Todos conocemos las actitudes de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, hacia su mujer, Melania Trump. Hasta los telediarios han abierto con imágenes sobre las relaciones de la pareja o como él Presidente no le cedía el paso o la dejaba atrás. Y parece que Pedro Sánchez ha copiado sus formas.
Y tras esas imágenes muchos han hablado de la mala educación del estadounidense y de la mala relación con su mujer, entre otras muchas cosas. Y me llama mucho la atención que esas imágenes lejanas ocupen espacios de televisión, páginas de diarios y minutos de radio y otras imágenes mucho más cercanas pasen desapercibidas. Claro, se trata de Pedro Sánchez y su mujer y a muchos medios de comunicación eso no les interesa que se sepa.
Las imágenes a las que me refiero han sucedido estos días, con la visita de la canciller alemana, Angela Merkel, a Doñana. A la entrada a las dependencias Pedro Sánchez cede el paso a sus invitados y se planta ante su mujer dándole la espalda y entrando él primero. Unas formas dignas de Donald Trump y que habrían sido noticia si ocurre en Camp David…
Pero esa actitud de Pedro Sánchez no se hace pública, al igual que los pitos e insultos que recibió en Sanlúcar de Barrameda el Presidente del Gobierno.