La libertad de expresión solo para algunos
Parece que en la España actual, la libertad de expresión solo existe para algunos. En los últimos días hemos conocido que Federico Jiménez Losantos ha sido multado con 17.000 euros por un motivo surrealista: incitación al odio.
En un país en el que hay políticos, periodistas y usuarios de redes sociales insultando gravemente a los españoles o a quien no piense como ellos, un periodista es multado por incitación al odio tras criticar a los alemanes por la no extradición de Puigdemont a España.
Pero siendo esto grave, lo más grave es que es multado sin juicio alguno y por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. ¿Qué tiene que ver esa comisión en un asunto como este? Pues absolutamente nada, pero parece ser que contra ciertos sectores ideológicos vale cualquier cosa y contra otros, los más “progres”, no.
César Vidal sale en su defensa
Tras esta absurda e injusta multa, Cesar Vidal ha salido en defensa de Federico a través de un editorial de su programa La Voz. Vidal, como no podría ser de otra forma, se echa las manos a la cabeza ante esta persecución a la libertad de expresión de su antiguo compañero y jefe.
Recuerda, Vidal, todos los hechos no multados y cómo algunos en España tienen derecho a decir lo que quieran, aunque sean auténticas salvajadas, y otros no, como en este caso Jiménez Losantos. Advierte, además, del peligro que está corriendo la libertad de expresión y de prensa en un país en el que solo se puede decir lo que los defensores del pensamiento único digan.
Además advierte de las circunstancias y las formas en las que ha sido multado Federico, recordando que en la Alemania nazi o en la Italia fascista había más garantías judiciales de las existentes hoy día en España. Corren malos tiempos para los no fieles al pensamiento único, habrá que poner las barbas a remojar.