, la tasa de natalidad en nuestro país es del 1,3, muy lejos del 2,1 necesario para el reemplazo generacional. En conclusión, hay muchas mujeres en nuestro país que quieren ser madres, pero no pueden hacerlo, esforcémonos porque sí puedan serlo.
¿Qué destacaría de su actividad parlamentaria en el senado? ¿Qué medidas en defensa de esos valores fundamentales ha podido impulsar?
En el poquísimo tiempo que hemos tenido para ello, dada la brevedad de la legislatura, hemos hecho lo siguiente:
- En defensa de la unidad de España y de nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, hemos presentado un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley Vasca de Abusos Policiales, una ley que pretende hacer tabla rasa respecto a lo que ha sucedido en el País Vasco.
- En defensa de la vida, el senador Javier Puente, el senador Antonio Román y yo, en nombre de todo el Grupo Parlamentario Popular, hemos trabajado en una moción que afirma la necesidad de apoyar la natalidad y la maternidad, en esa clave positiva que comentábamos anteriormente.
- En defensa de la libertad, los senadores Javier Puente, Pablo Ruz y yo hemos realizado una moción en defensa de la libertad religiosa para que el Estado garantice esta de forma fehaciente, dado el incremento de ataques a este derecho en los últimos años.
- En materia de igualdad de los estudiantes de cualquier punto de España, he preguntado al señor Sánchez, mediante moción, qué decisión tomará respecto a la EBAU única, como paso previo para una futura moción en defensa de la selectividad única para toda España.
¿Qué riesgos observa a nivel social/moral para la próxima legislatura? ¿Se acerca una ley de eutanasia?
Ciertamente, como apuntas, hay una proposición de ley a favor de la eutanasia, ante la cual el Partido Popular votó en contra en el Congreso de los Diputados hace escasas semanas. Nosotros, frente a ella, proponemos una ley de cuidados paliativos pues entendemos que lo que se tiene que garantizar es una vida digna. Se trata de que una persona a lo largo de su vida, y sobre todo en su etapa final, viva en unas condiciones de dignidad. En esa materia de cuidados paliativos, queda muchísimo por hacer en nuestro país, por lo tanto, hasta que no invirtamos todos nuestros esfuerzos en desarrollar estos hasta sus máximos, no creo que sea oportuno entrar en el debate sobre la eutanasia. Un ejemplo en esta línea lo tenemos en Portugal, el año pasado, el Partido Socialista, proponía una ley de eutanasia a la cual el Partido Comunista votó en contra, argumentando que mientras no existiese una ley de cuidados paliativos no iba a votar una ley de eutanasia.
¿Cómo se puede ir articulando en España una corriente de pensamiento conservador que desplace en sitios como las universidades o los medios de comunicación el discurso izquierdista predominante?
Decía la Madre Teresa de Calcuta, que a veces lo que hacemos sentimos que es como una gota de agua en el océano, pero que el océano sería menos si le faltara esa gota. Por lo tanto, creo que es trabajo de todos. Ciertamente es trabajo de los políticos, pero también de la sociedad civil, es lo que Jaime Mayor Oreja denomina la pre-política, es decir, las fundaciones, las asociaciones, las familias (que juegan un papel muy importante en la educación de sus hijos). Se trata de crear una conciencia social, frente al relativismo dominante, para saber lo que está bien y lo que está mal.
La batalla cultural, es un camino que obligatoriamente se ha de recorrer si se quieren revertir ciertos males de nuestra sociedad. Según usted ¿dónde debe librarse principalmente esa contienda? Televisión, internet, asociaciones…
Yo creo que la batalla está en todos los frentes, no cabe duda del papel que hoy juega la televisión, pero también se libra en las redes sociales y en el debate diario. Cuando te tomas una caña con un amigo, tomas un café con tus compañeros de trabajo o hablas con tus amigos de la universidad, el saber qué contestar o saber qué proponer en ese debate es fundamental, porque si quienes defendemos un modelo de sociedad humanista nos quedamos callados, el relativismo seguirá calando cada día.
¿Qué personaje histórico encarna mejor los ideales que usted defiende?
A nivel político me identifico con Gregorio Ordoñez, por su defensa de la unidad de España y su coraje contra el terrorismo, su gallardía y su entereza porque las tierras vascas siguieran formando parte de España. Por hacerlo en un contexto en el que defender esos valores se pagaba con la extorsión, la exclusión social y en algunos casos como el suyo con la propia vida.
Por lo que respecta al ámbito filosófico me atrae el pensamiento de Chesterton, siempre tan políticamente incorrecto, pero certero a su vez.
Sin olvidarnos de Santo Tomás Moro, patrón de políticos y gobernantes, que llegó a pagar con su vida la defensa de sus convicciones, señalaba que “el hombre no puede ser separado de Dios ni la política de la moral”.
¿Qué papel tienen asociaciones como Familia y Dignidad Humana en esa lucha?
Todas esas asociaciones tienen un papel fundamental a la hora de crear una conciencia social, con la realización de seminarios, jornadas, conferencias, en definitiva, movilización de la sociedad civil, creo que es un papel muy importante que no podemos dejar que sea dominio únicamente de la izquierda. El pensamiento liberal-conservador y humanista cristiano tiene que estar también ahí. Si no se siembra luego no se puede recoger.
¿Qué les recomendaría a aquellos jóvenes con vocación política que quieren defender a su nación, la familia, la vida, la libertad…?
Les diría que se afiliaran a Nuevas Generaciones del Partido Popular, sin ningún tipo de duda. Nuevas generaciones, la organización juvenil del PP, está formada por un montón de personas, muy diversas, pero que en lo fundamental van a pensar de un modo similar a ellos. Es una organización en la que van a poder debatir sobre multitud de temas con otros compañeros, en la que no impera el pensamiento único, sino dentro de unos pilares fundamentalmente liberales, conservadores y humanistas cristianos, se generan debates enriquecedores que muchas veces se trasladan luego al Partido.
En el caso de que repita como senador en las próximas elecciones, ¿qué medidas le gustaría impulsar para la próxima legislatura?
El Senado te permite una doble vía de actuación, que a mi juicio es muy importante. Por un lado, puedes impulsar medidas de carácter liberal-conservador/humanista cristiano que afectan a todos los españoles; pero por otro, no podemos olvidar que se trata de la cámara de representación territorial, en la que los parlamentarios tenemos el deber inexcusable de defender con uñas y dientes a los territorios por los que hemos resultado electos, en mi caso Palencia, por la que si repito me dejaré la piel, como ya lo he hecho en este poco tiempo. Es fundamental que en Madrid se escuche la voz de la España interior y se afronte de una vez por todas con valentía el reto de la despoblación.
A modo de conclusión y para que los lectores de esta entrevista puedan tener un resumen de su visión de la España de hoy, ¿qué riesgos observa usted a nivel político, social/moral y económico?
A nivel económico, no cabe duda de que hay una crisis que está a la vuelta de la esquina, y que al igual que sucedió con la de 2008 con Zapatero, el gobierno la está negando. Cabe recordar ese famoso debate Pizarro-Solbes, donde todo el mundo decía que Solbes había ganado y la realidad demostró que el que tenía razón era Pizarro y que Solbes había engañado a toda la población siendo altavoz de aquel José Luis Rodríguez Zapatero que decía una y otra vez sin ruborizarse lo más mínimo que España estaba en la Champions League de la economía mundial. Ahora sucede algo parecido, desde el Partido Popular venimos denunciando que el gobierno no esta tomando ninguna medida para prevenir la crisis, más bien al contrario, lo mismo que hizo con el Plan E en 2008, lo ha hecho los meses previos a las elecciones de abril con los mal llamados “viernes sociales”. Diría que es una irresponsabilidad sin precedentes, pero mentiría, sí tiene un precedente y bien cercano, el de José Luis Rodríguez Zapatero.
Por otro lado, a nivel político, está el desafío catalán, en breve tendremos la sentencia del Tribunal Supremo y el Sr. Sánchez no ha manifestado aún si indultará a los presos separatistas si la sentencia resultara condenatoria.
Por último, a nivel social tenemos el continuo ataque por parte de la izquierda a la libertad del individuo y su afán por dividir y categorizarnos en colectivos, más fáciles de controlar desde el Estado.
¿Le gustaría añadir algo más?
Simplemente decirles a los españoles que la mejor alternativa para las próximas elecciones del 10 de noviembre, la alternativa más seria, responsable, la que mejor va a defender los intereses del común de los españoles la representan Pablo Casado y el Partido Popular.
Muchas gracias por su tiempo.
Gracias a usted, ha sido un placer.