Pedro Sánchez tesis Senado noviembre 2018
El Gran Hermano Sánchez te vigila

España y la ingeniería social

Bajo nuestro punto de vista, en España se lleva practicando una ingeniería social desde hace décadas promovida por el PSOE. Debido a esa ingeniería social nadie critica la terrible historia del PSOE, cuando se habla de memoria histórica, ni se le ocurre criticar en público leyes injustas como la de la violencia de género o dictaduras como la LGTBI.

Esa ingeniería social ha funcionado tan bien que ha convencido a una inmensa mayoría de la gente de que lo injusto es justo o que lo más normal del mundo es trabajar más de seis meses al año para el estado. Hay mucha gente convencida de que el saqueo impositivo que sufre es bueno para ella llegando al punto de estar incluso convencidos de que su propio dinero lo gestiona mejor el estado que ellos mismos, aún teniendo claro que en pocos años será imposible pagar las pensiones.

Y esa ingeniería social, socialista, se practica en todos los ámbitos en los que el estado puede adoctrinar que, en un estado socialista como es España, es en casi todo. No es cuestión de ser conspiranoico, es cuestión de lógica. Hasta tal punto ha convencido el estado a una gran parte de la población, que llegan incluso al punto de convertirse en defensores de las injusticias y manipulaciones estatales.

Bajo mi punto de vista el reciente CIS publicado tiene dos intenciones claras. La primera inculcar en el cerebro de todo el mundo algo que realmente va a pasar en las elecciones para que nadie se sorprenda y dude de la limpieza de esas elecciones. Hace mucho tiempo que no creo que en España existan unas elecciones limpias y su más claro ejemplo se dio el pasado 28 de abril.

Pero hay otro punto más que, para mi, es incluso más importante que el primero: fomentar la desmovilización del voto de la derecha, es decir, convencer al votante de la derecha de que no hay nada que hacer y que no acuda a votar. Y eso es algo que juega directamente con la mentalidad que, en general, tenemos los españoles: bajamos los brazos en cuanto las cosas se ponen un poco complicadas al contrario de lo que hacen, por ejemplo, los norteamericanos.

Y eso es algo cultural que nos viene de nuestras raíces cristianas: el trabajo es un castigo y cuando vienen mal dadas no hay nada que hacer porque es voluntad divina, es decir, resignación. Y básicamente con eso es con lo que juega el PSOE, con eso juega el estado y las encuestas del CIS que ponen en circulación, además, a pocos días de las elecciones.

Y si realmente creen que esto es una teoría conspiranoica paren un segundo y simplemente piensen: Si son ustedes votantes de Vox, Ciudadanos o PP, ¿qué sensación interior han tenido después de la publicación de esa encuesta? Sean sinceros con ustedes mismos y díganse la verdad, ¿a que se han desilusionado y han pensado que no hay nada que hacer?

No es nada nuevo ni sorprendente, es un mal que padecemos casi todos los españoles y que algún día deberíamos corregir porque la resignación ante la injusticia provoca que los gobiernos nos tomen el pelo continuamente. Piensen en lo injusto que es que un político tenga una jubilación millonaria por trabajar unos pocos años. O piensen lo injustos y desorbitados que son muchos impuestos, o en alguna multa que hayan recibido…

¿Y qué han pensado cuando ha sucedido? Es injusto pero agacharé la cabeza porque esto es así y no hay nada que hacer. A eso me refiero…