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Es Gabriel Rufián, uno de los políticos más bocazas y provocadores que hay en el panorama político español. Y ser tan bocazas conlleva el riesgo de que el tiempo, ese juez, lo ponga en su sitio. Como ha ocurrido con un trino que Gabriel Rufián publicó el 12 de julio del pasado año, en el que decía:
«Cada nueva decisión de un juez de allá acerca un poco más al banquilllo de un TEDH a un juez de aquí».
Hoy es un buen dia para recordar este tuit de @gabrielrufian.#SoyUnTroll https://t.co/iZH94ZsKs1
— Nikator (@_Nikator_) 28 de mayo de 2019
Y claro, cuando llega el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo y avala la actuación de la democracia española y rechaza por unanimidad las demandas de los separatistas, pues uno se acuerda de ese tweet de Rufián y sonríe. Sonríe recordando lo bocazas que es el diputado de ERC.
Según informa el diario El Mundo, “el Tribunal de Estrasburgo ha rechazado la demanda interpuesta contra España por 76 diputados independentistas del Parlamentpor la suspensión del Pleno en el que estaba previsto estudiar los efectos del referéndum del 1 de octubre. La demanda, encabezada por la ex presidenta de la Cámara Carme Forcadell incluía entre otras las firmas del ex president Carles Puigdemont. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos, en el que los acusados en el juicio del 1-O tienen puestas sus esperanzas, afirma que la demanda es “manifiestamente infundada” y considera que no debe admitirse a trámite”.
¿Y ahora?, ¿qué opinará Gabriel Rufián?, ¿también hay que sentar a los jueces del TEDH en el banquillo?, ¿también son unos fachas esos jueces? Está claro que no. Lo único que está claro es que Rufián es un bocazas…