Alberto Garzón, Urdangarín
Alberto Garzón

El chico de los recados de Pablo Iglesias

Cuando tu único futuro es la vida política te puede suceder lo que le está sucediendo a Alberto Garzón en los últimos años. Su partido, Izquierda Unida, era económicamente inviable y sus expectativas electorales prácticamente nulas. Como el asunto de los partidos políticos en España es más un negocio que otra cosa, decidió realizar una fusión empresarial para intentar salvar los muebles, sobre todo los de Garzón.

Se alió con Podemos, se transformaron en Unidos Podemos y Garzón se convirtió en el chico de los recados y de los cafés de Pablo Iglesias. Una especie de chico para todo a cambio de mantener su sueldo, sus prebendas y un asiento en el Congreso.

Desde entonces los mensajes que escribe Garzón a través de las redes sociales se han convertido en una especie de tontería continua en la que la última siempre es peor que la anterior.

El ingreso en prisión de Urdangarín

Tras la sentencia del caso Noos, el Tribunal ha ordenado el ingreso en prisión de Iñaki Urdangarín antes de cinco días. Los podemitas estaban esperando una especie de “chanchullo judicial” y que definitivamente el cuñado del Rey salvara su ingreso en prisión. Como esto no ha sucedido, a los podemitas se les ha venido el tinglado que tenían preparado un poco abajo.

Pero a Garzón esto le da igual. Él es un chico agradecido y servicial que cumple con su jefe sea como sea. Tenía que escribir algo en forma de crítica que agradara al jefe aunque fuera otra tontería más y así lo hizo.


Pero lo que no sabe Alberto, o no consigue entender, es que la gente que le rodea no es tan limitada como él y pronto le vino una respuesta que le dejaría en el sitio. Claro que él, a pesar de que sepa que lo que ha escrito es falso, no va a borrar su tuit. ¡Faltaría más!


De todas formas, conociendo al personaje no creemos que esto consiga reprimir su afán servil aún a costa de hacer el ridículo. Todo sea por un escaño vitalicio y unas vacaciones de ensueño en Nueva Zelanda.