voto del miedo

Siendo el voto del miedo el menos maduro sigue siendo el más eficaz. Poca gente vota en contra de sus miedos, de la misma manera que poca gente actúa buscando lo que le da pánico, nuestra biología aún manda. Manipular al personal así, es de lo más fácil y siempre tiene sus frutos porque va directo al instinto y los humanos tenemos tendencias innatas que solo es posible embridar con un gran esfuerzo de la voluntad muy bien iluminada por la inteligencia. Si, además el instinto de defendernos se potencia con la inteligencia que nos advierte del peligro que para nosotros supone determinada opción que hemos podido comprobar con la experiencia propia o ajena, ya ni te cuento.

Desgraciadamente, o no, estás elecciones además de ir por bloques, derecha e izquierda, van de miedos. La izquierda, liderada por el PSOE por la pérdida de credibilidad del terrateniente Iglesias, azuza el miedo a las tres derechas aplicándoles el estigma que ellos han asignado a VOX, ultra, extrema o lo que sea derecha concretándolo en fobia a todo lo que puedan más el miedo a la bajada de pensiones que achacan al gurú de Casado. El bloque de la derecha, liderado ideológicamente ahora mismo por VOX, el más claro y directo, el miedo del que alerta es a la destrucción de España y su unidad, la llamada crisis catalana, la poca fiabilidad de Sánchez como dique contra el secesionismo, y alguna que otra cuestión del desastre económico que siempre supone cuando el PSOE gobierna. Ambos bloques intentan visualizar que es falso el sambenito que les colocan, pero el daño ya está hecho. El bloque que consiga que más votantes teman a la victoria del contrario, ganará el gobierno.

No entiendo nada. ¿Tan políticamente inmaduros somos que aún dependemos tanto del miedo? ¿Alguien me lo explica?