Los imbéciles y su minuto de gloria
La gentuza que nos rodea y a la que tanto le gusta llamar la atención a costa de lo que sea fue especialmente insensible, descerebrada y miserable con el caso del pobre Julen, el niño que falleció en el pozo de Totalán.
Esas sabandijas que siempre quieren destacar y tener su minuto de gloria, esos miserables que pretenden hacerse famosos incluso a costa de una desgracia tan terrible como la sufrida por Julen, van a tener su merecido castigo. Los padres de Julen han decidido emprender medidas legales contra ellos y su abogado ha presentado una denuncia en el juzgado con la transcripción literal de esos comentarios tan repulsivos y repugnantes.
Hay muchos a los que estamos deseando ver desfilar por el juzgado, pero principalmente a ese tal Camilo de Ory (@Camilo_de_Ory)que va de poeta y de escritor gracioso por la vida y que se pasó burlándose de la desgracia del pequeño Julen todos los días en los que se estivo tratando de rescatar con vida al pequeño.
Esperemos que el castigo para todas estas ratas miserables sea ejemplar porque, como bien dice el abogado de la familia de Julen y se ha quedado corto, esas palabras “no son de recibo”. La Justicia tiene que ser especialmente dura con esta escoria y ejemplarizante para que este sinsentido desaparezca de las redes sociales, ese espacio de libertad que podría ser un fantástico espacio en el que expresarse libremente si no fuera por sabandijas como estas.
