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Estamos en lo que los snobs llamarían “la semana decisiva” utilizando un bonito término en inglés, para determinar cómo van a quedar los ayuntamientos y comunidades autónomas, en nuestro país, una vez finalizada la fiebre de “órdagos, envidos” y estridencias de reafirmación partidista, llena de testosterona y cargada de poca inteligencia.
Lo último en este sentido, ha sido unas declaraciones de una señora jubilada de la política, que queriendo ser la novia en la boda y el niño en el bautizo, nos ha lanzado la terrible idea de que para evitar que Sánchez pacte con los nacionalistas, a lo mejor el PP debería abstenerse en la investidura a la presidencia del gobierno, Esta señora de apellido vasco, así como la candidata a la comunidad de Madrid,¿ no se dan cuenta que hacen la puñeta a la estrategia de su partido y que dejan el campo abierto con sus declaraciones a que el partido de Rivera, pueda abrirse a romper su promesa con los electores y pactar con Sánchez?
Todo comienza hoy martes en la Asamblea de Madrid, en donde veremos por la composición de la mesa de la asamblea, si los tres partidos han llegado a un acuerdo definitivo y si ocurre lo mismo en el ayuntamiento de la capital, después de ese café a escondidas que tomaron Ignacio Aguado y Rocío Monasterio en un hotel de la ciudad, mientras que España estaba pendiente del “Rey Nadal”. Parece ser que no habrá sorpresas y que Madrid en sus dos instituciones, será de centro derecha, a pesar de medios, opiniones y demás gente, que parece que no han hecho lo suficiente para estropearlo.
Siguiendo por Castilla y León, si Cs sigue la disciplina de partido y atiende a lo prometido, pactará con el PP un gobierno autonómico, aunque está claro que su candidato, Igea, tiene ganas de pasar factura a la dirección nacional por ese fichaje estridente realizado por Rivera y los suyos, que les obligó a aceptar unas primarias al parecer irregulares y cuya candidata favorita, pasó al ostracismo por equivocada.
En el caso de Murcia, tierra del cuestionado Teo García Egea, porque según algunos no es un buen “general” y según otros, fundamentalmente de la Andalucía Oriental, es demasiado duro en la imposición de su gente en las listas, existe una propuesta del PSOE para dar a los naranjitos el ayuntamiento y así quedarse con la comunidad, pero la sociedad murciana, pienso que no lo entendería y tampoco el actual secretario general del PP, a quien le habrían metido un gol en casa y eso no se lo puede permitir, así que yo apuesto por López Miras en la presidencia y la región pimentonera, manteniendo su pujanza en el computo español.
Andalucía por su parte, no debería tener protagonismo, porque los tres partidos del centro derecha, no han obtenido malos resultados, pero aquí, se ha inmiscuido otro factor calculado como es la factura que Vox ha amenazado con pasar a los socios del gobierno del cambio, con la presentación de una enmienda a la totalidad de los presupuestos generales de la comunidad autónoma. En este caso, la argumentación de Vox era ya sabida, porque al poco de haberse conformado el gobierno, determinadas llamadas desde Madrid y ciertas declaraciones, hacían prever esta situación, pero ellos sabrán si su actitud poco positiva en lo político y nefasta en lo estratégico, es entendida por los ciudadanos o van a ser cómplices de las dificultades de un gobierno que genera esperanza e ilusión a los andaluces. Lo cierto es que esta formación debería estudiar más sus consecuencias y sus portavoces, poner mejores excusas para afirmar posibles incumplimientos del gobierno.
Navarra es un caso aparte, en donde todo parece vislumbrar que el PSOE juega a dos bandas, teniendo en cuenta que Ferraz se ha desentendido del tema, pero que la señora Chivite, su secretaria general, por cierto, con apellido de Fitero o Cintruenigo, puede llegar a un acuerdo con Geroa Bai y una pactada abstención con Bildu para
acceder a la presidencia del gobierno, posibilitando políticas que favorezca el nacionalismo pro vasco y abandonando todo lo que supone el imposibilitar la reafirmación de este Reino como comunidad foral, sin impedir una futura anexión al P. Vasco.
Este es el panorama de los lugares más importantes de esta España nuestra respecto a esta “semana decisiva” para la política municipal y de comunidades autónomas, pero lo cierto es que con toda la resaca que llevamos de elecciones, ya cansa hasta el resultado de los pactos, quienes pueden ser nuestros alcaldes y sobre todo, espanta la posibilidad apuntada por algunos tertulianos, respecto a que las negociaciones para la formación del gobierno de la nación, pueden ser largas, con un Podemos mendicante de un ministerio para no desaparecer, un Pedro Sánchez que podría seguir pidiendo que la oposición se vaya de vacaciones el día de la investidura para salir presidente del gobierno, o un gabinete de estrategia de Moncloa, que podría estar pensando en que si las cosas no salen como el inquilino de la Moncloa quiere, convocar unas nuevas elecciones generales, con el objetivo de obtener 140 diputados.
Aunque esta estrategia monclovita me parece demasiado parecida a lo sucedido a Rajoy en tiempos anteriores, ¡por favor!, déjennos descansar este verano y olvidarnos de la política, de los políticos y de la posibilidad de unas elecciones, porque los españoles, también tenemos derecho a ser felices sin que los políticos nos amarguen un tiempo de ocio, la tranquilidad familiar y por supuesto, nos vacíen la cartera, más de lo debido, que por si es demasiado.