La vicepresidenta del gobierno Carmen Calvo no es precisamente luz que alumbre el entendimiento. Si acaso, sirve de entretenimiento, y, desde luego, de regocijo para los medios de comunicación que encuentran en ella una fuente inagotable de bobadas, tonterías, despropósitos, absurdos e imprudencias, cuando no inepcias. En fin, suficientes requisitos para formar parte del primer gobierno presidido por Pedro Sánchez Castejón.
Sin embargo, en estos momentos, la boquita de la señora vicepresidenta deja en evidencia al presidente Sánchez lo que, sin duda, resulta un filón que no desaprovechará la oposición parlamentaria. Veamos.
El viernes 17 de agosto —el mismo día que se celebró el acto oficial en memoria de las víctimas del atentado terrorista sufrido el pasado año en Barcelona y Cambrils—, cuando participaba en un acto promovido por Òmnium y ANC ante la prisión de Lledoners, el presidente Quim Torra dijo “vamos a atacar a este Estado español injusto”, una amenaza que para el gobierno de España carece de importancia. Para la vicepresidenta Calvo, “siendo una frase absolutamente inaceptable, con frases no se ataca al Estado”. Curioso resulta que para el mismo personaje, las palabras de Pablo Casado y Albert Rivera recriminando la dejadez del gobierno sí supongan un ataque al Estado.
Tres días después, en Ceuta, un nuevo asalto a la valla deja siete guardias civiles heridos de diversa consideración por el ataque de un centenar de inmigrantes con ácidos y cal viva. El presidente Sánchez ha sido rápido —ahora sí— y ha lanzado este tuit: “Todo mi apoyo a las #FCSE que están afrontando de forma ejemplar el desafío migratorio, especialmente a los agentes heridos hoy. El #Gobierno trabaja por el diálogo y la cooperación con países de origen y tránsito y por una gestión común, eficiente y humanitaria de la migración”.
Si atendemos a la vicepresidenta Calvo, ¿qué significan las palabras de Sánchez? ¿Una mofa? ¿Una tomadura de pelo? ¿Una burla a los agentes atacados? Respondan. ¿O fue la impresentable vicepresidenta quien pretendía mofarse y burlarse de todos el pasado domingo?
El sabio Mahatma Gandhi decía: “Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino”.
¿Cuánto valen sus palabras, presidente Sánchez? Si no valen nada, Vd. es un presidente indigno y debe dimitir. Si por el contrario son, como decía el sabio, la antesala de los actos, ya está tardando en ordenar al ministro Marlaska que inicie acciones legales contra el personaje ese que preside la Generalidad de Cataluña.
Sí, presidente, ya sé que no hará una cosa ni otra. Está Vd. muy ocupado con Franco.
