Grupo de proetarras agreden, Chupinazo
Momento en el que los proetarras comienzan con sus agresiones (Twitter)

La permisividad que se tiene con ellos repugna

El blanqueamiento y la permisividad que se está teniendo con ETA y los proetarras repugna. En una región como Navarra repugna aún más todavía porque es el propio gobierno regional el que sale en favor y en defensa de sus actos de una forma ya demasiado habitual.

No hay más que ver la reacción de ese gobierno con los agresores a los guardias civiles en Alsasua, su comportamiento produjo una mezcla de vergüenza ajena e indignación difícil de aguantar. Ahora las consecuencias son actos como los sucedidos en el “Chupinazo” de las Fiestas de San Fermín.

Un grupo de personas cantaban el “Viva España” y proetarras ataviados con ikurriñas y carteles a favor de los presos etarras comenzaban a golpearles. Los valientes, que siempre necesitan ir en manada, se tapaban, además, sus caras para no ser reconocidos. Como si fueran unos justicieros de tres al cuarto golpeaban a unas personas solo por ejercer su libertad de expresión.


Y aquí no pasa nada

Y lo peor de todo no es solo que agredan, lo peor de todo es que aquí nunca pasa nada. Campan a sus anchas por las calles haciendo lo que les da la gana, golpeando a quien quieren y ordenando qué es lo que se puede y no se puede hacer y aquí no pasa nada.

O sí que pasa, que a ellos no les pasa nada y encima el gobierno no hace más que dar concesiones a sus admirados terroristas. Un mundo al revés en el que los delincuentes son los protegidos y los inocentes los perseguidos. Un mundo al revés que está provocando que a muchos se nos esté empezando a agotar la paciencia después de ver tantas injusticias.