Borrell

No sé si tenemos una nación de las mil y una noche, pero por lo que he visto y observado creo que las acumulaciones de las ridiculeces que hemos visto estos últimos días, me parece que no, aunque aquellos tiempos de las pelis de la Alfombra Mágica y Alibabá y los cuarenta ladrones de los cuentos de Sherezade, eran eso, cuantos fantasiosos del nunca acabar.  José Borrell, el Ministro de Asuntos Exteriores Español, no dejó clara su postura con la negación de entrada a Venezuela del Eurodiputado González del Partido Popular. La dictadura venezolana expulsó hace dos días al Eurodiputado y las personas que le acompañaban. Por lo visto el Ministro del ramo de Asuntos Exteriores se hiso el olvidadizo diciendo en petít comité que ese viaje del E urodiputado y las personas que le seguían, se “representaban a sí mismos” aunque así fuese, la dejadez, la falta de tacto y el tono de sus palabras dejaría a González Pons y a sus amigos, también Eurodiputados a los pies de los caballos. ¿Hubiese tenido la misma ligereza fría el señor Borrell la desarrollada ante otros, pongamos eurodiputados de otro signo político en otra nación y que fuesen expulsados del país?  Sencillamente, creo que no.

En este asunto creo que hubo algo más de lo que supuestamente se dice. La dictadura venezolana la conocemos todos los españoles exhaustivamente para dejar de soslayo que no habrá otros intereses y de más enredos que se ocultan a toda luz. Por contrario si fuese otros eurodiputados y amigas de otras siglas, y a tenor de las conversaciones facilitadas a periodistas el Ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación Borrell dijo: rechazó que haya “incoherencia” por mantener al embajador del Gobierno de Maduro, señalando que “nosotros tenemos todo el interés del mundo en mantener una presencia activa diplomática en Venezuela, porque tenemos allí muchas personas por las que preocuparnos”. ¿Es que el señor González Pons no hay que preocuparse por él y a las personas que le acompañaban?

Poco a poco vemos las tontadas del Ministro español que dice: “González Pons y compañía se representaban «a sí mismos. “Si quieren ir a título personal, es otra cosa”.

No encuentro diferencia alguna en estas dos preguntas, pero lo que me inquieta es que siguió con esta frase: Y si quieren volver, pues volverán. Faltaría más, aunqué sabiendo y conociendo a los Maduros, apaga y vámonos que mañana será otro día. Seguimos con el miedo metido en el cuerpo. Los silencios de los servicios de exteriores cierran bocas, los eurodiputados estarán de vuelta y nosotros, los de a pie, nos tenemos que tragar las tontadas, en este caso, del Ministro Borrell.