El drama que vivieron policías y guardias civiles el 1-O

El juicio que se está celebrando en el Tribunal Supremo a los golpistas catalanes está sirviendo para conocer el drama que vivieron policías y guardias civiles el 1-O. Miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que recibieron auténitcas palizas a manos de los “pacifistas” separatistas que se manifestabana  las puertas de los colegios electorales que había dispuesto la Generalidad de Cataluña incumpliendo las resoluciones y órdenes judiciales.

El drama que vivieron policías y guardias civiles el 1-O lo están contando ellos mismos en el juicio y se hace eco Libertad Digital en una noticia que publica hoy mismo. En las testificales explican lo que ocurrió, “Nosotros llegamos sobre las 10.10 sin equipar porque en principio iba a ser todo pacífico. Fui de los primero que llegaron a la barrera, lo primero que hicieron fue darme un puñetazo en la boca y me quitaron la prenda de cabeza y se la empezaron a lanzar unos a otros. Me empezaron a dar patadas, empujones y pisotones”.

Pero como contaba el agente, lo peor estaba por llegar, “La doctora no nos quiso atender en primera instancia. Tras hablar con el director del centro, la doctora finalmente accedió a atendernos”.

Otro agente ha contado como “Yo vi que a otro compañero recibió un puñetazo en la cara. íbamos pidiéndoles por favor que se fueran apartando e intentando apartarles. Íbamos abriendo un pasillo como podíamos para que entrase la comitiva.Tuvimos que empujarles, proporcionalmente, para que se apartaran. Tuvimos que salir corriendo”.

Una actitud pacífica que queda totalmente desacreditada con estas declaraciones. Una actitud pacífica que siempre fue un cuento chino, porque los separatistas se han hecho los dueños de las calles en Cataluña y ejercen de lo que son, auténticos matones.

Pero lo peor de todo fue la actitud de la doctora, una radical separatista que, en principio, se negaba a atenderlo por la única razón de que era policía. De vergüenza. Y luego se llaman gente de paz…