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Marta Flich, la ex novia del nieto de Franco
No, no voy a entrar en la misma polémica que entró el diario de Eduardo Inda, Ok Diario, con Marta Flich y con el programa de Risto Mejide. Y no es porque me importe en lo más mínimo que me llamen machista por ello (por cierto Marta, vergonzosa esa forma tuya de defenderte propagando lo del machismo a diestro y siniestro para lanzar a toda la jauría a que te apoyara).
Pero es que lo de esta chica, antes de esa polémica completamente desconocida para mi, roza lo esperpéntico y lo ridículo. Sus charlas sobre economía o sobre feminismo son las charlas de una persona bastante ambiciosa que se agarra como un clavo ardiendo a lo que haga falta con tal que se hable de ella, que se lo digan al nieto de Franco.
Pero lo que me resulta raro que no vea nadie, o que por lo menos no lo diga en alto, es lo ridícula que es la muchacha en sus exposiciones y lo fácil que es ver de qué pie cojea. De hecho no creo que ni ella misma se crea lo que ahora cuenta o lo que contaba cuando estaba ennoviada con quien se “ennovió”. De hecho, en las dos ocasiones lo hace con un fin tan honorable como ganarse la vida.
Lo que me sorprende es que haya quien la crea de verdad. Me sorprende tanto que casi no me lo creo porque esta chica no es una de esas personas convincentes que parecen creerse a sí mismas, parece más bien una teatrera que interpreta un papel hoy y, si se tercia, otro mañana. No hay más que verlo en los “autozascas” que se pega. Más claro, el agua.
