Alberto Garzón Venezuela miserable
Alberto Garzón

Sorprendente

La verdad es que no deja de llamarnos la atención de qué forma se trata en España a un político o a otro en función a la ideología que tenga cada uno. Si el político en cuestión milita en la extrema izquierda, ya puede decir lo que quiera porque en este país, a la gente de esa ideología se le permite todo. Pero ojo, si el político es de derechas será aniquilado socialmente y condenado sin juicio previo.

Un botarate habitual de la extrema izquierda en las redes sociales es Alberto Garzón. Garzón, que iba para vedette, se ha convertido en un simple segundón del partido que dirige con mano de hierro la familia Iglesias-Montero, Podemos. Es solo el un actor secundario que, a pesar de tener una vida cómoda en su papel, busca convertirse en actor principal sin valer para ello.

Y si a esa ambición lógica le añadimos el no tener una sola neurona sana en su cerebro, nos encontramos con una mezcla explosiva en tonterías e irracionalidad, nos encontramos con personajes como Alberto Garzón. Hace tan solo unos días, y debido a la polémica de las exhumaciones del Valle de los Caídos, apareció el asunto de la exhumación de José Antonio Primo de Rivera a quien el gobierno calificó como “víctima”.

Pero esto a Garzón le pareció muy mal y haciendo una clara apología de la pena de muerte por motivos políticos, calificó a Primo de Rivera como un “fascista” y un “golpista”, justificó que fuera ejecutado el 20 de noviembre de 1936 cuando José Antonio tenía tan solo 33 años. 

Bien, pues a estas horas esa barbaridad ha pasado a la historia y no hay ninguna asociación, partido político o movimiento de la sociedad civil que haya denunciado a Garzón. Que sirva todo esto como recordatorio.