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Asesino de Marta Obregón en Burgos y de Leticia Lebrato en Valladolid
Habrá que dar las gracias al Tribunal de Estrasburgo, tendremos que estarles muy agradecidos de que tumbaran la doctrina Parot en 2013 y devolvieran a la calle a sujetos indecentes como Pedro Luis Gallego, el violador de el ascensor.
Gallego estaba encarcelado por haber cometido 18 violaciones desde los años 70 y por haber asesinado a las jóvenes Marta Obregón en Burgos y Leticia Lebrato en Valladolid. A Marta de 22 años le asestó 14 cuchilladas en 1992 y a Leticia once en ese mismo año. Por todos esos delitos había sido condenado a 273 años de cárcel de los que solo cumplió 21.
Salió libre en noviembre de 2013 cuando lo tenía que haber en 2022. Desde su salida de prisión se había instalado en Segovia. Desde esa puesta en libertad ha cometido varias violaciones en Madrid. Secuestraba a sus víctimas en los alrededores del Hospital de la Paz, se las llevaba a su piso de Segovia donde las violaba y las volvía a llevar de vuelta a Madrid al sitio donde las había secuestrado anteriormente.
En esta ocasión va a ser juzgado por dos hechos probados. El 19 de febrero de 2017 violó a una joven en cinco ocasiones. El 14 de abril de ese mismo año violó a otra durante seis horas seguidas, el 2 y el 16 de diciembre otras dos jóvenes consiguieron zafarse de él y huir.
Ahora todos deberíamos pedir responsabilidades a los culpables de que esta rata volviera a las calles a hacer algo que todos sabíamos que iba a volver a hacer. Las violaciones cometidas a lo largo de todos estos años se podrían haber evitado si este sujeto hubiera seguido en el lugar del que nunca debería salir, de la cárcel.
Totalmente vergonzoso que a día de hoy haya un debate abierto sobre la prisión permanente revisable y que sean precisamente los partidos que tanto presumen de feministas los que quieran suprimirla. Una vergüenza y un asco.
