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“Máxima discreción”
Al parecer, y según revela ‘El Confidencial’, Pedro Sánchez no está dispuesto a dar por finalizadas sus vacaciones de una forma inmediata. Y no solo eso, pretende ampliarlas pero pretende, tal y como desvela ‘El Confidencial’, que esa ampliación de vacaciones sean un asunto prácticamente de secreto de estado.
Es decir, Sánchez no piensa renunciar a sus vacaciones y a seguir vagueando pase lo que pase en España y caiga quien caiga. La absoluta falta de responsabilidad de esta hombre es solo un defecto más de los muchos que tiene. Parece que su desmedida ambición por ser Presidente del Gobierno solo se ciñe a las ventajas y no a las responsabilidades. Quiere ser Presidente a toda costa, pero solo para lo bueno. De lo malo directamente pasa.
No tiene gobierno. Canarias arde y él sin inmutarse y sin mover ni un solo músculo, aunque solo sea para disimular. Es un caradura sin disimulo al que le importa bastante poco lo que los españoles podamos pensar o lo que nos pueda parecer. Su vergonzoso afán por vivir bien lo ha dejado bien claro desde el primer día en el que asumió la presidencia del gobierno.
Se ha dedicado a usar el Falcon sin miramientos. Ha dado la vuelta al mundo sin ninguna necesidad y con el único fin de tener una vida de ensueño, de vacaciones continuas a costa de los impuestos de todos los españoles. Y todo eso con la que ha caído y con la que está cayendo, como si no hubiera un mañana y como si su único objetivo vital fuera este y no el hecho de asumir las grandes responsabilidades que tiene un puesto como el de Presidente del Gobierno.
Un auténtico desastre. Un caradura y un vividor, eso es lo que está demostrando Sánchez desde que se instaló por primera vez en el Palacio de la Moncloa. Y siempre acompañado por su otra mitad, por la incluso más ambiciosa que él, Begoña Gómez.
Enlace directo al artículo de ‘El Confidencial’.