Fernando Ónega antifranquista
Fernando Ónega
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No puede ser más rastrero, más chaquetero y más servil

Está claro que en España no llega más lejos el que más sabe, el que más trabaja o el más profesional. Aquí los que más lejos llegan son los serviles, los chaqueteros, los pelotas y los vendidos. Y no solo llegan ellos lejos, consiguen que llegue lejos su propia familia.

Un buen ejemplo de esta especie tan dañina y barriobajera es el periodista Fernando Ónega. Este servil, este pelota de tres al cuarto, ha sido toda la vida franquista y un pelota de los grandes puesto que cada vez que aparecía Francisco Franco delante de él se rompía las manos para aplaudir. Si no se hubiera descubierto el fuego lo habría descubierto él cada vez que veía a Franco y se ponía a aplaudir.

Ónega, quien fue Jefe de Prensa de la Guardia de Franco y subdirector del diario ‘Arriba’, ahora se nos ha vuelto un antifranquista de tomo y lomo. Debe ser que para colocarse él y sus hijas, había que cambiar de bando de una forma descarada y vergonzosa, pero Ónega no tiene problemas con eso puesto que la vergüenza no la ha conocido nunca ni de cerca.

¿Qué se puede decir de un personaje como Ónega que antes escribía cosas como estas de Franco y ahora se ha vuelto el más sectario antifranquista? “Rodeado por el Regimiento de la Guardia que tanto le había acompañado, la plaza de España, el Jardín de la Montaña, Ferraz, Rosales, Moncloa, la Ciudad Universitaria fueron los últimos lugares por los que pasó su cuerpo ya sin vida. Era, precisamente, el Madrid que había hecho Franco: el Madrid de las estampas modernas, del nivel de vida alto, de unos centros de formación superior que durante su mandato se habían terminado. En el Arco de Triunfo de la Moncloa, donde la ciencia le rinde homenaje a las Fuerzas allí vencedoras, Madrid despidió a Franco. Despidió su cuerpo, porque su sentido de la vida, de la política y, sobretodo, de la eficacia, que ahora pasaban al reino de la Historia, quedaría grabado para siempre en aquellas gentes que con tanta devoción, cariño y agradecimiento ahora le despedían“.

Pues bien, el mismo que hace años se refería de esa forma a Francisco Franco, ayer, en el programa de Julia Otero decía lo siguiente: “No hay la menos crítica que hacer a este procedimiento, lo que debemos preguntarnos es por qué no se hizo antes“. Y esa pregunta era contestada por el diputado de Ciudadanos, Juan Carlos Girauta, con una respuesta demoledora.

Pues eso, pelota de tomo y lomo, contestate tú mismo a esa pregunta. Chaquetero.

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